11 de junio de 2019

Canalización del 5 de Junio de 2019.

Alexa (1).

… todo lo que Nuestro Padre hace, lo que nos muestra, ¡es! -en la verdad- ¡perfecto!, porque cada uno de sus hijos somos de manera individual su predilecto. Cada uno elige de qué manera va a seguir el camino, sin permitir y no escuchar a cualquiera, sino solamente la voz que viene de Nuestro Padre, de lo divino.

Es por eso que mi amado hermano lo dijo: “La casa de mi Padre tiene muchas moradas”, y así es, y quiénes de alguna forma, en esta Gran Energía que cada vez ¡más y más está llegando!, y día a día al sentirlo, mis hermanos -aquellos que se eligieron- lo empezarán ¡y ya lo están mostrando!, que en gran regocijo.

Ustedes recuerden, porque esto lo digo; que en el principio, cuando Nuestro Padre al hacerles sentir, al hablarle a nuestro amado hermano que escrito dejó, que indicó tal cual: “En la verdad de Nuestro Padre, quien camine en la verdad y en el amor, en el perdón, no tendría ¡nada!, ¡nada de qué preocuparse!, ¡nada qué lamentar!”, porque así, aunque se haga y venga “el cambio” -como se ha dicho- en esta bendita Estrella, que no solamente el climático, también -amados hermanos- que ese es el principio ¡y lo más importante!; todo lo que se conforma, la conexión que tenemos con todos nuestros hermanos, sean Intraterrenos, sean también los que con nosotros van caminando, que nos van acompañando, aunque nosotros al hacer la separación no los reconozcamos como humanos, sino simplemente como Ser vivo.

Ya pronto, pronto se verá, ustedes lo comprobarán, que Nuestro Padre nos ama tanto que qué importa cómo se muestre aquí, hoy, en este lugar, cada uno de ustedes. Y también lo llegué a insistir, a repetir: que todo lo que llamamos también “objetos inanimados”, ustedes cuenta se darán cómo también responden -en el Ciclo Sagrado- a la Energía Amorosa ¡y tan divina!, la Vibración de Nuestro Padre. Todo esto lo entenderán, lo comprobarán, lo vivirán y lo compartirán.

Ya se inició también cómo en respuesta -¡pero amorosa!- aunque algunos piensan que lo que manifiesta cada hermano, que ahora en cada cambio, con fuerza, algunos dicen que “si están enojados por todo lo que nosotros hemos hecho, cómo los hemos atacado”. También verán que de manera amorosa ellos nos hablarán; se harán sentir, porque ¡nadie es menos ni nadie es más!, y al unir, al seguir adelante, con sólo hablar, con sólo compartirles ¡y escucharles! -que es lo principal- para que entendamos cómo ellos a nosotros se unen en este Despertar, porque está sucediendo y así será.

Aquél de ustedes, lo que está viviendo al seguir adelante, al cada día sentir cómo su cuerpo está tan vibrante, cómo se sacude, algunos dicen que es síntoma de molestia, dolor, pero ¿cómo entonces para poder purificar lo que es tu cuerpo?, ¡y que escuches a tu corazón! Tienes que darte cuenta que nada más importa, solamente lo que viene de Nuestro Padre, para que tú -mano con mano- con nuestros hermanos sigas caminando, y no solo con ellos; con todos aquellos que aquí nos están acompañando.

Todo de lo que se les estuvo hablando; lo que tanto se insistió cuando se dijo que “llegaría el momento en que ¡todo estaría cambiando!”, que ya de una forma en la cual ¡se estuvieron habituando! se seguiría adelante; que ya era importante, ¡ya es importante! que se esté accionando.

Algunos de nuestros hermanos dicen y han comentado: “Ya lo estoy haciendo. ¡Yo ya he empezado!” ¡Bendito mi Padre!, porque si lo ha inspirado, ¿qué es lo que nosotros -que aún no iniciamos- tendríamos que hacer?; desearle y enviarle ¡tanto amor! para que Nuestro Padre lo lleve directo hacia Él de regreso hacia el hogar. Pero antes de ello, si esa es la forma como lo necesita y de que todo lo que al llegar aquí tendría que hacer, lo va a realizar.

Hermanos; tomen en cuenta ¡que no todos! reaccionamos ni lo que haremos será igual, pero ante Nuestro Padre, ante sus ojos ¡así será!, porque recuerden precisamente cuando les dije, ¡cuando insistí! en Corintios 12. ¡Es muy importante!, porque hoy aquí, ¡eso es! lo que está sucediendo; pero tener presente que nadie es menos, porque todos caminaremos en esa unidad, en el amor y en la Conexión que Nuestro Padre al empezarnos a crear, ¡y no sólo a nosotros!, sino a todos nuestros Hermanos Elementales, que son de los que les he estado hablando; que tan amorosamente ¡hoy y cada vez más fuerte!, ¡y mira que ya están actuando!; ¡pero no hay que pensar que están enojados!, que están molestos. ¡No, hermanos! Recuerda que también de la Energía de tus sentimientos, de lo que ¡tú! le estés enviando, eso es lo que está recibiendo; simple y sencillamente ¡eso es lo que se está mostrando!

Si tú sientes y le muestras amor, y desde tu pensamiento le envías -¡con todo tu corazón!- el que ellos sientan que te estás uniendo, ¡que estás sintiendo! lo mismo que él, y que le estás enviando, ¡estás conversando!, ¡le estás pidiendo que te permita irlo acompañando!, para que los dos -en esa misma Vibración- sigamos adelante, para escuchar y hacer lo que nos pida Nuestro Padre.

¿Qué es? lo que al estar todavía en la vestidura, en esa media, todavía medio letargo en el que estaba, era necesario para que cada uno de ustedes lo sintiera, ¡pero que hoy lo recordara!

¿Qué fue lo que Nuestro Padre indicó?, que a través de aquel hermano que también ¡tanto! de cómo lograr la comunicación habló; ¡de cómo tú podías hacer! para con Nuestro Padre hacer la Conexión, y nosotros les dijimos que eso y mucho más, pero que supieran y sintieran ¡y buscaran! cada día hacerlo, ¡para escuchar!, sentir y recibir la guía de Nuestro Padre eterno.

Uno de los ensayos que lo único que hicieron y lo que sucedió es que fueron el preámbulo glorioso de lo que hoy, de hoy en adelante cada uno de ustedes estará viviendo; ¡de qué manera conectar! con cada Elemento, o con cada Elemental; ¡cómo ellos! con nosotros también los escucharíamos y vendrían a hablar. ¡Muy importante, hermanos!, que lo tengan presente.

Hoy es el momento en que cada uno de ustedes -porque lo está solicitando Nuestro Padre- con fuerza y con ahínco, con infinito amor, cada día de su vida le dediquen al menos, ¡al menos un instante! para hablar con ellos. No piensen que ya pasó tiempo. Recuerden también de lo que su hermana les habló; que llegado el momento aquello que pensaban que “en el olvido quedaba”, cuando ya se necesitara estaría presente, que no sólo en su mente, ¡ahí en su corazón!

De esto es -al iniciar- de lo que su hermana les viene a hablar. ¡Muy importante!, porque lo que sucederá luego, para ustedes de manera ¡tan individual!, pero ¡muy especial!, estarán y escucharán, compartirán y vibrarán en lo que Nuestro Padre de hoy en adelante, en ustedes ¡ya!, ¡paso a paso! activará y despertará.

Hermanos; es por eso que les digo: ¡que no se sorprendan! de lo que estarán viviendo, porque tal como algunos de esa manera lo estuvieron entendiendo: el “Dios Vivo” -Nuestro Padre tan amado- se hará sentir; ¡lo van a vivir!; estarán continuamente escuchando ¡lo que de Él viene!, y que es para ti hermano.

¿Cuántas veces? -y ustedes podrán hablar del tiempo- ¿cuánto tiempo desde que iniciamos?, ¡tanto que hemos escuchado y lo que ha pasado!, en su mayoría de los que aquí están compartiendo con su hermana, y amorosamente al acercarse escuchar del mensaje de Nuestro Padre, ¡porque es!, porque saben y lo han sentido; pero de hoy en adelante no solamente eso: ¡van a vivirlo!; se irá mostrando ante ustedes ¡paso a paso!, y depende que amorosamente así lo acepten; lo sientan; porque lo vivirán; porque esa promesa que Nuestro Padre les dio ha empezado. Se cumplirá.

Hermanos; de manera individual cada uno -se los digo con el corazón- si dispuestos están seguiremos adelante, porque la Gran Invocación cuando se eleva hacia Nuestro Padre y lo haces ¡con todo el amor! y el corazón, tú verás la respuesta que llegará ¡tan directa! ¡Ya está! Sólo permite, escucha, ¡siente! todo lo que desde esa Dimensión, desde donde se encuentra Nuestro Padre, desde donde escucha, recibe, te observa y te abraza “El Yo Soy”.

El dice, Nuestro Padre ¡repite incesantemente!: “El momento ha llegado, y todos aquellos de mis hijos no sólo lo estarán hablando: lo sentirán; lo vivirán, ¡todo! lo que de la Fuente “El Yo Soy” ahora ¡más que nunca!, amorosa y abundantemente les estará entregando”. Y es así.

Todo aquel de mis hermanos -y no lo digo por ustedes, que los que aquí están escuchando- también lo hago por aquellos que a los cuatro puntos cardinales de aquellos de mis hermanos que también llegaron a hablarles; sepan que el momento del Gran Despertar para ustedes ¡ya está!

¿Quién conforma la Gran Avanzada? ¿Qué Ejercito Amoroso la forma? Amados hermanos; aquellos que son amorosamente quienes al escuchar la voz de Nuestro Padre, al recibir y también en respuesta decir: “¡Ahí estaré!, o te pido que en ese momento, en el tiempo de los tiempos -Padre- permíteme, para que al despertar, al volverte a escuchar, a mis hermanos de ti, del infinito amor que nos profesas ¡y de qué manera lo muestras!, también hablarles ¡y todo ello de ti mostrarles!, permitiéndote ser instrumento de amor, para que a través -ya unido yo a mi Ser- vean que ésta es la verdad, la Gran Verdad en la Gran Revelación, que en el tiempo de los tiempos de lo que tanto se habló, tú lo mostrarías en infinito amor, y que aquél Ejército del que tanto se habló ¡soy parte de ello!, porque al frente nuestro se encuentra y está “El Yo Soy”.

Mi Padre está indicando; ustedes ya saben, les había compartido que cada vez más insistentemente, instrucciones a su hermana le ha estado dando. Hoy por hoy muchas de las cosas -y lo digo con gran alegría y con  infinito amor- están, las están viviendo, las estamos viviendo, y -aunque no lo crean- “Proyecto Shirón” va caminando, porque tal cual como su hermana en algún momento les insistió que ya había iniciado, quizá para algunos ¡cuántas preguntas! y todo lo que también interiormente se estaban cuestionando: “¿Pero de qué manera?, si nos siguen hablando”.

Recuerden hermanos que también se les dijo, ¡y yo lo repito!: ¡primero ustedes hermanos!, primero ustedes, a quienes serán a quienes se les estará preparando. Mi Padre ha insistido amorosamente que así sea y así será, porque con quienes ¿a quiénes preparará? Después de esta preparación, Nuestro Padre tan amado, a aquellos que se eligieron y que amorosamente han aceptado, se han dejado llevar, están en ese proceso amoroso.

El todo lo ve; ¡cada corazón! ¡No importa el lugar! ¡No importa! -amado hermano- cómo y de qué manera estés; lo que ve ¡es tu corazón! y eso es lo que al elevar cada vez ¡más y más tu Vibración!, fuiste al encuentro de la Gran Energía Sagrada, que al hacer conexión contigo, ahora -tal como dije- la melodía cada vez ¡más y más! -al ser elevada- cada uno lo sentiría y lo estaría viviendo.

Todo esto y la conformara como mi Padre -tal como lo ha estado diciendo- con cada uno de ustedes ¡al empezar a hablar! indicaciones dará, instrucciones de qué es lo que desea. Si algunos se preguntarán: “Pero ¿y cómo empezará? ¿De qué manera lo voy a realizar?” Nuestro Padre sólo te pide estar atento, porque en tu interior de una forma u otra, ¡o si tú así lo deseas! también a través de tu hermana ¡Alexa! te lo estará diciendo.

¡Esto! si así es como tú deseas empezar, será solamente el inicio, porque lo que Nuestro Padre desea -¡y eso se cumplirá!- que cada uno de ustedes en esa Conexión tan directa con Él, te vas a dar cuenta que precisamente este es el tiempo en el cual tanto se insistió y se está cumpliendo; que cada uno de ustedes son -amados hermanos- sus Mensajeros de Amor, ese amor tan grande, infinito, inagotable.

De inicio ¡esa es la mejor arma! que pudiera -a cada uno de ustedes- Nuestro Padre entregarle, porque luego de ello; lo que viene después, en abundancia, como una cascada amorosa lo van a vivir, a mostrar, ¡primero a sentir! Por eso -hermanos- sus cuerpos ¡en ellos se sigue trabajando!, y se les pide que ustedes también lo hagan; en esa purificación, en ese infinito amor, tal como mi Padre, ¡Nuestro Padre te haga sentir!; qué es lo que necesitas dejar, para que sea en Gran Aceleramiento, y lo sientas y lo veas con claridad y logres la Conexión ¡tan directa! -amado hermano- porque nuestros amados Maestros al de eso hablarnos, su deseo es llevarnos a hacerlo de la manera tal como ellos ahora lo están pidiendo.

¡De ello habla la Gran Invocación! ¿Cómo entonces la estás repitiendo? ¡Mi Padre desea que a la par la estés sintiendo!, que realmente ¡hasta lo más profundo de ti sepas! y de manera vehemente también de esa manera, de esa forma la empieces a vivir. Entonces sabrás -amado hermano- todo lo que en ti ¡hay!, porque empezará a emerger, a resurgir, ¡y serás tú el que primero lo va a ver!

Nuestro Padre ya todo lo tiene preparado. Quizás alguno de ustedes -al escucharlo- dirá: “¿Cuántas veces? ¿Cuántas veces?” La Luz de mi Padre -tal como se dijo y hoy lo repito- entiéndanlo así: “Y llegará como un ladrón”. ¡Ay de aquél!, ¡ay de aquélla que no esté preparado!, porque entonces no entenderá y tendrá que esperar, porque tampoco lo sentirá a la próxima ocasión, a la siguiente oportunidad.

Teniendo presente que Nuestro Padre ¡nos ama tanto!, ya no es posible, ¡ya no se permitan caer en la distracción! -amados hermanos- que es Nuestro Padre el que irá indicando a cada uno de ustedes y verán de qué manera. ¡No se pregunten!, porque entonces volverían a caer en esa distracción en la cual al pensar: “Deseo liberarme. ¡Deseo todo transmutar! ¡Deseo llegar hasta mi Padre en esta oportunidad!”, pero siempre también ¡decreta!, ¡invoca!, ¡habla con Él! ¡Pídele que sea El! el que te haga sentir, el que te de señal tras señal, ¡porque es así!, ¡pero que tú también te permitas verla!, ¡sentirla con toda la claridad!

¡Ya no puedes seguirte distrayendo!, amado hermano. ¡Ya no sigas buscando lo que en ti siempre ha estado! ¡Ya no insistas en que sea otro!, ¡u otra!, ¡el que te muestre de qué manera tengas que hacerlo! ¡Uhm! ¡Es Nuestro Padre el que tiene todas las formas! ¡Es Nuestro Padre! el que ya -al entregarte- y en este exterior ¡todo lo que conforma!

Ten presente y no tengas duda que cuando ya llegó tu momento, ¡así con toda esa premura!, ¡instantáneamente sentirás!, ¡escucharás!, ¡verás!, ¡y compartirás!, ¡recibirás! todo aquello que te activará ¡lo que tu Ser para ti ya tiene!; lo que Nuestro Padre, nuestro amado Padre al crearte, ¡siendo un Ser maravilloso!, y ahora en este tiempo ¡con tanto gozo! mostrará nuevamente de ti, ¡para ti y para los demás!, ¡para que vean en ti su poder infinito!, ¡que es Él!, el que ¡a través tuyo!, porque en cada palabra, ¡así!, al hablarle a tu hermano, al hacerle sentir, sabrá que esto que tú estés mostrando; lo que viene de ti es porque Nuestro Padre tan amado te lo está haciendo sentir, para a él, a ella compartir.

Es por eso que se te insiste que sea en infinito amor; pero también en Gran Humildad y sobre todo hermanos, porque hay quienes todavía tienen que trabajar ¡la paciencia!, ¡la prudencia!, para que en esta libertad ¡todos caminando en unidad!

Al hacerlo entonces mostraremos que -tal como nos han llamado nuestros amados Maestros- somos nosotros los indicados; que somos y que ¡escuchemos que ellos digan!: “¡Son de los nuestros!” La Gran Avanzada que Nuestro Padre -al hablar de este tiempo- también mencionó: “Y ahí estarán, ¡mi Gran Ejército Amoroso! con aquellos que a mí volverán y que se elegirán. Con ellos compartirán, para que mis hijos, los que se estén eligiendo, se den cuenta ¡y sepan!, porque lo van a estar viviendo; que solos ¡nunca los he dejado!; ¡que tanto los amo! y que “El Yo Soy” cada vez ¡más fuertemente! los está abrazando”.

Y de esa manera tan vehemente ¡ustedes también!, no importa dónde estén, dónde se encuentren, porque estarán ¡ahí!, ¡ahí precisamente! donde Nuestro Padre los necesite, donde El pida, ¡como hoy aquí!, en este lugar, que con Gran Amor El tuvo a bien indicar. Y quiero que sepan que lo que va a cambiar será, porque en el nombre de Nuestro Padre y de su amor infinito, lo que aquí suceda, ¡eso es lo único que se mostrará!

Ya es el momento, y ustedes -hermanos- serán los primeros que cuenta se darán que no miento, que todo será, palabra por palabra, ¡paso a paso!, ¡lugar tras lugar!, donde mi Padre amado ya ha tenido a bien indicar, porque ahí y desde ahí partirá lo que viniendo de Él ¡tan sagrado!, aquellos que se acerquen buscando sanar lo recibirán.

Y vuelvo a insistir, que no será solamente el cuerpo, porque lo primero para que esto suceda y ante sus hermanos lo puedan mostrar, ¡será el interior!, aquél que -en Gran Amor- Nuestro Padre tendrá a bien purificar; pero primero con ustedes, ¡primero a ustedes! -amados hermanos- para que luego de ello -al compartirlo- ¡hagan sentirlo!, y que aquellos que lo estén viviendo, frente a los que Nuestro Padre les esté indicando y de Él estén hablando, verán que no solamente destellos, sino toda la Luz que viene de la Eternidad, y el Campo Aúrico que cada uno de ustedes tiene -por voluntad de mi Padre- a partir de hoy va a cambiar, con toda la Luz, con toda la fuerza y en tal magnitud, porque en su nombre y tal como Él lo desea, cada uno de ustedes tendrá la destreza, al recordar la inigualable grandeza que Nuestro Padre les da.

Es por eso que su hermana Alexa que con ustedes está. Sólo vengo a compartir, a que cada uno comience a recordar. Y así será -hermanos tan amados- que es Nuestro Padre quien los estará guiando, y en su nombre amoroso, hoy por hoy su hermana de esto les sigue hablando.

Y al compartirles y hablarles ¡del Gran Despertar! que cada uno de ustedes y en el inicio mostrarles que es así; que todo lo que viene de Él; lo que nos da, entiendan, y permitan resurgir ¡lo que en cada uno!, ¡que todavía en algunos luchando está por salir!, pero en otros -¡bendito mi Padre!- ya inició, para que en la Revolución Amorosa y tan gloriosa, venciendo fuertemente a la densidad, la Luz hacia Nuestro Padre tan amado -al avanzar- se muestre y la sientan también nuestros hermanos, mis amados Hermanos Humanos.



Junio 5, 2019
Ángel Ráh.

Deseamos que ustedes tengan esto fiel y totalmente presente, no porque -como ustedes lo han comentado- en algunos días, en algún tiempo la hermana estuvo ausente.

Es importante insistirles, ¡repetirles! que recuerden que las cosas ya no serían así; que en el Nuevo Vivir cada vez que sea la instrucción habrá una reunión; pero los lugares -como éste- que tuvo a bien señalar “Aquél que todo lo puede”, porque siéntanlo, ¡aquí está! para ustedes -hermanos- como otros que se tendrá a bien activar.

Ustedes, ya se indicó quién ¡y quiénes! al estar recibiendo a aquel hermano que tanto lo necesite y que hasta aquí llegó; aquél, aquélla que vendrá -como algunos lo han dicho- ¡con “tal necesidad”!, pero entiendan y sepan que aquél que de corazón lo haga ¡es! quien -en esa Apertura Sagrada- recibirá.

¡Este es el tiempo!, y día a día mostrándose estará, a pesar de lo que esta ilusión ¡tanto insiste y les quiere mostrar!, que si para la preparación tienen que estar aquí o allá. ¿Y quién?, ¿quién? -si no es el Padre amado- los llevará, hermanos. Y sabrán por qué hablándoles de esto estoy.

¡El no va a permitir que haya ya distracción! Que aquel, aquella que se está entregando ¡y que tanto le ha hablado!, ¡como tú hermana!, que tanto has insistido y les has dicho: “Por favor ¡muéstrame! que lo que veo y lo que siento no es lo mismo. ¡Quiero sentir esa unión para volver a ti!, ¡para sentir en mi corazón!, ¡y saber ciertamente que eres sólo tú! el que me lleve, a través ¿por qué no? ¡de los Maestros!, ¡de aquél, aquélla que será mi guía! -porque así lo has dicho- y tal vez, por qué no escuchar también ¡que si tanto te lo he pedido!, ¡escucharlo directamente!, y cuando eso suceda ¡no andaré más aquí o allá!; sólo haré ¡Tu Voluntad! y estaré donde “El Yo Soy” me pida”.

Entonces hermana, yo te digo: ¿qué es lo que esperando estás?, si hoy ¡y desde antes! lo que se ha dicho ¡es la verdad!, pero ¿qué es lo que has sentido?, ¿qué es lo que has entendido?

Y ahora vuelvo también para decir estas palabras para todos ustedes: ¿qué es lo que al escucharlas han sentido?, ¡porque todo lo que han vivido!, aún hoy ¡que cada vez más! en esta aceleración, y se habla de tal Vibración, ¿y por qué no?, si nosotros estamos en su nombre, si con ustedes caminamos y les hablamos, pero también ¡como Él!, ¡que ve todos los corazones!, si en su nombre nos hemos acercado, ¡sabemos!, ¡escuchamos! quiénes de ustedes ¡realmente están entregados!; quiénes de ustedes realmente al haberse preparado, ¡pero en el sentir!, ¡en el desear estar ahí!, ¡donde El los necesite! Esto es lo que ustedes mismos han estado abriendo.

¡Es por eso que la hermana en el inicio esto les estuvo repitiendo!; que lo que El pidió para que hicieran su preparación, para que al invocarlo hicieran esa Conexión. Entonces ¿de qué otra manera? ¿Por qué si les dicen?, ¿por qué si les hablan que hagan una triangulación? Hermanos; si Nuestro Padre está ofreciendo ¡que de manera directa!, ¡hagan la Conexión! ¿Qué es lo que están esperando? ¿Aún insisten en hacerlo de otra forma?, ¿para que entonces logren del camino desviarlos?

¡No es eso lo que El busca! ¡No es eso lo que El desea! ¡Es por eso que nosotros hablando de esto estamos! Y no lo digo solamente por quienes aquí están, ¡porque esto hay más que lo estarán escuchando! ¡Y sabrán a qué me refiero!

¡Ya no más! El Gran Momento lo están viviendo. Es el tiempo de los tiempos, y aunque así no lo quieran creer, está sucediendo que El está indicando qué y de qué manera se hará, ¡cómo se está iniciando!, porque instrucciones está dando a quienes son sus Emisarios; a quienes ha estado enviando. ¡Ah de aquél que no quiera creerlo, ni mucho menos sentirlo!, porque entonces ella o él mismo se está negando a vivir el Gran Momento por el cual -con infinito amor- al estarles hablando se les pidió estarse preparando.

Algunos están pensando: “¡Sí ha habido! quienes lo han logrado, ¡pero hay Maestros quienes los han preparado!” ¡Dimensiona hermano! Permite que tu mente ¡ya no se esté fraccionando! ¡Es por eso que te hemos pedido que sea tu corazón el que ante estas palabras esté reaccionando!, porque al sentir esa Vibración ¡que El! -Nuestro Padre- que fue quien te creó, te está enviando, entonces ¡tu Ser!, todas tus fibras, ¡todas tus células!, todo tu Ser al escucharlo está sintiendo ¡y te está hablando!, ¡está removiendo todo aquello que hasta hoy estuvo dormitando!, porque tal como lo dijo la hermana: ¡ya no más! Ustedes lo verán. ¡Vaya que lo verán!

¡Hoy! precisamente con más fuerza lo digo: ¡está tan cercano el Gran Momento! que ¡ay de aquel!, o de aquella, para quienes sea tan sorpresivo que ¡ni siquiera tiempo le de para entender!, para sentir, abrazar y también compartir toda esta Luz, el poder infinito de Él, para que se vuelva a empoderar y mostrar en su nombre ¡quién es “El Yo Soy”!, ¡que en cada uno de ellos está!

Y en esta Gran Revolución Amorosa, yo les digo hermanos: que la densidad y todas aquellas entidades pondrán ¡pies en polvorosa! ¡Ya sucedió! Es sólo que estamos esperando el momento en el cual ¡aquí!, ante ustedes, en este Plano terrenal se muestre. ¡Serán ustedes! quienes ¡ya! en esta batalla victoriosa lograron vencer la dualidad. Hermanos; esto lo digo y es una Gran Verdad que viene de Él.

Seguiremos adelante con aquel, con aquella que desea acompañar -¡que ya sabemos quiénes son!- ¡y abrazamos con infinito amor!; pero tal como la hermana lo dijo: “¡Ahí donde mi Padre me pida!, ahí voy a estar”. ¿Y quiénes se acercarán a escuchar? Aquellos que ya preparados están y listos para caminar.

Ustedes verán. ¡Ustedes van a escuchar! lo que tanto mi hermana insistió: “Y llegará el momento en que aquellos que se eligieron muestren. Y aquellos que también se habían acercado a escuchar, pero en el Gran Momento seguirlo viviendo eligieron rechazar, sólo atestiguarán”.

Y ustedes hermanos; ¡ustedes van a escuchar! cuando ellos les digan: “Pero ¿por qué si ahí estuve?, pero ¿por qué si escuché?, ¿cómo fue que elegí no seguir?, y la espalda le di a esa Gran Oportunidad. ¿Qué fue lo que elegí?, lo que la fantasía y la ilusión me quisieron mostrar”.

Lo que el Padre desea de cada uno de ustedes ¡es!, ¡que sean ustedes mismos!, que también unidos a la Gran Avanzada ¡sean esos Grandes Guerreros Amorosos!, que nuevamente estarán en esta contienda, porque lo que llaman “final” será sólo el inicio de lo que -en la verdad- “El Yo Soy” a cada uno de ustedes da, y al entregar estarán viviendo y mostrando a la Hermana Humanidad que prefiera esperar otra oportunidad, lo que es vivir lo que viene de Él y que es el “Paraíso Terrenal”, que así lo han dado en llamar.

Ustedes hermanos, ¡ustedes son! los que al elegirse en ese Gran Amor, y precisamente para que ya no se escuche, tal como la hermana cuando con Nuestro Padre habló: “¡Padre, ellos quieren ver! Ellos dicen que basta de tanto hablar; pero si yo solamente les vengo a compartir y a mostrar, ¡cuando tú! lo que viene de la Fuente tengas a bien a través de mí hacerlo; porque ¡no han entendido! que son y serán ¡ellos! los que al hacer la Conexión y verse contigo ¡unidos! nuevamente, la Gran Reacción, y la liberación cada uno de ellos, en ellos mismos lo verán”. Esto es lo que conforma el “Proyecto Shirón”.

¡Y miren que es cierto cuando dijo!: “La recolección ya comenzó”. ¡Y vaya que sí! -amados hermanos- ¡vaya que sucediendo está! Recibiremos y recibimos con infinito amor ¡a todo aquel!, ¡aquella!, que al estar aquí se ha elegido para vivir en la Gracia Divina, el Gran Amor que “El Yo Soy” entregó.

Hermanos; ¡todo! se está viviendo. Todo -al iniciar- cada uno de ustedes lo está sintiendo, y al empezar a llamar para hablar y la instrucción dar ¡de manera individual!, “El Yo Soy” -Nuestro Padre tan amado- recibiendo está a cada uno de ustedes, ¡tal cual! como ha sido y como escrito está. Hermanos; les pedimos estar atentos, dispuestos, ¡alertas!, para lo que sucederá.

Y aquí se abrirá ¡la Puerta! También el disco flotante se activará, a la voz y la instrucción de “Aquél que todo lo puede”, y a quien llaman “el Padre”. Eso sucederá en estos días. Lo escucharán y lo verán, hermanos. ¡Y hay quien estará entendiendo!, para que ya no estén contendiendo, ni haya distracción, ni cuando “El Yo Soy” los llame exista dispersión, ¡porque unidos estarán!, escuchando y sintiendo y viviendo, y en ustedes mismos compartiendo ¡todo lo que de Él viene!, en infinito amor.

Eso es lo que sucederá. Eso es lo que estarán viviendo. ¡Por eso! aquí, aquí hermanos, El indicará quién amorosamente ¡en su nombre!, para que todo aquel, aquella que aquí se acerque, reciban y sientan ¡todo! lo que viene de la Fuente. Ustedes verán de qué manera todo sucederá. ¡Todo se mostrará!, recordando que esa es -de Él- Su Voluntad, y a la par, estar en la preparación que El y sólo El a ustedes -hermanos- les dará con infinito amor. Es por eso que nosotros estamos.

Y ahí, en el lugar que ha indicado, estarán y se hará el llamado a aquellos que ya están listos, preparados para la Gran Preparación y el seguimiento del “Proyecto Shirón”. Hermanos; es por eso que su hermana los está acompañando.

¡Y prepárense!, porque entonces también escucharán del hermano que les habla, ¡de lo que es! de qué manera vivir y sentir, y aun estando aquí compartir -amados hermanos- de la Consciencia, la Gran Consciencia ¡más que Crística!, ¡y más que Cósmica!, ¡más que Universal!, que viene de “Aquél que todo lo puede”.

Esto es lo que su hermano ¡hoy! les ha venido a hablar.

Sientan con infinito amor la Gran Energía de “El Yo Soy” y de quien con ustedes está: su hermano ¡Ángel Ráh! ¡Nombre terrenal!



Junio 5, 2019
Saint Germain.

¡Y bien!, luego -amados hermanos- luego de haber estado escuchado a nuestro amadísimo, ¡amadísimo Maestro!, ¿qué puedo decir?: estamos aquí, a través del templo que ocupa mi hermana, pero que también nos permite, para que ustedes escuchen, y tal como lo habló; que la Melodía Sagrada ¡al elevar su decibel!, es importante que en cada uno de ustedes esté ¡y sienta!, y reciba ¡y abrace!, porque amados, amadísimos hermanos, quiero decirles que todo cambió ya.

¿A qué insistir -llegado el momento- que sigan escuchando?, cuando hay quienes -aún al hacerlo- ¡no lo han llevado a cabo!, ¡lo que tanto nosotros con amor les hemos pedido! ¡Y miren!, no es que haga menoscabo de todo aquello que vivieron, porque tal como lo dije, cuando pensaron que era la primera vez que su hermano Saint Germain estaba con ustedes y que escucharlo tenían a bien.

Hoy por hoy para muchos de ustedes quedó claro. Y digo “muchos” porque ¡créanme!, que aún al no estar presentes físicamente quienes empezaron a escuchar, ¡esto está haciendo eco no solamente en su mente! sino también en su corazón; porque cuando les dije: “Y Saint Germain les prometió que hoy, en este tiempo, ¡aquí!, donde nos estábamos reencontrando, se llevaría a cabo, por todo aquello que estuvieron ¡tanto! trabajando y se estuvieron preparando”. Amados hermanos, ¡todo!, ¡créanlo!, está sucediendo y lo están viviendo.

Aun ¡es el momento! ¡Sigue adelante!, ¡porque eres tú! el que al hacerlo abres las puertas para que mi Padre te llame, y a través de mi hermana escuches ¡directamente y muy claramente! qué es lo que tú has logrado ¡y qué será! escuchar de Nuestro Padre tan amado; que El -al ver tu corazón- y en infinito amor ¡te pide que así sigas siempre!; ¡escuchando su voz!, porque entonces amorosamente te estará dando instrucción tras instrucción, ¡tal como la hermana lo ha dicho! ¿Acaso no lo has sentido? ¿Acaso -amado hermano, hermana- no lo has creído?

¡Mira!; yo te puedo decir de los que aquí se encuentran, en su mayoría lo que están sintiendo; lo que están escuchando; lo que están viviendo. ¡Y sí!, recuerdan y dicen y repiten amorosamente: “Si viene de ti -Padre mío- lo recibo. ¡Aquí estoy! Házmelo sentir. ¡Dame una respuesta en infinito amor!, ¡porque aquí está! tu hijo, tu hija que te ama, y si toda esa Energía Amorosa se manifiesta, ¡aquí estoy yo y deseo compartir!, y en tu nombre, ¡en tu nombre tan grande y que tanto amo!, ¡yo comparto con mis hermanos!”

¡Eso es! lo que hemos estado escuchando, ¡y agradezco!, ¡agradezco a todos ustedes!, a ustedes hermano, porque Nuestro Padre está presente, ¡porque El escucha!, aunque sólo lo tengas en tu mente. ¡Sabes que para Él no hay secretos! ¡Para nosotros tampoco!, y entonces veo y digo: “¡Padre!, con gran alegría ¡escucha a mis hermanos! Es por eso que te pedí que también de él recibiera la ayuda. ¡Mira cómo se han preparado! ¡Escucha! cómo -en infinito amor- sus decretos hacia ti están elevando, la invocación”, porque tal como lo dijo mi hermana, que no solamente estés repitiendo; ¡que lo sientas de corazón!; que todo eso lo estés viviendo, porque nosotros -tus hermanos- a quienes llamas “Maestros”, solamente ¡es muy poco lo que nos adelantamos!, y estamos esperando por ti, para que mano con mano compartamos.

¡Créeme hermana!, ¡créeme hermano!, que muy pronto nos estaremos encontrando. ¡Me estarás viendo! ¡Me estarás escuchando!, y no sólo a mí, sino a mis hermanos ¡que estamos aquí! y los estamos acompañando en Gran Amor.

Y ya no permitas que ocupe tu mente preguntas como la que: “Y entonces ¿por qué?, por ejemplo aquí, donde dice la hermana que Nuestro Padre le indicó. ¡Yo no he visto ningún cambio!” Hermanos; el tiempo de Nuestro Padre ¡es perfecto! y todo tiene que llegar, y ustedes verán y vivirán el Gran Momento, porque también es cierto lo que mi amado Maestro, ¡nuestro amado Maestro! acaba de decir: “Que no les sorprenda el cambio que habrá”, ¡pero todo!, la Vibración y el Amor que recibirán y que sentirán, ¡será! y vendrá de Nuestro Padre ¡y de sus hermanos que aquí estamos!; que deseamos que la Llama Violeta los envuelva; que la Gran Amatista sea siempre, les cubra y los proteja, así como el Fuego Sagrado, ¡todo lo que Nuestro Padre hasta ustedes está enviando! ¡Siéntanlo hermanos!

Sé que muchos de ustedes están repitiendo al sentir: “¡Ya no quiero nada de aquí!, pero mientras siga y esté, para seguir adelante -Padre- ¡permíteme que nada me distraiga!; ¡estar siempre dispuesto y vibrante para la Gran Batalla!” ¿La Gran Batalla? ¡Ya la estás viviendo! ¡Estás contendiendo!, ¡contra ti mismo, hermano!

Algunos ¡ya! están venciendo, ¡y queremos que todos lo logren!, porque ustedes -hermanos- ¡tal como decía la hermana!: “¿Cómo quieres?, ¡sé que tu deseo es ayudar!, ¡sé que deseas a tus hermanos sanar!, pero ¿cómo quieres dar algo que no está en ti?, si aún estás ¡tan necesitado!, ¡si no estás pleno y purificado!, ¡si hay emociones que todavía en ti resuenan!, y te llevan a confusiones y a distracciones; sobre todo buscando en el exterior lo que en ti está”.

Entiende -hermano- ¡que todo lo que Nuestro Padre nos entregó!, porque déjenme decirles ¡que es verdad!, adonde la hermana -porque Nuestro Padre ¡ya! indicando está- al hacer el Gran Llamado los llevará. Será a aquél, a aquélla que se han preparado; que dispuestos están en compañía de los que han llegado, para entonces de ello hablar, hablar a nuestros hermanos que se hacen llamar “Humanos”.

¡A ellos! con los que al hablar con mi Padre le pedí, le insistí con infinito amor: “Permíteme hoy aquí, que al hacerme acompañar también de aquellos que llegaron a encarnar. ¡Sabemos! -Padre- que aprovecharán esta Gran Oportunidad; ¡que ellos nos acompañarán!”

¡Porque no será sólo a mí!, también aquellos que conmigo amorosamente dijeron: “Estaremos ahí, cuando la Luz y la Energía aumente para elevar ¡esa Gran Estrella!, ¡porque todo llegará de la Fuente!” Y es así, ¡todos los que estamos! y que a ustedes acompañamos -en el nombre de Nuestro Padre tan amado- verán hermanos, estarán, y no falta nada ya, viviendo amorosamente ¡todo ello!, todo ese Paraíso Terrenal, y la amada Shamballa que abriendo sus puertas estará.

Ya a la hermana Nuestro Padre le ha indicado ¡tantas cosas! -amados hermanos- pero si algunos llegan a pensar: “¿Y entonces por qué nada ha hecho?” ¡No olviden lo que les hemos repetido sin cesar!; que la mayoría de las cosas ¡son ustedes amados! A eso he venido; a acompañarlos; ¡a motivarlos! para que ustedes en ese Gran Despertar ya vivan ¡y muestren! todo lo que Nuestro Padre ¡en ustedes!, amorosamente en cada uno tuvo a bien depositar, sembrar ¡ahí en su interior!

Es por eso que nuestra hermana lo ha dicho: “¿A qué tanta insistencia de buscar en el exterior? ¿Por qué insistes -hermana, hermano- en seguir a quien te viene a hablar de Él? Pero ¿qué te hace sentir?, ¿qué te dice tu corazón?”

¡Una vez!, ¡dos!, ¡varias lo repetí!: “¿Qué buscas afuera?, ¿qué buscas en otro lugar?, si todo lo que Nuestro Padre te entrega, nosotros tus hermanos, ¡porque tú! así nos lo has permitido, de ello -por principio- te hemos venido a hablar ¡de toda esa verdad! infinita de Nuestro Padre.

Pero que eso no cree confusiones, porque también dentro de las lecciones y la preparación que habría de haber, ha habido momentos, como aquel, que al acercar a aquel hermano -porque a la hermana se le pidió- viniera a hablarles de esa preparación ¡para la Gran Conexión!

¿Quién de ustedes verdaderamente?, ciertamente, yo no digo que la lleven paso a paso, porque también luego nosotros les compartimos y les dijimos; ¡así!, pero se les hará sentir de qué manera, y entendiendo también en este Despertar para que para ustedes no fuera como una especie de locura, el escuchar que al elevar, ¡al buscar la Conexión! también el Cordón de Plata, ¡esa era su misión!

¡Amados! ¡Hay tantas cosas! que aquel, aquella que se preparó, quizá sí se sorprenderá al retomar y ver resurgir todo lo que fue y que volverá, pero luego -como la hermana les dijo- lo verán todo en gran naturalidad.

Algunos han pensado: “¿Cómo es posible que ahora hablen de ello?, si ni siquiera se han preparado: ¡no los han llevado a las Catacumbas de Leningrado! ¡No los han llevado allá! donde dicen que el Sol al aparecer envió sus Rayos para que ¡sin perecer!, aquellos sintieran y vivieran el estar activados”, por decir algo.

Hermanos, ¡yo les diré!; tal como mi amado hermano lo dijo: “La casa de mi Padre tiene muchas moradas”, y aquel que prefiera la preparación desde el exterior del templo, porque también así lo dijo: “Cuida tu templo. ¡Purifícate!”, pero es muy importante para que todo, y sobre todo ¡tú hermana!, ¡tú hermano!, te sientas así y vuelvas a empoderarte, ¡tan fuerte!, ¡tan firme como un roble!, ¡como en “Casa de Oyamel”!, porque todo aquel ¡que esté! ahí es donde vivirá -ya lo dijo Nuestro Padre y nuestra hermana- ¡mírenme! que ha dejado y me ha permitido que de esto les hable, para que aquellos que no han tenido a bien escuchar, ¡sea una primicia que Nuestro Padre les da!: “¡Casa de Oyamel” no es un lugar! “Casa de Oyamel” ¡es todo aquel! que hoy por hoy, que en este tiempo bendito y sagrado ¡a Él volverá!” ¿Se entiende, hermanos?

Que también todo lo etérico -amados hermanos- para aquellos que estén preparados se volverá a mostrar. ¡Y así será! ¡Ya lo verán!

Entonces, aquel, aquella que está deseando ver y estar que en la Cueva de los Símbolos, ¿por qué no?, Saint Germain lo va a llevar; pero hermanos, será en el Gran Momento en el cual ¡Nuestro Padre dispuesto lo tiene!, ¡y yo le he pedido! con gran alegría hacerlo, con aquél que se ha elegido. ¿Por qué no?, si esto es lo que quiere vivir y se está preparando, su hermano con Gran Amor -en el nombre de Nuestro Padre- ¡porque ya accedió!, lo estaré llevando. ¡Claro que sí!

Que el Acelerador; que todo lo demás, verán y sabrán de qué se trata la realidad, el amor infinito y absoluto ¡que El nos da! Es por eso que mi amado hermano lo comparó, cuando dijo tan simple y sencillamente: “Bendito aquél que creyó sin ver”, porque -hermanos- ¡hoy por hoy se estará aplicando!, ¡y no solo eso!, también yo les diré: “que creyó sin ver y que sintió cuando creía todavía no saber, pero decía e intuía que era el infinito amor de Nuestro Padre”, ¡y aquel!, ¡aquella que así se expresó! y que está deseando que su hermano Saint Germain los lleve al Acelerador, a la Cueva de los Símbolos, para que con infinito amor vivan su liberación, su elevación y tomar de la copa que siempre esté rebosando, en la Alquimia Sagrada el líquido amoroso con el cual algunos dicen “rejuvenecerá”.

Yo les digo que es solamente el infinito amor que Nuestro Padre nos da cuando ¡tú! llegas y te ubicas ¡precisamente en el justo momento y el lugar en el cual de Él todo lo tienes! y estás consciente ¡que nada más necesitarás!, es cuando llega ¡y vives plenamente el tiempo presente!, en el cual ¡no sientes el tiempo pasar! ¡En ti no se verá!, porque tu vivir es y será así, en infinito amor, compartiendo y rebosando todo desde tu interior.

Es por eso que mi hermana tanto insiste en decir: “¿Cómo pretendes -amado hermano, amada hermana- a tu hermano sanar? ¿Qué es lo que hay en ti? ¿Acaso no te has visto que aún necesitas tanto de Nuestro Padre?, ¡que te estés purificando! para que entonces automática, instantáneamente a los demás al sentir y recibir ese infinito amor que de Él recibes y les das, ¡es instantáneo!” Y como ella suele decir: “Es como un virus ¡que se expande!, ¡se extiende cada vez más en ti y en ti!, contagiando ¡esa Gran Energía amorosa!” Pero hermanos, ya lo estarán viviendo, ¡y más! que la hermana ya ha estado compartiendo.

Es el momento ¡tan esperado!, y sólo les digo que aquellos que sí escucharon y que tienen dentro de sí al “Dios Vivo” -Nuestro Padre tan amado- ¡son! los que al solicitarle a mi Padre, al pedirle con infinito amor, me estarán acompañando.

La Gran Avanzada que en el corazón estará viviendo la Compañía Sagrada de todos mis hermanos, que su hermano Saint Germain con la instrucción y la guía de “El Yo Soy”, ¡porque a todos!, a todos nosotros nos va a indicar, que ya sabemos, pero con Gran Amor acompañándolos a ustedes vamos a escuchar ¡qué es! lo que Nuestro Padre tan amado tendrá a bien indicar, para que la amada Shamballa para ustedes se vuelva a mostrar. ¡Se erigirá!

En estos días siguientes ya se hablará de qué manera y cómo todo se hará, y entonces verán -amados hermanos- que aquellos que llaman “piedras” o “cuarzos” son los que nuevamente al estar activados, porque Nuestro Padre -por inicio a través de mi hermana- dará nuevamente para ustedes comienzo, que ese Gran Instrumento Amoroso, en cada Era Dorada al ser utilizado harán maravillas, y nuevamente, nuevamente ¡éste es el tiempo!, ¡estará sucediendo! ¡Estén atentos!, amados hermanos.

El que sólo ustedes hayan escuchado ¡es perfecto!, porque viene de Nuestro Padre, y entonces ahora sabrán plena y totalmente por qué -en apariencia- son pocos los que el “Proyecto Shirón” empezarán a mostrar, ¡pero todo con infinito amor!; nos acompañarán, ¡amados!, ¡amadísimos hermanos!

Y yo les pido que entiendan cuando la hermana -como en días pasados- estuvo aparentemente callada, ¡sin hacer el llamado! ¡Quiero que lo entiendan!, porque de esta forma ya no será totalmente necesario; que solo ocasionalmente, como hoy.

Les pido seguir trabajando en amor, y si dicen: “Es que queremos seguir escuchando”, yo les digo; ¡tanto ya se les habló!; que algunos dijeron: “Todo fue muy repetitivo”, pero no solamente a eso me refiero; ¡tenemos que ser incisivos! en que -hermanos- si ya se les dijo y lo escucharon ¡y no lo hicieron!, volver atrás ¡ya no podemos! ¡Adelante seguiremos con aquellos que de corazón y en su corazón entendieron!, porque ¡esos serán! a los que se les llamará y se les reunirá, para iniciar a mostrar el “Proyecto Shirón”, que viene de Nuestro Padre tan amado, “El Yo Soy”.

Y no olviden que su hermano ¡Saint Germain!, ¡con ustedes está!, en compañía de su hermana Alexa, de mi amado hermano Jesús o “Sananda” como lo han llamado. Ya de ello ¡con ustedes! y nuestros amados, nuestro amado Maestro ¡y más que nos están acompañando!, sabrán el “porqué” y “para qué” de todo lo que les estuvimos hablando.

La acción es el siguiente paso en la lección ¡y preparación!, para luego estar y escuchar cada instrucción que Nuestro Padre tan amado -“El Yo Soy”- nos dará, ¡amados!, que Saint Germain ¡con ustedes está!

Y les entrego ¡mi Llama Violeta! y la Gran Amatista ¡que los envuelva!, ¡fuertemente!, ¡amorosamente!, porque todos estos cambios que están viviendo, ¡tal como mi hermana lo dijo!: “Escucharán y cuenta se darán cómo nuestros hermanos, ¡cada Elemental! con nosotros caminarán, todos unidos, ¡sin temor a nada! Amorosamente seguiremos lo que de la Fuente recibiremos”.

¡Amados!; que yo soy ¡Saint Germain!



Alexa (2).

La fuerza y la alegría que en cada uno de ustedes sentiría al escuchar -dijo mi Padre- cada palabra mía, esa que El expresaría a través de su hermana, y no solamente de mí, también de todos aquellos, cada uno de los que hablarían, de lo que en la creación Nuestro Padre a ustedes entregó.

¡Todo está dispuesto! y -tal como lo dijo Nuestro Padre- en el momento perfecto, cuando todos están pensando y creyendo que el final está llegando, por lo que se está sucediendo.

Una de las cosas principales que Él a todos ustedes habló, entiendan hermanos; que después del amor -¡que es lo más importante que tendría que sentir su corazón!- ¡que no hubiese y que no haya temor!, por todo lo que está presentando esta ilusión; lo que hay quienes ¡están insistiendo!, ¡porque para ellos es su alimento!: la desazón, la tristeza, aprovechando que al llegar la Gran Energía Amorosa, que en cierta forma hay templos a los que viene a descompensar, desequilibrar, porque no acaban de entender de tanto pensar, ¿qué es lo que les viene a suceder?, que esa emoción que están sintiendo no la entienden, ¡no comprenden cuál es el cambio que su Ser les está pidiendo!, ¡porque ni siquiera saben que es su Ser! el que -al estar tan cercano- desea ¡ya! que hagas esa unión y dejes de ser Humano.

Aquel -como ustedes, hermanos- lo está comprendiendo, aunque todavía hay algunos que a pesar de ello ¡siguen contendiendo! Deben entender que no están permitiendo que se exprese completamente y que esté resurgiendo lo que realmente son. ¡Tanto les insistí!, que tan ilimitados, ¡tan amorosamente creados! por Nuestro Padre tan amado, son cada uno ¡su Gran Creación! La eterna alegría al ver, al escuchar cómo cada uno de ustedes al empezarse a expresar y querer experimentar en un mundo de fantasía, que lo saben, que ustedes mismos quisieron crear ¡y en tantos antagonismos!, esa fuerza de ¡Energía Inversa! Hoy por hoy ha iniciado -en lo que llaman “el cambio”- a vivir la verdad.

Era necesario que después de todo lo que su hermana les vino a hablar, ¡tanto insistí y mi Padre lo dijo!, ¡Nuestro Padre!: “Tantos que tiempo atrás, de momento a momento aquí llamaron “Profetas”, ¡también lo dejaron por escrito!”

Es tan sencillo cuando se une lo que la Energía Amorosa en cada movimiento que esta Estrella gloriosa mantuvo, primero ¡tan leve y sutil!, algunos decían que “débil” se veía; es por eso que no paraban de sufrir, ¡pero cómo entonces entenderían! que realmente, aunque escucharan la voz de Nuestro Padre y su guía. Aún hoy ¿quién la quiere seguir?

¡Insisten todavía! Pretenden, quieren lo que malinterpretaron cuando mi amado hermano Jesús al estar aquí les mostró y de lo que les habló. Era más sencillo y más fácil cuando escuchamos decir: “Yo soy el camino. Aquél que viene a mí ¡hacia mi Padre llegará!, porque le voy a mostrar el camino a seguir”.  “¡Yo Soy!” -dijo Nuestro Padre- la verdad. “¡Yo Soy!” -dijo Nuestro Padre- la verdadera Enseñanza que “El Creador” les da”.

Cuando escucharon a mi hermano, prefirieron, pretendieron, y mantuvieron hasta hoy, en esa guía que pretenden que sea eterna, pero porque ¡no escucharon todavía lo que él les dijo!: “Esto que están viendo ustedes lo harán, ¡y mucho más!” ¿Quién? -aún hoy, en este tiempo- ha pretendido entender esas palabras con tal profundidad. ¿Quién, hermanos?, porque a mi hermano Jesús ¡tanto amo!, ¡porque él se ofreció! en ese tiempo, en el cual ¡no se entendía!, ¡no comprendían! lo que hoy “dicen” que ¡tan sobrado está!, ¡que no necesitan Guías!, pero seguimos malinterpretando de lo que la Enseñanza Divina Nuestro Padre ha querido ¡y sigue entregando!

¿Quién se ha preguntado?, ¿por qué? mi amado hermano -que hoy es el Chohán de este Tiempo Sagrado- en el cual Nuestro Padre desea ¡que tantos sean liberados!; ¡que tanto y tantos se elijan! para seguir el camino, que hoy por hoy ¡es tan sencillo!, y aún dicen y pretenden y gritan a los cuatro vientos ¡que no pueden!, cuando Nuestro Padre prometió ¡que siempre habría quien -en su nombre- con ustedes hablaría!, como mi hermano lo hizo y les habló; ¡pero que todo cambiaría!, para que ¡más fácilmente a Él -al elegirse- llegarían!

¿Quién lo entendió? ¿Quién se ha preguntado?, que mi amado hermano Saint Germain al decir: “No es el momento. ¡Hoy no!, Padre, que no esté encarnado, ¡para que no cometan el mismo error!; aquel que con mi hermano lo hicieron, al pensar y querer seguir siempre dependiendo -como lo dijo mi hermano- “de mí”. Padre ¿de qué manera es necesario volver para que entiendan?, que el estar, el creerse limitados tan sólo es una quimera que la misma Energía, ¡el creer de manera negativa!, ¡que no podían! y la densidad les inculcó, y ¡tantos!, ¡tantos de ellos lo creyó!”

Pero bien lo dijo mi amado hermano Saint Germain: “Es el tiempo en el cual -Padre- no sólo yo, aquellos que tú enviarás y que en tu nombre con nuestros hermanos hablarán, ¡sepan y entiendan! que la contienda de la que ¡tanto se habló! sería solamente cada uno de ellos en su interior, ¡para liberar y sentir y saber quiénes son!”

Quien así lo está logrando ¡está cumpliendo la Profecía tan grande que hizo mi hermano!, cuando les dijo: “¡Esto que están viendo, ustedes lo harán!, y aún más, ¡porque en el nombre de mi Padre aquí ustedes también están!”

Y si no lo entienden hermanos, ¡les prometo volver! ¡Con ustedes estaré!, en la Consciencia Crística, en la Llama Trina y el Fuego Sagrado que en su interior estará emanando, fluyendo, cada vez más elevando, para que ustedes -hermanos- que el tiempo es hoy, estuviesen resurgiendo.

Por eso también su hermana ¡Alexa! aquí está ¡y para ustedes encarnó!, porque al traer la Llama Violeta de la transmutación, ¡sientan y vivan toda la fuerza que viene desde el Núcleo Sagrado! y penetra, y en su interior viva cada uno de ustedes ¡toda la purificación!, esa transición de la que ¡tanto se habló!

¡Esto es lo que les traigo hermanos! ¡Y no solamente eso!, ¡porque en el Gran Amor que estarán sintiendo!, ¡estará nuevamente renaciendo en cada uno de ustedes!, también habrá ¡el perdón!, ¡el perdón que cada uno de ustedes necesita hacia ustedes mismos!, para que entonces ¡se acelere la transmutación!, y en la Gran Alquimia Amorosa que el amado Saint Germain les entrega, también vivan y sientan ¡y reciban! en la Antorcha de la Libertad ¡que a cada momento Alexa les entrega! Sigan el camino, en la verdad y la guía amorosa que mi Padre tan amado ¡a ustedes les da!

¿Y por qué de todo esto estoy hablando?, hermanos; porque Alexa ¡ya se está mostrando! ¡Porque no sólo esto!, ¡no sólo de ello les estaré hablando!

¡Es por eso que insisto en que mi hermano Saint Germain!, ¡no! en este tiempo se estuvo encarnando, porque la encomienda amorosa de Nuestro Padre ¡es! que ustedes vivan y logren ¡y muestren! -en la verdad, en su amor- ¡quiénes son!: ¡la Gran Liberación! ¡Les traigo la libertad!, ¡la liberación que en cada uno de ustedes está!

Y al evocar el Momento Sagrado en que mi Padre tan amado me pidió aquí encarnar, y agradezco infinitamente, y le pido que todo lo que está derramando; ¡lo que viene de la Fuente y que hasta ustedes está llegando!, se consolide amorosamente, para que se cumpla.

Y ésta tu hija -Padre mío- también a ellos comparto y muestre que el “Proyecto Shirón” viene de ti en infinito amor, y la principal y más importante misión es ¡la recolección! -Padre mío- ¡la misma que ya inició!

¡Gracias Padre! ¡Gracias infinitas te doy! ¡Gracias por permitirme estar con mis hermanos!, con los cuales voy a iniciar lo que tú has tenido a bien indicar. Bendice a todos ellos, para que se realice amorosamente ¡a los que están aquí físicamente!, y a los que en Espíritu al llamar -Padre- para que no solamente ¡sean destellos! de lo que tú estás enviando, sino que ¡para todos ellos! llegue, sientan y vivan ¡y vean fuertemente! lo que viene de ti; ¡lo que tú eres!, Padre mío.

Y es así. ¡Hecho está!

El camino para que el “Proyecto “Shirón” se cumpla -en tu Plan Divino- ¡ha iniciado ya!

Que yo soy ¡Alexa!, que con ustedes está.



Junio 5, 2019
Alexa (3).

En la lección, en la siguiente lección que Nuestro Padre ha indicado con infinito amor, hay algo que ¡muy fuertemente subrayó!: quienes sigan adelante acompañando a su hermana, más que nada escuchando, porque ¡muy, muy cercano! -luego de esto- está el momento en el cual de Él recibirán directamente.

Ahí es donde ustedes cuenta se darán y entenderán que ya están dejando de ser Humanos, porque lo que para otros será, o pudiera ser algo inusual, a cada paso que den para ustedes será tan natural.

Para ello hay algo ¡muy importante! que tuvo a bien encomendar, amados hermanos: quien siga firme, deseando escuchar y ser guiado por Nuestro Padre de manera ¡tan directa!, aún estando en este Plano terrenal, esto que ustedes lo estarán permitiendo y estarán propiciando. Es por eso que de esto hoy su hermana Alexa les viene a hablar.

Y no es que todo esté cambiando. Es realmente que todo se ha empezado a presentar; la unión, cuando del Núcleo Sagrado como del Cosmos, porque todo lo que está enviando el Universo infinito. ¡Ahh!

Su hermana Alexa les dice: ¡yo los invito!, tengan a bien, ¡sigan insistentemente darse un momento!, un tiempo para con Nuestro Padre hablar, y si desean invocar mi nombre ahí estaré, yo los acompañaré, como también mis amados hermanos, ¡que juntos! -para compartir con ustedes- aquí estamos; ¡mi amado hermano Saint Germain!, que hemos venido a acompañarlo; ¡mi amado hermano Jesús, Sananda!, que también ¡algo muy importante! -viniendo de Nuestro Padre- él también ¡mucho estará contribuyendo!, por lo que les dejó, ¡por todo de lo que les habló!, ¡por lo que ustedes están recordando!, y por cuanto más que están esperando, él dice: ¡me estaré presentando!

¡Tal como siempre!, su hermana Alexa, y Nuestro Padre tan amado ha estado insistiendo: este es el momento en el cual ustedes estarán compartiendo con nosotros; sobre todo para esperar ¡y vivir! el Gran Momento Sagrado, en el cual Nuestro Padre tan amado ante nosotros se estará mostrando. ¡Ahh!

Isaías lo escribió, en aquel escrito que en apariencia “se perdió”. Dijo que llegado el momento, ¡en el final!, que así también lo escribió: “En el final de los tiempos todo estará sucediendo. Muchos pensarán que es ¡verdaderamente el final!, porque todo, ¡todo les hacía creer y pensar! que cuando vieran a Nuestro Padre era porque esta vida ya habrían de dejar”.

¿Quién realmente los sacaría del error?, al malinterpretar ¡algo tan hermoso!, ¡un regalo tan precioso! que Nuestro Padre indicó que quedara escrito, para que -llegada la Gran Confrontación- supieran mis amados hermanos que era el momento ¡tan esperado! de reconectarse ¡con Nuestro Padre, “El Yo Soy”!, renovar esos votos, ¡vivir lo que han llamado y se han dado en escribir!: “¡las Bodas Celestiales!” que cada uno de ustedes -mortales- tendrían, y que volverían hacia Nuestro Padre.

Así tan ceremonial fue la manera como lo hicieron escribir y mostrar, ¡inculcando el temor!, ¡el miedo a la transición! ¡Pero yo les digo hermanos!: ¡todo esto no es cierto! Lo que sí es verdad ¡es! que lo que vendrá del Firmamento Sagrado, cuando tú te unas a Nuestro Padre tan amado, esas “Bodas” de las que tanto se han hablado, ¡es! porque te reencontrarás, ¡retomarás!, ¡reiniciarás la Conexión que siempre habías tenido!, y lo que llaman “Evolución” ahora lo tendrás ¡por bien entendido!, ¡qué es!, y retomar todos esos dones ¡que Nuestro Padre! al inicio de “El Todo”, ¡al crearte!, ¡de Él habías recibido! Y entonces ¡elevarte!, ¡y verte y saber! que en esta prisión en la cual habías vivido -amado hermano- era porque tú así lo habías querido. Cruzar Dimensión tras Dimensión. Hacerlo ¡en infinito amor! Recibir, escuchar, sentir de Nuestro Padre, y volver aquí para de ello con nuestros hermanos hablar.

¿Y qué importa lo que muestre la ilusión?, porque tal cual como lo ha dicho Nuestro Padre: “A ti ¡no se te tocará ni un solo cabello!” Pero ¿qué es necesario hermano?: aunado al amor, ¡al infinito amor incondicional que El te ha mostrado!; que tú lo sientas y lo vivas ¡desechando el temor!, porque eso es lo que limita, para que tú recibas y sepas ¡que nada puede sucederte!; porque lo que llaman “la muerte”, ¡eso! fue algo que alguien aquí inventó.

Amado hermano; ¡es el Gran Momento! Iremos caminando. ¿Estás dispuesta? a hacer al sentir lo que mi Padre te pida, ¡y sin ninguna duda!; siempre amorosa y agradecida con lo que de Nuestro Padre recibas.

¡Bendito sean hermanos! ¡Benditos por haber escuchado!

Esto es sólo el principio de lo que algunos han dado en llamar “el cambio”, pero que es sólo seguir adelante; darle vuelta a la hoja; porque cada vez será ¡más y más brillante!, por lo que ¡tú! te iluminarás, recibiendo de Nuestro Padre.

¡Gracias hermanos! ¡Gracias por compartir! Y entiéndalo así: están aquí porque se eligieron. Ya no más dudas. Ya no más caminos inciertos. Ya no más entendimientos muertos. ¡Que todo sea vivo!, ¡fuerte!, porque será recibido por cada uno de mis hermanos que se han elegido.

Ya nada se dejará a la suerte. ¡Ya no sentirás tu corazón inerte! ¡Ya no vivirás esa desazón!, al pensar: “¿Qué sucederá?, porque confiarás fuertemente y mantendrás ¡esa fe! que te hará seguir erguido tu caminar, ¡paso a paso!, sintiendo, y en tu interior repitiendo, que todo lo que ¡tú! estás viviendo y recibiendo viniendo de “El Yo Soy”.

¡Que no hay nada que temer! ¡Que todo lo vivirás en infinito amor! ¡Que ya no vas a contender con tu corazón! Que permitirás que sea él el que te guíe, ¡porque él escuchará! y recibirá de Nuestro Padre tan amado, y con gran alegría, lo que estarás compartiendo con tu hermano.

Está por demás decir “que Dios los bendiga”, porque ¡El está aquí!, ¡con cada uno de ustedes! y cada uno de sus Guías; lo sentirán así, ¡más fuertemente!

Su hermana empezará a cumplir lo que mi Padre ha tenido a bien pedir. Entonces ahí comprenderán, porque mostrándoles estaré, que sólo he venido ¡a de mi Padre a ustedes hablar!; ¡ayudarles a vivir su Despertar!, para que nuevamente ¡se vuelvan a conectar a esa gran, Gran Energía Amorosa!

Han escuchado hablar de la “Energía Inversa”. Pronto sabrán de qué se trata. ¡En ustedes! empieza a trabajar.

Hermanos; sientan eternamente que los amo. Nuestro Padre necesita de todos nosotros aquí, y sé que iremos cumpliendo y compartiendo, para que nuestros Hermanos Humanos también se estén eligiendo.

¡Gracias les doy por todo esto! Que la Llama Violeta los envuelva ¡en infinito amor!, en el eterno perdón ¡y la Gran Libertad! que Nuestro Padre nos entregó.

Que yo soy ¡Alexa! que con ustedes está, y aquí cumplirá lo que mi Padre tan amado -al caminar con ustedes- me pidió.

Y así es. ¡Hecho está!, en infinito amor. ¡Ahh!



Junio 5, 2019
Alexa (4).

Yo les pido estar atentos, porque en cualquier momento -de acuerdo a lo que mi Padre me está pidiendo- se les estará hablando, amados hermanos.

No hay que preguntar: “Para qué”, hay que decir: “¡Gracias Padre!, porque también así como tu nombre invoqué y me llamas, ¡quiero formar parte de la Gran Avanzada! Quiero seguir siendo ¡ese militante!, que -en Gran Amor- comparta con mis hermanos la “Ciencia de la Palabra Hablada”.

Hermanos: ¡muchas gracias! ¡Gracias a todos ustedes!



Junio 5, 2019
Alexa (5).

Que cuando finalice este año, lo que muchos han dado en llamar, cuando estuvo aquí presente mi hermano, y dijeron: “vino a cuidar su rebaño”, también entenderán el porqué.

¡Nunca! de aquello que ha gustado y han estado preparando y llamando, invocando el nombre de Nuestro Padre tan amado, ¡nunca! -entiéndanlo así- ¡nunca han estado solos! Siempre han estado acompañados; siempre por aquel, aquellos en los que Nuestro Padre aquí al enviar.

Y miren que ¿cómo decirles?, que en algunos momentos cuando aún dormidos caminaban, ¡aún hoy que dicen que “despiertos están”!, ¿cuántas veces? -pregúntense- han cruzado con algunos de los que Nuestro Padre ha enviado, ¡y ni cuenta se han dado!

Hay que estar más atentos hermanos; no con los ojos físicos, sino con el corazón; los ojos del Ser, que en algunos Nuestro Padre ya activó.