1 de diciembre de 2018

Canalización del 28 de Noviembre de 2018


Noviembre 28, 2018
Enriqueta/Alexa (1).

… pero cuando nosotros estamos dispuestos y abiertos y nos dejamos llevar, nos da cada vez más y más esos momentos en los cuales cada vez más fuertemente lo vas a escuchar; esa voz interior, ¡y no piensen que están locos!, porque en algunos momentos en los que cuando están solos escuchan su nombre; que alguien los llama, ¡no sientan temor!, porque ya el Alma está pidiendo ¡que llegue el Ser para que se esté uniendo! Y entonces Nuestro Padre ¡sabe! que estamos ya en ese momento ¡tan importante! en el cual ¡escucharemos! y seguiremos adelante con su instrucción, con su inspiración, con esa guía maravillosa que solamente El nos da.

¡Ese también es un don!: ¡la intuición!, ¡la sensibilidad!, a más de escuchar ¡mucho más allá! de lo que hasta hace poco pudieran decir, a la vuelta de, algunos me han comentado: “Oye, ya son ¡nueve años! que nos hemos estado reuniendo”. Pero ¿qué es el tiempo realmente? Puede ser un suspiro, puede ser un parpadeo. Realmente aquí lo que importa es que ya estemos conscientes y saber plenamente ¡qué es lo que quiero! Estar consciente de ello ¡y abrazarme a todo ese sentimiento! que viene y que El nos entrega.

Créanme que Nuestro Padre está ¡tan cercano! ¡Más que eso!, ¡está dentro de cada uno de nosotros!, pero también habemos quien deseamos que -como aquí estamos en ésta densidad- ¡ver!, sentir, ¡tocar!; ésta ilusión que se empieza a resquebrajar, pero aún estamos acostumbrados y todo eso ya se está terminando.

Tenemos que aprender que en éste sentido ¡que está abierto y vivo!, podemos -sin verlo- vivirlo, sentirlo, tocarlo, saber que está ahí y cada vez más fuertemente. Ahí es donde empezaremos a sentir realmente que ya no somos los mismos; que ya estamos resurgiendo y nos estamos redescubriendo como lo que somos: esa grandeza que El nos entregó.

Yo les pido que a más ya de sorprenderse ¡y de alegrarse! porque alguien les comparte, como hoy, su hermana que está aquí, ustedes sientan y sepan ¡que también pueden hacerlo!; ¡que también son parte muy importante y divina de Nuestro Padre!; que ustedes también pueden ¡enarbolar! esa Llama Divina, esa flama, ¡el Fuego Eterno! que al sentirlo y llevarlo siempre consigo, donde quiera que estén, ¡porque se va desbocando! Es -como lo dijo en un momento dado nuestro amadísimo Maestro Saint Germain- “¡esa copa que siempre estará rebosando!”

¡Siéntanlo así!, porque sentirán ese deseo infinito, cada vez más fuerte ¡de compartir! ¡Y créanme! que así -al hacerlo- simplemente doquiera que ustedes lleguen, con sólo hacerlo, sin siquiera aún expresar una sola palabra, van a hacer sentir toda esa manifestación maravillosa; ¡esa aura!, esa Energía grandiosa que viene de Él, de Nuestro Padre, y que todo aquel que lo empieza a entender ¡lo goza!, se goza en compartirlo, en entregarlo, porque sabe que siempre lo estará recibiendo.

Mi Padre ya lo ha dicho: “¡Todo llegará como cascada!, ¡una tras otra cada manifestación! y aquello que estaban recibiendo a cuentagotas ya será tan fuertemente, tan abiertamente”. ¡Hará! -de verdad- un éxtasis de amor en cada uno de ustedes y en aquel, aquella, que también deseen escuchar.

Mi Padre ha dicho: “¡Ya basta! de que mis hijos piensen y crean que limitados están. Deseo que empiecen a recordar, que -así como lo dijo en algún momento- que hagan esa Conexión directa conmigo, porque les empezaré -ahora ya más fuertemente- a hablar”. ¡Siempre lo ha hecho!, pero nosotros -que siempre estábamos tan distraídos- nunca ¡hasta hoy! nos dábamos esa oportunidad.

¡Es tan importante amados hermanos!, ¡tan importante! que cada uno de nosotros -de verdad- siéntanlo en su corazón; cuando les he dicho que son “amados Atlantes”, que ya en algún momento en que el sacerdocio de aquél ¡hermano!, ¡Maestro!, ¡de todo lo que estuvo hablando!; de todo lo que estuvo compartiendo, y lo dijo: “Hoy aquí en éste tiempo. Luego será más adelante; en el principio, ¡en el cambio! en que llegará”.

Porque siempre así será. Siempre llegará el momento en el cual ¡es importante! que cada ciclo al terminar, al inicio del que sigue, para poder equilibrar a quien se hace llamar “la Raza Humana”, trascenderá, ¡se elevará!, ¡volverá a vivir! lo que hoy aquí, y en ese sentir -lo que llaman “existir”- sabrán que es una flama ¡que nunca se va a extinguir!; ¡que es Energía pura! que en cada uno de ustedes va a vivir, y que perdura.

¡No es verdad cuando te han dicho!: “Vive y sé feliz mientras dura”. ¿Por qué? Si lo que Nuestro Padre nos ofrece ¡es eterno! ¿Por qué no tendría que ser así? Nosotros somos los que hemos hecho el cambio, pero ahora ¡estamos volviendo a lo que fue hace tiempo!, a lo que en el principio tan presente tenías que eras eterno, ¡que tanto tiempo vivías! -amado hermano- y ahora volveremos a vivir ese tiempo.

Y si tú puedes pensar: “¿Y cómo? Quizá cuando vuelva a regresar”. Yo te digo que Nuestro Padre al tener preparado todo aquello que en ustedes ha empezado, lo dijo claramente; que nuevamente lo que se empezaría a vivir sería, y aquí, para que ésta bendita Estrella también al elevarse ¡con ustedes!, ¡y empezar a iluminarse!, sabrán cuánto tiempo.

Y entonces ahí entenderán lo que tanto se les insistió: el tiempo del no-tiempo es el que van a vivir; porque estarán recordando el que estuvieron aquí y de esto que les estoy hablando, de hace tiempo, cuando ustedes prometieron y juraron que -al volver- a sus hermanos ¡de esto también les estarían hablando!

¡Que algunos no lo creerían! ¿Y qué? Si vuelves la vista atrás cuenta te darás ¡que tú! en tu crecimiento ¿cómo empezaría? ¿Cuántas veces lo que es de Él Su Voluntad lo negarías? ¡Pero hoy!, hoy estás dispuesto a seguir adelante, ¡abiertos los brazos!, ¡y equilibrarte! y estar constante en esa preparación.

Cuando te he dicho que “abras las alas para elevarte” ¡es! que al hablarte te digo: ¡vive ya tu Evolución! Esa liberación que cada vez ¡más y más! en ti está.

¡Muchas cosas de manera inconsciente ya has empezado a accionar!, pero estás en el trabajo de dejar de ser ambivalente; saber que la dualidad ¡ya no!, porque si no, no te dejaría seguir adelante, y a esto que llamas “vida”, entonces nuevamente volvería ¡a truncarse!, y no estás dispuesto. ¡Sabemos! que quieres seguir ya! con el camino cada vez más y más abierto, consciente y permanente, ¡total!, una vez más.

Pero mi Padre lo dijo: esta vez, luego de ello es ¡para cada uno de ustedes la Eternidad!, ¡porque se logrará! Estaremos viviendo una Gran Epopeya.

Este Cambio Divino dejará ¡una gran huella!, no solamente aquí, sino en el Universo entero. Y hablo del Universo de Universos, porque ahí, donde se encuentra Nuestro Padre, ¡sabe! que esto que sucederá aquí. Es lo que El ¡tanto ha deseado! para nosotros sus hijos; los Humanos.

Entonces te pide que -de verdad- con el corazón abierto, con Él más insistentemente quieras hablar, ¡dispuesto y firme!, el corazón en la mente, en ese sentir y fluir.

Hoy estás aquí ¡no sólo para estar escuchando esto que te estoy compartiendo!, porque seguiremos hablando de todo lo que desde el principio del tiempo, ya lo dijo aquél gran y amado Maestro: “Y no te estoy advirtiendo. ¡Te estoy compartiendo! lo que escrito está y que sucederá; que todo aquel que se ha estado eligiendo, sentirá y sabrá en ese Gran Momento qué hacer y el Llamado escuchará”.

¡Duda no tengan de ello!, porque así será. Será siempre y cuando cada uno de ustedes siga -de verdad- ¡en lo más profundo de su Ser tocando!, ¡ahí en el interior!, las fibras más sensibles, ¡tan amorosas!, tal cual como El lo pidió; que no por nada cada vez más sensible estás.

Si tú dices que hay lugares o cosas que es para ti difícil con ello interactuar, date cuenta -hermano- que cada vez más esa sensibilidad te está avisando que estás dejando de ser Humano y que te estás elevando Plano tras Plano. ¡No te preguntes en cuál ya estás! Tú simplemente sigue adelante; sigue en esa Conexión y con Nuestro Padre no te canses de hablar, que la respuesta de cada pregunta ¡una a una! la tendrás. Vendrá de una manera ¡tan maravillosa! que duda de que viene de Él no la tendrás.

Se los dije una vez; que llegaría el momento en el cual todo lo que estuvieran sintiendo y lo que estuvieran viviendo lo iban a ver ¡tan natural!, ¡tan normal! Lo que para algunos -aquellos que aún no están dispuestos- sería algo sobrenatural. Pero hermanos; es simple y sencillamente que cada uno de ustedes está volviendo a lo que son; ¡a lo que es! al volver nuevamente a su Ser abrazar; lo que es cada uno de ustedes en éste Gran Despertar; lo que algunos ya están viviendo.

Y créanme; con lo que sientan que vibran y que hacen eco, ahí -amados hermanos- pregúntenle a Nuestro Padre si ese es el camino para llegar hasta Él y empezar a vivir lo perfecto. ¡Está bien! Yo te digo que aquí es donde todo aquel que así lo desee empieza a vivir en lo que Nuestro Padre preparó para cada uno: el Plan Divino. Sabrás que para ti ya no existe destino; ¡que todo te lleva en un sólo camino!: ¡el de la liberación! Trascender todo aquello que te detuvo. ¡Ahh!

El Gran Portal que se abrió y que ha venido abriendo puerta tras puerta, ¡tal cual! como Nuestro Padre lo dispuso. No tienen idea de lo que para ustedes será.

¡Sé! -y eso lo digo con ¡gran seguridad!- que cuando cada uno de ustedes viviéndolo esté, de lo que les dijo su hermana, presente lo tendrán, y sabrán que no les mintió; ¡que de todo lo que les habló! era sólo el Preámbulo Divino de todo lo que hoy por hoy -para cada uno de ustedes- Nuestro Padre preparó: el abrir y estar en cada Dimensión; el no sólo poder escuchar, sino también ¡tocar y ver a cada uno de aquellos Maestros que tanto les habló!

Cuando eso empiece a suceder, entonces sabrán ¡y querrán seguir adelante!, ¡aún más el paso acelerarle!, para ¿por qué no?, algunos ya no querrán regresar, y Nuestro Padre -que es tan misericordioso- ¡lo sabe! El te deja elegir y te dice ¡y te pide! dónde y cuándo te necesita. Si tú estás dispuesto hoy, aquí, para ustedes, en éste tiempo es ¡la Gran Cita!, en la cual ya se acerca ese Gran Momentum que vivirán.

No se pregunten: “¿Cuándo será?” Sólo sigan adelante, sintiendo, recibiendo, ¡invocando a Nuestro Padre! y a todos aquellos Maestros que han tenido a bien hablarles, y que están aquí, en éste círculo amoroso, glorioso. ¡Todo lo que ustedes deseen pedir! cuando es de corazón; cuando de verdad lo que tus labios expresan viene desde el interior, ¡todo! -amados hermanos- lo empezarán a crear.

Por eso es muy importante que todo aquello que deseen sea en amor, ¡y ser constantes!, para que provoquen y manifiesten el Momento Sagrado en el cual todo aquello que estén decretando, Nuestro Padre -hoy más que nunca- su respuesta es: “¡Sea pues! ¡Hecho está! Lo que me pida mi hijo, mi hija; su infinito amor y la profunda fe ¡lo creará!”

Entonces -hermanos- ¿qué es lo que necesitamos? Estar siempre fuertes, firmes, valientes. ¿Y qué importa lo que se pueda vivir? Si estás aquí ¡sabes! que tienes y que gozas de esa protección tan divina, tan amorosa, del infinito amor, que la vestimenta que El te entregó ¡tiene esa fuerza!, ¡y nada que no venga de Él logrará traspasar!, porque ¡lo que dentro está!, dedicado y en su nombre compartirá.

Así es como se mostrará a cada uno de ustedes. Así es como los verán aquellos que en estos días, ¡más adelante! se preguntarán: “¿Y entonces quién los guía?” La respuesta al unísono la escucharán: ¡Nuestro Padre!, “El Yo Soy”, “¡El Creador del Todo!”, “El Todopoderoso”, “El único Dios verdadero”, y seguir adelante en su nombre. Para eso estoy aquí y eso es lo que quiero.

Los Grandes Maestros; aquellos que han logrado y que con nosotros están, y que se dice que para algunos se han mostrado; créanme hermanos, ya empezamos a vivir ese tiempo en el cual todo aquello que se estuvo retirando ¡por no valorarlo!, hoy nuevamente empezó esa Gran Comunión, en la que aquellos que están plena y totalmente entregados; ¡que siguen! y desean hacer esa Gran Comunión en la Conexión con Nuestro Padre, vivirán y estarán en esos Lugares Sagrados.

Estarán compartiendo, escuchando y eternamente agradeciendo lo que viene de Él, de Nuestro Padre; ¡alabando continuamente!; escuchando su voz, de tal suerte que hoy por hoy también lo que El pidió; que al estar aquí, ¡antes! de que su Presencia y lo que El mostrará con gran complacencia, al empezarse a sublimar.

Antes de ello, aquellos que firmes han permanecido serán ¡aquellos que se han elegido! serán los que gozarán esos grandes momentos; porque el tiempo para cada uno ya será eterno. Esa Gran Promesa se verá cumplida. Ahora hermanos ¡todo empieza!

¿Quién atestiguará? ¿Quién realmente de todo esto que les he hablado lo vivirá? Será -amados hermanos- en éste cambio que se está dando con toda la fuerza; todo aquel que esté vibrando y cada vez más esa Energía grandiosa la esté elevando.

¡Ya está! Ha empezado y está tocando otras Dimensiones, que para ustedes ahora las puertas han abierto. Pero todo -amados hermanos- en infinito amor, para poder seguir adelante ¡con la guía! e inspiración de Nuestro Padre y cada Mensajero que El ha tenido a bien enviar, para que en esa guía, y luego de que ustedes empiecen a recordar, entonces sigan adelante en lo que es la verdad y la eternidad; la eterna vida.



Noviembre 28, 2018
Maestro Desconocido.

Por eso al hablar y éste mundo volver a topar; hoy como hace tiempo, ¡se supo instantáneamente! que para que ustedes pudieran recordar, era necesario de lo que El ¡al enviar un Emisario! conforme era su deseo, lo tuviesen que escuchar y saber. Y aquél que lo ha olvidado, es por eso que estamos aquí para recordarlo. ¡Tan importante!, porque todo lo que están viviendo, ya no sigan el camino ¡tan errantes!

Hoy aquí, al estar aquí con ustedes, puedo decir nuevamente que lo que se dijo y todo lo que llegará de lo que ustedes llaman “La Fuente” ¡es la verdad!

Cuando cada uno pueda lograr y empiece a traspasar ¡cada uno de los cielos que se abrirán!, ¡Dimensiones abiertas con Energías que están dispuestas! a entregar a cuerpos que en la simetría de lo que vivían en su día con día aquí, era necesario cambiar, para poder resistir ¡todo lo que ha empezado a llegar! de una forma tan directa, y entonces se puedan desprender de lo que ya es obsoleta: ¡la densidad!

Sabemos que algunos de ustedes están sintiendo, ¡cuenta se están dando! que a pesar de lo que les están presentando, ¡ya no les está atrayendo! ¡Eso es bueno hermanos!, porque están elevando ¡a más de poco a poco!, esto ya está sucediendo cada vez con un ritmo cada vez más acelerado.

Algunos de ustedes lo que ha tocado ha hecho una conexión o una resistencia, ¡un rechazo! de aquello que saben que ya no debe ni siquiera su cuerpo toparlo. ¡Y lo digo por ti!, que lo empezaste a vivir y te has preguntado: “¿Por qué? ¿Qué me está sucediendo?” Es simple y sencillamente que al volverte sutil, de las cosas que están aquí, y que solamente inarmonía pudieran entregar, ¡ya no más! Todo eso tu Ser, tu interior te dice: “De ello me tengo que alejar”.

Algunos se han empezado a preguntar, que entonces “¿cómo?, ¿de qué manera?”, para empezar a trabajar, que no sólo en su cuerpo, sino su interior y la mente, que dicen: “¡Cuánto trabajo me cuesta!, porque siempre se hecha a volar”.

Yo te digo hermano: tan sencillo que es en la paz y tranquilidad ver solamente ¡la Inmensidad! desde tu interior, ¡y el nombre bendito de “El Yo Soy” alabar!

¡Todo te lo da! La fuerza que te llega ¡tan directa!, que algunos dicen: “Es como una prueba”. Tú sabes hasta dónde ¡y qué es lo que puedes soportar! Estás provocando que tu cuerpo cada vez ¡más y más! reciba, y ahí mismo ¡expanda todo lo que de Él viene!, para que tú ¡doquiera que te encuentres! a tus hermanos compartas.

He de decirles que de todo lo que en la sincronicidad, lo que el Cosmos en la alineación que se vino a dar a ustedes ha estado entregando; ¿por qué algunos dicen?: “Constantemente -cuando me entrego a mi descanso- me estoy despertando”, y yo te digo: aprovecha esa gran oportunidad en que ¡“El Yo Soy” y el Universo entero te da! ¡Hazla contigo mismo y eleva tu decreto! Dile a Él ¡a lo que estás dispuesto!, porque entonces todo ello para ti se materializará, para ti y cada uno de tus hermanos. ¡Es tan importante que cuenta se den! que empezarán a dejar de ser humanos y vivirán en el Edén.

Yo lo digo ¡porque estoy aquí! en su nombre bendito, para poder compartir ¡con todo aquel que a pesar de lo que ha vivido está dispuesto y quiere volver a Él! ¡Todo lo que tiene preparado es tan grande!, ¡y es para ti hermano! Esta alegría que siento al decirlo. Verás cuando para ¡cada uno de ustedes quede al descubierto! todo aquello que siempre presente ha estado, ¡pero no podías verlo!

Lugares y momentos ya los tiene dispuestos para cada uno de ustedes. Corazón, mente y brazos abiertos, para escuchar, para recibir y adelante seguir.

Y estoy aquí para decirte también, que Cuadrante tras Cuadrante, al seguir adelante en ustedes -tal como lo ha dicho la hermana- ¡ya abierto está! ¡Y créanme!, ¡no será sólo una ventana!, ¡será la Inmensidad! Pero qué importante es ¡que la entrega sea total!, a pesar de todo lo que aquí, lo que llamas “ilusión” te quiera mostrar.

Eslabón por eslabón unido ya está; lo que es corazón con corazón, elevando hasta el Cosmos Sagrado, allá donde se encuentra “¡Quien todo lo ha creado!” y recibiendo está. ¡Y claro que ha escuchado! todo lo que cada uno de ustedes -al sentir- le ha agradecido, le ha pedido y le ha entregado.

¡Sólo quiero decirles que estén preparados!, porque a pesar de que se pudiera pensar que poca es la oportunidad de que -como en éste instante- de lo que se les viene a hablar. Ustedes desean ver; que se les quiera mostrar, ¡pero la hermana ha dicho una gran verdad!: nosotros les hemos venido a hablar de lo que está ¡en cada uno de ustedes! y de lo que harán.

Y he aquí que el deseo infinito de Él ¡es! que el Despertar no sea solamente de uno o dos; ¡tantos lo harán!, que es por eso que muy importante lo que se les va a mostrar.

Sigamos adelante; que con ustedes nosotros estamos, y esperando por aquél, aquélla que al ser llamado estará presente en el lugar señalado; ¡ahí! donde al empezar ¡todo será mostrado!

Hermanos; en éste tiempo ¡todo lo que esté sucediendo! para aquel que se ha elegido será simple y sencillamente que la promesa de “El Creador” en cada uno se verá cumplido.

Que yo soy su hermano, ¡y también estoy aquí para acompañarlos!



Noviembre 28, 2018
Enriqueta/Alexa (2).

De la bienaventuranza de la que tanto se habló, para los hermanos que estuvieran en la andanza, el plazo ya se cumplió.

Lo que hoy por hoy está sucediendo es que de todo aquel que se ha estado eligiendo, ¡muy importante! para seguir adelante: sentirá en su corazón y al escuchar el Llamado que Nuestro Padre tan amado hará con infinito amor, se les dijo e insisto en que todo estaría cambiando.

¡El Gran Reflejo Divino! al estar llegando estará indicando dónde y cómo, cuándo y por qué, ¡para qué!, cada vez, y entonces sabrás ¡que no hay más!

¡Tú has sido llamado! para vivir en la Gran Conexión con Nuestro Padre Divino, ¡todo lo que ya se había acordado antes de la Gran Invocación!, amado hermano.

Pudieras pensar que es de manera especial, pero al empezar a recordar, te lo vuelvo a repetir: lo verás tan natural, ¡porque sabes!, ¡sabrás el porqué y para qué estás aquí!

Y si tú así lo quieres llamar empezarás a “trabajar” en todo aquello que necesario es para vivir ¡ese Gran Despertar! y compartir con cada uno de los hermanos, que también -al verlo- quieran sentirlo, y dicen y dirán: “Mi camino con él quiero igualar”.

Hermano; de qué manera ¡con todo el corazón lo digo!, para hacerte sentir que en el Fuego Sagrado es como si dentro de ti hubiera esa hoguera, ¡pero nunca! te hará sentir que te estás quemando, sino solamente ese calor infinito que te está pidiendo ¡que ya estés actuando!

¡Que la Llama Trina en tu pecho cada vez más y más! -al sentirlo- ¡está inflamando! Te está diciendo: “¡Es el momento para que tú ya te estés iluminando!” El iluminarse -hermanos- ¡es recordar quién eres!, ¡y por qué y para qué estás aquí!

Que el mostrar y sentir ese amor ¡te va a llenar de tantos placeres!, y hacerlo y mostrarlo y entregarlo a cada hermano, y será perecedero, y será siempre, y estarás dentro de ti repitiendo: “¡Así es! ¡Hacer todo esto y entregarlo eternamente es lo que quiero!”

Cuando tú estás lleno de esa Gran Energía Amorosa ¡sabes! y sientes esa necesidad de compartirla y entregarla, ¡porque es tanta que te rebasa!; ¡que te agobia!, pero con esa gran alegría de saber ¡que viene de la Inmensidad! y que ¡sabes! que de Él estás recibiendo, porque ¡cuanto más das!, ¡más estarás sintiendo! Eso -amados hermanos- también escrito está. ¡Ahh!

Los Esenios en su trabajo ¡eso es! lo que siempre tienen a bien trabajar; saber y compartir, ¡vivir siempre en amor!, ¡porque es muy importante que al existir! lo que entregas es lo que tú eres ¡y viene de Nuestro Padre!, y también de ti, para cada hermano a quien con ese simple hecho le estarás entregando con gran alegría ¡no una esperanza!, sino esa semilla ¡de vida eterna! que también irás plantando ¡a cada paso! por donde tú vayas caminando.

Mi Padre desea ¡y es muy importante! que ya dentro de ti esté siempre fluyendo esa Luz, esa Flama Divina, que tal como en aquél tiempo lo dijo nuestro amado Maestro Saint Germain: “La Flama Divina dentro de ti ¡siempre esté viva! y que la puedas compartir ¡una a una! con todos tus hermanos, para elevarla hacia Nuestro Padre en un Acto Sagrado, en el cual sentirás y recibirás desde la Eternidad ¡muy profunda y totalmente que El! -el Padre amado- contigo está”.

El día para empezar a vivirlo ¡tan cercano está!, amados hermanos. Es por eso que se les dijo ¡que todo iba a cambiar! ¡Y así será! Verán ustedes cómo y de qué manera Nuestro Padre en grandes manifestaciones a ustedes les va a entregar.

Y no lo digo yo, ¡viene de Él!, con gran alegría. Es la verdad que su hermana con ese Gran Amor que siento por ustedes, sólo está repitiendo lo que viene y lo que escucha de “El Yo Soy”, ¡Nuestro Padre tan amado!



 Noviembre 28, 2018
Saint Germain.

¡Y es por eso!, ¡amados!, ¡amadísimos hermanos!, que yo les digo con gran alegría e infinito amor; que lo que viene en estos días y al iniciar a lo que llaman “el siguiente año”, verán lo que estarán viviendo; paso a paso, día tras día. Cada vez que nos reunamos verán ustedes ¡qué maravilla! ¡Amados, yo les pido estar preparados!

Sigan adelante ¡en Gran Consciencia! ¡Sean constantes! En la Energía Divina -¡esa sustancia que anima el templo que habitan!- he de entregar ¡a cada uno de ustedes! la Gran Vestimenta con la cual caminarán. ¡Y perdón que se los diga!, pero así será. ¡Amados! ¡Amadísimos hermanos! ¡Eso es lo que recibirán!

Tengan presente ¡quiénes lo harán!; aquellos que saben y que han estado ¡de verdad tan entregados!, ¡que se han elegido! y que me han dicho: “¡Claro que sí, hermano! ¡Cuenta conmigo!, que yo contigo voy a caminar”.

Entonces, ya está todo listo, ¡amados!, ¡amadísimos hermanos!, y entonces verán que habrá más cambios, ¡amorosos!

Entiendan ustedes que adonde llevemos a la hermana, adonde ella esté, es porque se lo estamos pidiendo; es porque Nuestro Padre amado ¡así lo está decidiendo! Hoy aquí. Verán ustedes ¡dónde más!, ¡y de qué manera!, y todo lo que sucederá.

¡Hermanos!; ¡lo digo con gran alegría! Ya vienen esos días en los cuales ustedes han empezado a festejar, y eso lo digo; recuerden cada ocasión cuando esto sucede. ¡Hoy! -de manera especial- ¡aprovechen! ¡Aprovechen! ¡Mediten! ¡Decreten! ¡Hablen con Nuestro Padre!, porque lo que se hace sentir cada vez que dicen: “Es tan especial”, porque ustedes recuerdan el momento, el día en que mi amado hermano aquí tuvo a bien encarnar. Todo se llena de una Energía amorosa.

¡Es muy importante! Envuélvanse en ella y compartan con los demás; pero de manera especial les pido a ustedes que la sientan y la vivan, ¡que la anclen!, porque su hermano, su hermano Saint Germain los va a visitar. ¿Y por qué? Lo acabo de decir, de manera especial.

Y a mi hermana ya le pedimos: habrá una reunión en la cual ¡de esto!, de lo que les vine a hablar ¡se tomará!, ¡se indicará!, ¡y a cada uno de ustedes se les entregará!

En ustedes está -de verdad- aprovechar, porque amados hermanos: ¡más que el cinturón electrónico!, ¡más que la Vestimenta Sagrada!, Saint Germain -de manera especial y en el nombre de mi Padre- lo digo: a quienes serán la Avanzada les voy a entregar.

Amados: ¡preparados! ¡Todos ustedes! ya serán llamados, ¡Y lo digo con gran alegría! En estos días, que será tan especial; que estarán envueltos en la magia que mi hermano que me vendrá a acompañar, ¡a ustedes también!, en mi compañía les hablará. ¡Y no sólo ello! Verán ustedes lo que sucederá. ¡Amados! ¡Amadísimos hermanos!: ¡estén preparados!, por lo que habrá.

Y yo les agradezco ¡con todo el corazón!, que a cada uno de ustedes lo que estarán viviendo, para luego acompañarnos y seguir adelante, ¡todo! lo que estará sucediendo.

Ustedes -amados- serán quienes aquí, en el nombre de Nuestro Padre ¡y por nosotros acompañados!, vivirán de lo más sagrado, que escrito está y se estará cumpliendo.

¡Amados!; ¡no olviden que los amo!, y siempre los estoy acompañando.

¡Tengan presente!, ¡aprovechen!, ¡sientan, reciban y compartan! con gran alegría toda esa Energía Amorosa, cristalina, grandiosa, que viene de Nuestro Padre, y en esa preparación en ustedes también envuélvanse en esa Espiral de Amor, y en la Llama Violeta que Saint Germain -su hermano- les entrega, y en la Gran Amatista, en ese Rayo Sagrado ¡que todo en ustedes estará transmutando! Con ello se estarán preparando. ¡Muy importante!, ¡amados!, ¡amadísimos hermanos!, porque el próximo año estaremos empezando.

Y reciban amorosamente ¡toda la Energía!, ¡la Llama Violeta! que Saint Germain les entrega, y los envuelve ¡no sólo a ustedes!, ¡a todos mis hermanos! y a esta bendita Estrella.

Yo soy ¡Saint Germain!


Noviembre 28, 2018
Enriqueta/Alexa (3).

Al seguir las manecillas del reloj y ocupar el espacio en el cual hacen unión en estos días, y todo lo que ya finalizó será, y tocando desde el Infinito lo que llegará, ¡y no será un caso fortuito!, realmente la Vibración en aquellos que preparados ya estén se elevará, y entonces podrán escuchar el Llamado que se hará.

Todo aquel que ha esperado y que sabe que en éste tiempo estaría sucediendo, entonces para estarnos reuniendo -Padre mío- todo lo que tú has indicado -porque así está escrito- estará empezando.

Entonces, al empezar a avanzar lo que el reloj del tiempo del no-tiempo empiece a marcar, ya que ni las arenas del desierto podrán contar, sólo escucharán aquellos que preparados están; que se han elegido y que en tu nombre -Padre mío- hemos venido a despertar, a compartir, para que recuerden y en esa Dimensión Amorosa seguir, pero también aquí, como cada hermano -en tu nombre ¡tan sagrado!- hablarle.

He aquí que todo se ha dicho; lo que hoy has pedido, Padre mío. ¡Bendito tu nombre! ¡Bendito! en el Infinito, desde el inicio hasta lo que llaman “final”, pero que es solamente que así lo sentirán en el ser y estar, en Gran Amor Multidimensional.

Y entonces también aquél, el Maestro que al llegar y del infinito amor de Nuestro Padre hablar, también, así como ha compartido estará entregando.

¡Sabrás hermano! lo que en tu interior, lo que llamas “Dios Vivo” estará no sólo fluyendo, sino también elevando. ¡Dentro de ti vivirás un gran cambio!

Y entonces, se cumplirá lo que ¡en Corintios 12 escrito está! -amados hermanos- a fe que mi Padre al dictar y cada uno entender, aquél que profetizó y que lo escribió, y que de tiempo en tiempo en algunos solamente se cumplió. Hoy aquí serán ¡cientos!, ¡tantos más! que estarán despiertos y que tu nombre alabarán, ¡Padre mío!, abriendo los brazos, bendiciendo tu nombre, sabiendo que paso a paso, al estarse acercando, tu Luz desde la Inmensidad los estará iluminando.

Esto es ¡lo que en Apocalipsis! también quedó escrito y que oculto en ese manuscrito había quedado, pero es tu deseo que en éste tiempo sea recordado ¡no sólo esto! También escucharán, verán y vivirán lo que de ti viene -Padre mío- y que ¡cada Emisario! a ellos ha traído y entregará.

¡Hecho está! ¡Así sea!, Padre mío. ¡Bendito seas por toda la Eternidad!

Que la preparación sigue adelante. Que el día de mañana -que es muy importante- cada uno de ustedes se den un momento para con Nuestro Padre encontrarse, para conectarse.

Estarán activos todos los filamentos. Cada uno lo sentirá y sabrá en qué momento, cómo hacerlo. ¡No estarán en soledad! ¡Estará El! -Nuestro Padre- ahí, con cada uno, y también uno de los Guías, y si me lo permiten también su hermana Alexa estará acompañando; estarán sintiendo, ¡les estaré hablando!, amados hermanos. ¡Nunca han estado solos! ¡Nunca los hemos dejado! Así es, así será ¡por toda la Eternidad!

Estaremos nosotros en un Gran Ritual en lo etérico, ¡pero con ustedes!, y lo estarán sintiendo; lo estarán recibiendo, amados hermanos. Les estaremos compartiendo el principio de esa preparación. ¡Esa! que mi amado hermano les ha hablado. ¡Háganlo con infinito amor y gran dedicación! Ya los estaremos llamando.

Que yo soy ¡Alexa! y entrego a ustedes también -en Gran Amor- ¡la Llama Violeta! Que ella los envuelva en esa Gran Espiral bendita e inmortal.

Y también -amados hermanos- les entrego ¡la Antorcha de la Libertad! ¡Libres quedarán! ¡Libres estarán! para seguir adelante. ¡La Gran Avanzada va a empezar! ¡Benditos sean hermanos! ¡Benditos!, en el nombre de mi Padre tan amado.

Que yo soy ¡Alexa!, con ustedes, y en éste momento -de manera especial- entrego la fuerza bendita, la Energía Cristalina de Nuestro Padre. ¡Es importante! ¡Recíbanla! directamente a ustedes ¡el Chakra Coronilla!, penetrando, avanzando en todo su cuerpo.

La preparación ¡está iniciando! Mañana con ustedes -en infinito amor- Alexa acompañando. ¡Ahh!



Noviembre 28, 2018
Enriqueta.

… pero nosotros también compartir y entregar ese amor que cada vez creciendo más y más estará, donde estemos, donde nos encontremos, con quien nos crucemos; con aquellos hermanos, hermanas, que nos damos cuenta que están necesitando.

Que no es necesario muchas veces tener que acercarnos y estarlos tocando; así a distancia, con sólo observarlos, enviarles, envolverlos en el amor, en la Energía Divina de Nuestro Padre; con sólo desearlo. No olviden que nos han dicho, ¡más ahora!; que todo lo que sintamos y lo que estemos deseando lo vamos a estar creando.

Vamos a ver a nuestros hermanos con amor. Vamos a pedir que estén sanando. ¡Pero no solamente cuando veamos algún enfermo!, ¡no solamente de su cuerpo!, ¡sino también de su interior!; que ahí es donde todo empieza.

Vamos a pedir la completa y total sanación ¡desde lo más profundo del corazón!, ¡del Alma! de cada uno de ellos, ¡de nosotros mismos!, para estar cada vez ¡más y más fortalecidos!, ¡y que ellos también sientan ese cambio! y que deseen seguir adelante ¡en alegría!, ¡en amor!, ¡y que hablen con Nuestro Padre!, así como nosotros.

Amados hermanos; ¡vamos a aprovechar esta Gran Energía que está llegando!, para anclarla y expandirla y entregarla a diestra y siniestra, hermanos. Vamos a hacerlo. Vamos a vivirlo. Vamos a compartirlo, y llevar presente en nuestro corazón que ¡todo está cambiando! y que todo lo que vivamos va a ser para bien y en el nombre de El.

Que ya se nos dijo: ¡más cambios estarán llegando! y el próximo año muchas cosas vamos a estar viviendo, para gloria de su nombre.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario