21 de septiembre de 2019

Canalización del 18 de Septiembre de 2019.


Alexa (1).

… lo he dicho, ¡e insisto! ahora ¡más!, confirmando y con esa certeza y seguridad de que ¡es!, que lo que me hace sentir -al hablar- viene de Él ¡y es para ti!, para que sepas que siempre ha estado y está, estará ¡aún en aquellos momentos en los cuales tu mente!, tu corazón esté nublado; sea por tristeza, sea por dolor, sea por rencor o resentimiento. ¡Deja, permite que entre la Luz que todo purifica!

Hay muchas armas que nos ha ido entregando para en ese proceso estarnos limpiando, ¡porque es mentira! que tu hermano venga y te quiera dañar. ¡Eres tú mismo! -hermano- con tus pensamientos y tus acciones en tu actuar, lo que ¡atrae! aquello que tanto te ha dañado y que no quiere permitir que a Él -a Nuestro Padre- en este momento tan anhelado quieras llegar.

San Pablo lo dijo: “¡Lo tengo muy claro!, al haber tenido experiencias en las cuales en mi existir estaba tan estancado”. ¿Por qué lo menciono en este instante? Me está diciendo: “Quiero que sepan ¡y que busquen y que encuentren quién soy, quién fui!, ¡qué es lo que viví!, pero que llegó un momento en el cual ¡entendí!, ¡supe quién soy!, qué es lo que el Padre -que tanto amo- me entregó, y entonces llegó para mí y viví lo que ustedes llaman “la salvación”, que es sólo abrir el camino en cada vivencia, en cada experiencia, y con la sapiencia amorosa que la sabiduría nata -que es eterna- que viene de Nuestro Padre”.

¡Hay tantas cosas que tenemos que entender!, ¡que somos nosotros los que nos hemos limitado!, ¡y no hemos permitido que se exprese el Ser! ¡El Ser que está en cada uno! Y miren hermanos; a veces nos entrampamos tanto en situaciones ¡tan banales!, que luego viene una sacudida que te hace entender que nada importa; que con tan sólo que te entregues a Él, a Nuestro Padre, entonces, entonces ¡nada de eso existiría! ¡Nada te detendría! y vencedor ante el gran oponente también saldrías. ¡Y lo harás! ¡Porque este es el tiempo!, y en esa Gran Libertad que tu hermana te trae, ¡pero la verdadera!, la que te pide amorosamente: ¡suelta!, ¡deja! Lo que tiene valor ¡El -Nuestro Padre- es quien te lo entrega!, ¡y está en ti! No hay cadenas, tan sólo las que ¡tú! te has impuesto, limitando el que sigas adelante, para vivir lo que viene de Él, ¡un Plan Maestro!, amoroso.

No tienes idea que al seguir adelante, trascender todo esto ¡es una constante!, pero que he prometido que de todas las Dimensiones, al entender y al yo estar contigo, que ni la Novena ni la Décima, ¡aún más! ¡Hay tanto! en el Infinito, del amor que Nuestro Padre nos da.

Y ahí es donde también entra este gran regalo que -en su nombre- tu hermana te trae; además del amor, ¡el amor incondicional!; ¡el perdón! que tú a ti mismo te empieces a dar, para corregir en el camino y ya no permitirte tropezar; la libertad, ¡la verdadera!; la libertad de elegir ¡el volver a sentir!; la libertad de entender ¡que todo lo tienes en Él!; la libertad en tu caminar para saber ¡que nada!, ¡nada te ha de limitar!; que aun estando aquí -que no importa el lugar- Dimensión tras Dimensión la vivirás, sintiéndola aún utilizando esta vestimenta que estás ocupando al elegir la transición -y que llega a ti en Gran Amor- para ir resistiendo, cómo ¡tan ligero! en este cambio para seguir viviendo ¡y recibiendo! de la Energía Sagrada, que cuanto más en toda su pureza hasta ti llega, y entonces te ayuda en este Despertar para escuchar su voz, para nuevamente con Él hablar; pero hablar realmente como antes, como volverás a hacerlo. Saber que está aquí, ¡contigo!, y entonces -hermano- ya estarás preparado para nuevamente verlo, y de eso es lo que sucederá. Esa es la encomienda que tu hermana ha traído. ¡Uhm!

En cada uno de ustedes está la decisión y yo te prometo que no habrá intento fallido, por cuanto tú en este proceso y en Gran Amor sigas adelante. Y la preparación tal cual, ¡paso a paso!, de Nuestro Padre directo, o a través -en un principio- del Guía ¡que El te indique!, te entregue y te dé. ¿Y sabes quién es? Para algunos de ustedes ¡tú mismo hermano!, ¡tu Ser! Si quieres llamarlo tu “Yo Superior”, pero todo en infinito amor.

Lo único que te pedimos ¡es! estar atento a toda esa sensación tan amorosa, a esa entrega gloriosa, infinita, porque también ahí entenderemos que todo pensamiento, todo sentimiento y lo que hacemos ¡se magnifica!

¡Tanto nos ama Nuestro Padre!, que cada vez más, hoy por hoy que estamos viviendo el día glorioso ¡de la libertad!, unida al amor y al perdón, porque la Era Dorada que está iniciando será tan clara, transparente, cristalina, ¡entregada para todo Ser viviente! No sólo ustedes hermanos. He dicho “todo Ser viviente”, todo aquel en el cual palpite un corazón, Nuestro Padre lo ha llenado en infinito amor.

Es por eso que también les hemos dicho que estarán entendiendo el lenguaje de aquellos hermanos que con ustedes han estado compartiendo, todos como Uno solo; corazón con corazón.

Algunos podrán pensar que todo esto de lo que se habla es sólo un mito; verán que no es así, que de todo de lo que te hemos hablado ni siquiera es una quimera; ¡puede vivirlo quien así lo quiera!, sintiendo con el corazón y caminando en esa congruencia, en esa unión; porque no habrá dualidad, porque todos tus cuerpos al unirse ¡en Uno sólo!, todos ustedes se permitirán seguir adelante en unidad, como Uno sólo, y Nuestro Padre -que es ¡Uno!- está en todos, y así se estará mostrando. ¡Todo paso a paso se estará unificando!

Es que -hermanos- habremos de entender que todo aquel que esté dispuesto ya no habrá quién es más o quién sea menos. Estamos aquí para hablarte de todo ello, y no sólo así, también mostrar -si es tu deseo- cómo caminarás en Unidad, y el momento llegará y será ¡tan certero! Es por eso que pedimos que estén ¡tan atentos! y dispuestos.

Así como hay hermanos que entienden y hablan con cada Elemento, yo te digo -hermano- ¡que también tú puedes hacerlo! Estamos en este proceso. Estamos a punto de hacer esa transición, y en la cual ¡tampoco va a existir religión!, ¡sólo el amor! Amor, amor para entregar, ¡amor que también tú recibirás! y en el cual todos como Uno sólo verán y sentirán, escucharán la voz de Nuestro Padre ¡y con Él hablarán! ¿Quién ya empezó a hacerlo? ¡Sabes! -hermano- que no estoy mintiendo. ¡Sabes que aún a pesar que de sigues aquí caminando como humano!, Nuestro Padre en ti ¡maravillas! en tu interior ya está haciendo.

Aquel o aquella que al escuchar todo esto piense: “¿Y por qué yo no? ¿Por qué yo todavía no lo he sentido?” Sabes -hermano- que muy claro te está quedando en el camino qué es lo que tienes que trabajar en tu interno, porque todos tenemos la misma oportunidad, y yo te pido, nosotros te pedimos, que no desaproveches ¡esta oportunidad!

¡Todo lo que se vivió! y lo que cada uno de ustedes experimentó, ahí donde Nuestro Padre tan amado a ustedes los citó en esa invitación tan amorosa. Créanme, porque es así. Hay algo muy importante que ya se inició y el momento va a llegar para cada uno de ustedes que muy claro les va a quedar, porque fue solamente el principio de un Nuevo Ciclo, en el cual Nuestro Padre amorosamente -llegado el momento- indicará cuándo empezará a preparar.

Mientras tanto nosotros, cada uno ¡hemos de seguir adelante! Y me incluyo hermanos, porque por ello estoy aquí, y les vuelvo a repetir: ¡esto es una constante amorosa! Y en esa entrega tu corazón, tu alma ha de ser cuidadosa para seguir en esa purificación; ¡en esa limpieza profunda!, no permitir que -aunque sigas aquí- en ti la inarmonía o el desamor influya. Eso no es tuyo. ¡Ya no te permitas aceptar!, porque lo que Nuestro Padre está haciendo llegar para cada uno de ustedes es tan grande.

Esa Energía empezará a activar ¡tantas cosas!, todas esas habilidades, todo ese amor. ¡Créanlo!, ¡siéntanlo!, ¡vívanlo!, pero siempre teniendo presente que para utilizarlo, para mostrarlo será en su nombre. Eres su instrumento amoroso y Nuestro Padre estará indicando en qué momento, cuándo, con quién, por qué y para qué, y entonces resurgirá, resurgirá la grandeza que en ti está.

Agradezco a mi Padre que a partir de ese momento, de ese lugar donde nos llevó; ¡hay más hermanos! y en ellos ¡ya inició! nuevamente. Yo te digo que todo ello es para que al resurgir, y esto es lo que dice Nuestro Padre: “¡Tomes de mí! ¡Me permitas! en ese sentir actuar. En algunos será para sanar, en otros visualizar”.

Sí hermanos, ¡más que visualizar!, la clarividencia se va a mostrar. En otros ¡telepatía!, ¡poderse comunicar! no importando la distancia. ¡Pero esto sólo es el inicio! Y hay más, ¡mucho más!, porque habrá quien ¡más de una! de esas cosas sentirá.

Y ahí es donde te pido -hermano- que te dejes llevar de la mano por Nuestro Padre tan amado; que siempre en amor, en humildad, esperando y sintiendo, estar ¡siempre atento! a recibir: cuándo, dónde, cómo, por qué, para qué y para quién.

Y cada vez más y más, porque así será, ¡se están acercando!, esos Grandes Momentos en los que ¡todo! de lo que viene de Nuestro Padre tendrá un gran significado -nuevamente- para cada uno de ustedes, ¡en eso que han olvidado!, en eso que todavía estaba en su letargo.

En esto consiste el “Proyecto Shirón”, ese que mi Padre amorosamente encomendó ¡no sólo a mí!, no sólo a tu hermana ¡Alexa!, que es la que te habla. ¿Quiénes hemos estado con ustedes hablando? ¿Quiénes hemos estado amorosamente y les hemos pedido que nos permitan estarlos guiando? Todo ello hermanos, y para ustedes, en ustedes, y todo esto seguirá siendo solamente preparación para la Gran Preparación.

Aquí es donde Nuestro Padre -con infinito amor- ¡ha visto!, se ha dado cuenta quiénes han acudido, quiénes están dispuestos, quiénes -el haberlo sentido- el Gran Recuerdo les ha movido. Yo te prometo -hermano, hermana- ¡que hay mucho más!, y que trabajes también en la paciencia, en la tranquilidad; que aunque al escuchar esto que hoy te digo no lo hagas tan seguido, ¡qué importa eso! En tu corazón está guardado, como lo que hoy estás escuchando, y en ti está y te pido que sigas en ese gran trabajo de tu preparación, de tu entrega amorosa hacia Nuestro Padre, “El Yo Soy”.

En la Enseñanza Sagrada hemos hecho una Gran Alianza para todos ustedes, y la Hermandad Blanca también presentes se hacen sentir en tu corazón, para que en tu mente en esa unión ¡se haga esa Gran Conexión!, que sólo en el sentir para estar ahí, en el Gran Llamado que hará “El Yo Soy”, porque así será, y se ha dicho y se ha insistido ¡que nadie sabe el momento!, pero estará y se verá sucedido. Por eso tu hermana aquí está.

¡Vuelvo a repetirte!: no siempre estoy presente ante mi Hermana Humanidad, ante ustedes ¡que tanto amo! ¡Esta es la forma como mi Padre me pide hacerlo!, pero sí vengo antecediendo al Gran Momento del Gran Llamado. La recolección estará sucediendo, en infinito amor.

Esto siempre lo estarás escuchando de tu hermana, llegado el momento que la Gran Flama Divina se haga sentir y que en ti la Llama Trina te diga, y al estar presente ante Nuestro Padre hable y diga: “¡Estoy aquí! ¡Me elegí! ¡Quiero vivir ese Gran Momento!, Padre mío”.

Ten por seguro hermano que desde que todo esto iniciamos y todo lo que has estado viviendo, ¡y tú lo sabes!, qué es lo que en ti, en tu interior ¡ha estado sucediendo! Y te voy a decir que hay más, ¡habrá más hermanos que llegarán! y se unirán, y aquellos que lleguen será ¡con esa fuerza!, ¡esa certeza de saber!, sentir que están acudiendo al Llamado de Nuestro Padre tan amado, porque será así. ¡Ahh!

Tienes toda la libertad. ¡Cuántas veces de tu hermana esto escucharás!, todas las que sean necesarias, si aquí quieres estar, o en cualquier otro lugar. ¡Pero escucha el Llamado!, cada vez ¡es más fuerte!, más claro ¡y más cercano!

La Melodía Sagrada día con día se sigue elevando. La clave para abrir y activar paso a paso. Y tú me dirás: “Eso ya lo has dicho, y nos has repetido que se ha activado lo que está en mí y conmigo”. Sí, hermano; pero también te dije que para llevarte hasta mi Padre eso sucedería más allá de la Octava, la Novena, la Décima. ¿Sabes dónde El se encuentra? ¿Tú tienes idea desde dónde Nuestro Padre -que es tan amoroso- y para que lo escuchen y lo sientan hasta ti se acerca? Hasta ahí -hermano- es donde es nuestro deseo ¡que tú llegues!, ¡que dejes de ser humano!, para que vivas la grandeza ¡nuevamente!, de Nuestro Padre tan amado.

Y eso no se deja a la suerte. ¡Eres tú quien elige! ¡Eres tú quien lo vive!, y no te detiene ¡nada!, ¡porque no existe la muerte! Cuando tú empiezas a empalmar y a unir todo lo demás, y en la Sinfonía Sagrada cada paso que das ¡elevas! todo aquello que en ti está, y en esa ligereza, ¡es por eso que te han dicho que tu cuerpo ya no es de carbón!, ¡que se convierte a silicio!, pero yo te digo: ¡hay mucho más!, ¡mucho más que ello! ¡Eres Esencia viva!, ¡eterna! ¡Eres Luz! ¡Energía! ¡Ahh!

Yo te prometo que llegará el momento en que ¡ni siquiera el cuerpo que utilizas! habrás de necesitar, porque es así: “El Todo y la Nada” en ti está. Tal como lo ha dicho Nuestro Padre: “Todo es un suspiro, ¡un Parpadeo Divino!, mediante el cual ¡de ti respira todo aquello que te viene a afectar!”

Y tú me podrás decir: “¿Y entonces por qué no lo hace?” Pregúntatelo a ti, ¡pregúntate por qué no se ha mostrado todavía eso en ti! ¡Eres tú! -hermano- el que se ha impuesto las cadenas. ¡Eres tú! -hermano- el que en cautiverio todavía sueñas. Despierto te necesita. ¡Ojos abiertos!, que no sólo del cuerpo, sino el corazón, el Ser, porque entonces ahí es donde viene ¡la clarividencia! para ver ¡todo! La clariaudiencia para escuchar no solamente a tu hermano hablar, ¡todos los tonos del Universo infinito hasta ti llegarán! El Lenguaje Sagrado ¡plena y totalmente lo entenderás! ¡Tanto!, ¡tanto por hacer!, ¡tanto por retomar!

Ahora entiendes -hermano- que aún cada paso que damos, vamos abriendo la Puerta para vivir la verdadera ¡vida eterna!, que no es incierta. Todo lo sabes, todo lo entiendes, porque ¡en amor infinito e incondicional vives y sientes! La Sabiduría Sagrada ¡tan ilimitada!, la tonalidad cada vez más se elevará.

Y a ti que te agrada y te gusta escuchar e ir y visitar a lo que llamas “Foco Tonal”, ¡mi Padre te va a entregar algo más fuerte que eso!, ¡que para ti ha tenido a bien preparar! Ahí es donde tu hermana te quiere llevar. ¡En eso consiste el Proyecto Shirón!, ¡ese! que me ha entregado en infinito amor. ¡Pero no esperes que todo tu hermana te lo muestre!, ¡porque eres tú y sólo tú!, ¡cada uno de ustedes!, quien abrirá como un crisol.

Cuando también tú lo hagas, entonces ¡ahí es donde cuenta te darás!, ¡que el Proyecto va caminando!, ¡y que estamos triunfando!, ¡y que todo lo vencerás! En eso consiste el “Proyecto Shirón”. ¿Ahora te das cuenta? que no fue mi templo, a tu hermana la que llamas “Enriqueta” la que lo creó. ¡Hay mucho más! ¡Es ilimitado lo que mi Padre te viene a entregar! Soy -en “El Yo Soy”- su Emisario en Gran Amor.

¡Y todo!, aún más que te estaremos entregando, ¡y es mi Padre el que me va indicando!, y con Gran Amor unida a mi templo te lo voy mostrando; ¡de ello te voy hablando!

Cuando llegue el Gran Momento en el cual ante ti me voy a mostrar ¡como soy, lo que soy y quien soy!, pero en Él, por Él, y en su nombre tan sagrado. Entonces -hermanos- será porque el “Proyecto Shirón” ya estará finalizando, pero en ese Gran Amor, venciendo ¡todas las adversidades!, y mis hermanos a los cuales he venido a compartir, con cada uno de ustedes ¡que ya unidos!, ¡amándose a sí mismos!, ¡queriéndose cada uno!, ¡compartiendo!, ¡entregando y recibiendo!, entonces para poder ir hablando de ello a los hermanos que estarán también despertando.

¡Habrá un Gran Despertar masivo!, ¡no como hasta ahora lo han visto! ¡Será tan fuerte, hermanos!, pero yo les digo que ustedes, ¡ustedes! que forman parte de la Avanzada serán quienes en ello estarán trabajando, ¡serán quienes!, ¡a nuestros hermanos ayudarán a estar despertando! ¡Nos acompañarán!

Pronto sabrán por qué hoy de esto les estoy hablando. Dense cuenta ¡la Gran Importancia!, ¡el amor infinito que Nuestro Padre entrega!, ¡y la confianza absoluta! que en cada uno de ustedes tiene. Por eso les repito: no habrá secretos; ¡nada estará oculto! para aquellos que entendiendo, tengan por cierto que esto es lo que estará sucediendo.

Mi Padre me dice que luego de esto que se vivió, es muy importante y va a acelerar, para que el momento de la Gran Preparación ya lo estén viviendo. ¡No se preocupen por el tiempo!, porque dentro de todo ello también es importante que cuenta se den ¡que no existe el tiempo!

Ustedes podrán ver o sentir, pensar y decir: “¡Ya pasó tanto tiempo! ¡Meses! ¡Días!” Crean -porque es así- que todo lo que Nuestro Padre tiene preparado, será y se vivirá en su momento perfecto; ni antes ni después.

Mientras tanto -al seguir adelante en el proceso- vivirán muchos cambios, ¡pero tenemos la fuerza que El nos da!, ¡la entereza! y lo que llaman “¡fe!” -amados hermanos- que miren ¡que es muy importante!, porque eso es lo que mantiene ¡erguido, fortalecido y vigilante! a aquel que en amor se ha elegido. También por ello estoy aquí, y mucho más de esto no sólo les voy a decir.

¡Yo les pido estar atentos a todos los sucesos!, porque tal como mi amado hermano, a quien llaman “Saint Germain” lo dijo: “Ya todo será en acción”. Y así es como lo están viviendo en esta Gran Revolución; lo que está sucediendo en amor, en amor, también en amor ¡y mucho más amor!, la Gran Llave que todo lo abre, ¡todas las Puertas! de las Dimensiones.

Hermanos; ¡no habrá razones!, porque vivirán y entenderán el porqué de todo esto, de lo que su hermana les está diciendo, y cada vez más y más, ¡más firmemente!, más constantemente, ¡totalmente!, ¡Alexa en ustedes!, ¡con ustedes y para ustedes!

Lo han estado viendo. Amorosamente les digo: aún más estará sucediendo. Entonces entenderán cuando se les ha insistido que Enriqueta ya no más; no para aquel, no para aquella de mis amados hermanos que al escuchar el Llamado están tan cercanos. ¡Seremos convocados! Nuestro Padre tan amorosamente lo hará, y mis hermanos con quienes a ustedes estamos acompañando, ¡también estarán!

¡Este es el Gran Momento!, el tiempo. Quiero decirles que empezarán a vivirlo fuertemente; tiempo del no-tiempo; vivirlo ¡todo! aquí, hoy, así -en amor- compartir, recibir y entregar. ¡Dar!, ¡dar cada vez más! de toda la Enseñanza Sagrada de “El Yo Soy”.

Tu cuerpo, tu templo, tu Ser, ¡tu alma! será alimentada ¡cada vez más fuertemente! El maná en ti estará. El prana ¡tan deseado! por aquellos que dicen que “se han preparado”. Yo te digo -hermano- que tan sólo con el corazón entregado, Nuestro Padre, para ti ¡ya lo tiene preparado! Eso es lo único que pide y desea, para que te vayas unificando, uniendo, y al hacerlo te estás conectando con la inmensidad, ¡con la grandeza!, con el Infinito ¡que en ti está!

¡Oh Padre! Ya todo empezó, tal como me lo hiciste saber al estar allá. Ahora lo que viene para cada uno de ellos -tal como la instrucción me la has dado- a suceder ha empezado. ¡Y aquí está tu hija! que tanto te ama, para cumplir ¡paso a paso! lo que en el “Proyecto Shirón” -en Gran Amor- se mostrará en esta Era en la que mi hermano Saint Germain ¡tanto está necesitando! de estos hermanos que han sido convocados.

¡Gracias Padre! ¡Gracias por permitirte estar! ¡Te amo tanto!, y muestro ante ti a quienes presentes están: cuerpo, alma y Espíritu también en este lugar.

Ahora entrego amorosamente la Llama Violeta; que envuelva tu cuerpo, tu corazón y tu mente, ¡a todos ustedes! y a quienes aman ¡tanto! -sus Seres amados- por quienes ¡tanto han pedido! Les digo -hermanos- que están envueltos amorosamente por el Gran Corazón de Nuestro Padre, y su infinito amor en ellos se derrama ¡abundantemente!, y en aquellos que piensan y creen que “en enfermedad están”. ¡No es así! ¡Todo en perfección!, y sanará; la salud, el amor, al entregarse a Nuestro Padre todos ellos.

Y yo los envuelvo en la Llama Violeta, transmutando toda la inarmonía y la elevo hacia Nuestro Padre, que siendo Energía purificada, multiplicada, vuelve hacia todos ustedes y abraza a todos mis hermanos en esta bendita Estrella amorosa.

Hermanos; su hermana Alexa con ustedes está. Hoy ¡un Nuevo Ciclo empieza! en amor, perdón y libertad. ¡Se abre otra Puerta! amorosamente para ustedes y en Gran Purificación está.

Y he aquí -en el nombre de mi Padre tan amado- queda en ti amorosamente sellado, ¡en todos ustedes hermanos!


Septiembre 18, 2019.
Saint Germain.

Y porque ¡es verdad!, ¡es verdad!, ¡amados!, ¡amadísimos hermanos! Lo digo con gran alegría; ¡todo lo que sucederá!, para ustedes en armonía, en unión, en esta preparación que nosotros tendremos a bien -si ustedes nos lo permiten- les daremos, porque Nuestro Padre esperando estará por ustedes.

¡Yo les digo!, que todo aquello que vivieron, lo que sucedió con cada uno, ¡contigo! de manera especial, cada uno de mis hermanos ¡fue sin igual! Nuestro Padre, ¡El!, quien hizo la invitación, y quien acudió al Llamado les digo: hubo ¡una gran depuración! en sus cuerpos, en su interior. Y verán.

¡Permítanse vivir ya todo ese cambio!, porque ahora nosotros entraremos. Y vuelvo a insistir: se está acercando el momento del Gran Ceremonial en el cual ¡tu hermano!... ¿a quién investirá? Lo digo en algunas ocasiones, pero hermanos, ¡esto! en la preparación llegará el Gran Momento. Nuestro Padre ya lo tiene dispuesto ¡para ustedes!, y yo con gran alegría, porque ¡tanto estoy necesitando!, ¡cada vez más y más! de todos los sucesos, y lo que verán, y lo que escucharán, y lo que vivirán, ¡es la grandeza de Nuestro Padre sin igual!, y entonces -hermanos- permítanse ya: ¡nos verán! ¡Claro que sí!

¡Cuántas veces Nuestro Padre y nosotros también! para ustedes hemos tenido a bien mostrarles, darles momentos, ¡señales! Cada vez serán ¡más fuertes! Se sucederán ¡con una sincronicidad!, pero será en aquellos que se estén permitiendo, y nosotros deseamos ¡que ustedes estén incluidos! ¡Es por eso que de esto les hablamos!, ¡amados!, ¡amadísimos!

La preparación ¡ya se han dado cuenta!, que es y está en ustedes, en cada uno, ¡en infinito amor! ¡Háganlo así!, que también nosotros en esta guía amorosa les vamos a decir cuándo -llegado el momento- ¡qué es lo que se habrá de hacer! ¡Qué es lo que necesitamos de cada uno de ustedes!, en ese quehacer en su caminar.

Muy claro han tenido que al buscar y hacer cada vez más continuamente esa Conexión con Nuestro Padre tan amado ¡y con nosotros! en infinito amor, porque hay quienes me han pedido y ahí estoy. ¡No me digan que no me han sentido! Cuando han invocado el nombre de su hermano, con gran alegría he acudido, ¡y no sólo yo!, ¡también mis hermanos! con ustedes amorosamente nos llaman ¡ipso facto ahí estamos! ¡Si eso es lo que queremos y necesitamos y pedimos!, que sean ustedes quienes nos abran las puertas en su corazón, en su sentir, ¡en ese Gran Amor!, porque entonces -al hacerlo- han empezado a vivir ¡todo! de lo que de Nuestro Padre tuvieron a bien recibir, al ser creados ¡como yo!, ¡como tú!, ¡como todos nuestros hermanos!

Verán que hay grandes mitos que ustedes se han creído; que lo único que han hecho es hacerles pensar ¡que no son dignos! y que están limitados. ¡Eso ya no! ¡Sé que lo han entendido! Ahora están en ese proceso en el cual libertad paso a paso ¡están expandiendo el amor!, y empiezan a proyectar ¡tantas cosas maravillosas!, ¡que también a ustedes les empiezan a acercar! de todas esas maravillas, que no solamente en este Plano terrenal están. Podría decir de aquí ¡quiénes lo han hecho ya!

¡Amados! ¡Eso es lo que nosotros queremos! y les pedimos ¡y de ustedes necesitamos!, y entonces verán cómo ¡más y más!, cuantas cosas les vamos a mostrar, pero para que ustedes en ese Despertar resurjan y sigan el camino, porque en el “Proyecto Shirón” el cometido ¡es! que se logre la Gran Maestría de cada uno de ustedes en la Enseñanza de “El Yo Soy”. ¡Eso es maravilloso! ¡Es grandioso!

¿Quién dijo yo?, pero en el entendido -hermanos- que al hacerlo es necesario, les pedimos, ¡les rogamos estar entregados! para vivir cada momento, cuando Nuestro Padre al hacer sentir diga: “¡Te necesito!” Pero sabes hermano que cuando El te dice: “Es que te necesito”, ¡no tienes idea qué es lo que hará de ti!, pero te está empezando a dar ¡muestras de ello!

Te puedo hablar de eso porque ¡lo viví y lo sigo viviendo!, ahora en esta Gran Libertad Amorosa que El nos da; viviendo, sintiendo y compartiendo el amor; sabiendo que todo lo puedo ¡porque viene de Él!, de “El Yo Soy” que ¡en mí está!, ¡y que a través de mí se va a mostrar!, que toda esa perfección que estoy viviendo y de la que te estoy hablando -con Gran Amor- ¡es de Nuestro Padre tan amado!

Somos ¡una Extensión Divina de Él!, y si lo somos es que ¡todo lo tenemos!, ¡y todo lo podemos hacer! ¡Pero hermano!, sabiendo que en esa unidad al estar floreciendo ¡es en amor!, ¡en humildad! Mi hermana, mi amorosa y bendita hermana Alexa lo ha dicho; por eso ha venido a estar encarnada, ¡porque sabe de los sinsabores! que en ustedes -hermanos- han tenido. Cuando empiezan a abrir como crisoles llegan ¡tantas emociones y sentimientos encontrados!

¡Ahí es donde te pedimos!, ¡te rogamos!, que siempre tengas presente en la Enseñanza de “El Yo Soy”. Ve -hermano- que al estar aquí y al entender y compartir con mi hermana, con mi hermano Sananda, ¡con todos mis hermanos de la Hermandad Blanca!, todos los que somos y estamos viviendo ¡esa Gran Perfección de Nuestro Padre!, tenemos bien entendido y en nuestro corazón ¡que estamos unidos en Uno solo!, ¡fundidos con Él!, en Gran Amor y que somos y estamos por Él y en Él. ¡Eso es! lo que nosotros deseamos que también ¡tú! lo vivas, lo entiendas, lo muestres, lo compartas, y que todo lo de aquí; los egos, las limitaciones, los apegos, ¡ya lo trasciendas!

¡Es eso hermano!, que no busques reconocimientos humanos. ¡Eso no! ¡Porque ya lo dijo mi amado hermano “Jesús”! -que también así lo nombran- entiende que al vivir ya todo ello, ¡tu Reino no es de aquí! El Reino del cual nosotros amorosamente estamos iluminados por Nuestro Padre ¡es allá!, ¡con Él!, pero que aquí también se puede mostrar, y está, y lo puedes vivir, en gran desapego a lo que la ilusión te quiera hacer sentir.

¡Es muy importante que eso siempre lo tengas presente! -hermano mutante- porque nuestro deseo ¡es!, ¡que vivas y logres la Gran Maestría! ¡Eso! -el sólo pensarlo y decirlo- me llena de una ¡gran alegría!, porque sabemos que habrá quienes lo van a lograr. Por eso que también hablándote de esto tu hermano está. ¡Claro que sí!

Si tú me quieres decir y te pones a pensar, que cuando nuevamente empezamos a de esto charlar, y te dije: “¡No es la primera vez! ¡Ya lo entenderás!” Ahora hay muchas cosas que has ido recordando, que has ido reconociendo y nuevamente entendiendo, ¡y que estás retomando! Ahí es -amado hermano- donde empiezas ¡y te estás iluminando!, y entonces nos permites que te sigamos hablando, ¡cada vez más! libremente, ¡cada vez más! claramente ¡de todo! lo que Nuestro Padre para ti tiene.

¿Y cómo no hacerlo?, si todo -amado hermano, amada hermana- estás a punto de vencerlo. ¡Sigue adelante!, porque ¡nosotros te estamos acompañando! Te sigo recordando que con tan sólo que invoques nuestros nombres, que pidas nuestra guía, nuestra compañía para contigo, ¡aquí estamos, amado hermano! ¡Eso es lo que nosotros queremos!, te pedimos y necesitamos: tu anuencia, ¡tu deseo de que nuestra Presencia te acompañe! en estas experiencias que cada vez más son ¡tan amorosas!

¡Bendito seas!, amado hermano. ¡Bendita seas!, amada hermana, porque estás permitiendo y estás en ese amoroso proceso, trabajo ¡tan gozoso! de unir tus cuerpos; ¡que ya no haya dualidad!; que empieces a caminar ¡en esa Unidad! que empieza a ser ¡perfecta!, porque con ello ¡atraes todo!: la Energía Sagrada, ¡la Luminosidad de todo lo que Nuestro Padre está haciendo llegar hasta esta Estrella bendita!

Porque entiendes y sabes de lo que te digo; ¡que ya no eres el mismo! que cuando nos volvimos a reencontrar. ¡Sabes perfectamente -amado hermano- de lo que te estoy hablando! Ahora entiendes, por eso me atrevo a decirte, como mi hermana lo dijo: ¡hay mucho más!, ¡mucho más que estás a punto de volver a explorar!, y que nosotros estamos amorosamente esperando ¡dar ese paso! Y aquí estamos esperando, como lo dijo mi hermana.

Amados: ¡bienvenidos sean todos ustedes! ¡Bienvenidos! a seguir viviendo ¡cada vez más fuertemente! todo lo sagrado que viene de Nuestro Padre.

Ya está el Puente en el cual ustedes -al empezar a caminar- unirá, está uniendo ya, de lo sagrado con el Plano terrenal. ¿Quién de ustedes o quiénes de ustedes, caminando por él ya están? ¡Es maravilloso ver cómo con cuánto gozo!, ¡con cuánta alegría!, ¡con cuánto amor se están entregando!, y van paso a paso, cada día agradeciendo ¡cada amanecer!, sabiendo que todo para ustedes ¡fue hecho por Él! ¡Vivir en el amor! ¡Sentir en el amor!, y entonces para ustedes el Nuevo Sol, iluminando el camino, y cada uno abriendo como crisol.

¡Amados!, ¡amadísimos!, quiero decirles ¡tantas cosas!, pero mi Padre dice: “Paso a paso, ¡momento a momento!, que ya su caminar ¡no es lento!” Han empezado a acelerar en el proceso ¡tanto!, que de verdad, lo que hoy por hoy me pudiera callar, ¡mañana será lo primero que ustedes van a escuchar!, ¡y vivir!, ¡y sentir para compartir!, y sobre todo ¡amados!, ¡amadísimos hermanos!: ¡experimentar de lo sagrado!, lo que El -Nuestro Padre- para ustedes tiene.

Y he de decirles: ¿por qué tan preocupados por el lugar? Hermanos; cuando Nuestro Padre tiene a bien elegir, no importa lo que pueda suceder; cuando El dice: “¡Sí!”, ¡es sí! Y una cosa es muy segura y muy clara; que a mi hermana en este templo que ocupa, ¡claro que la va a seguir llevando! Ya hay otro lugar que está preparando. ¿Y qué decir del Lugar Sagrado?, en el cual Nuestro Padre a todos ustedes -y nosotros también ahí acompañando- estaremos preparando. Amados; nada se ha dicho aún. Todo es tan preciso, paso a paso y ustedes unidos. ¡Claro que sí!, que así será.

Pero es muy importante insistir en lo que mi hermana dijo: “Ya no tomen el tiempo de manera lineal”. Ya no se digan: “¿Cuánto tiempo ha pasado por aquél lugar en el cual el Templo Sagrado se edificará?” El momento está listo y previsto, y ahí mucho te ocuparás. Sí hermano; tenemos un gran pendiente.

¡Y verán ustedes! -amados hermanos- ¡cómo todo se dará! en Gran Amor de Nuestro Padre. Porque es así, vuelvo a repetir: cuando El dice: “¡Sí! ¡Ahí!, ahí donde te pido -hijo mío- que estés, es porque es ahí”. Que luego tú veras en la acción el porqué y para qué de lo que te pidió. ¡Y ahí es cuando nosotros agradecemos! amorosamente ¡todo! lo que El nos pide. Y si lo hacemos -amados hermanos- ¡las grandezas de Nuestro Padre se muestran una tras otra!, ¡en tal continuidad! que -como lo ha dicho mi amada hermana Alexa- no terminarás de agradecer -eso lo dice en el cuerpo que se hace llamar “Enriqueta”- ¡no terminas de agradecer cuando ya estás viviendo nuevamente uno más!, ¡y otro!, ¡y otro!

Amados hermanos; ¡ésta es! en la verdad de Nuestro Padre y en la Multidimensionalidad, que no lo saben, pero algunos ya han empezado a caminar; ¡por lo que has escuchado!, ¡por lo que has visto!, ¡por lo que has sentido! Y miren cómo lo dije (señalando primero a su derecha, luego a su izquierda y finalmente hacia el centro), ¡y están entendiendo por qué!

Así es como también llegarán ustedes a vivir, porque de Nuestro Padre -al tenerlo todo- lo pueden decir con esa tranquilidad y seguridad: ¡Todo lo sé! Sé lo que hay en tu mente traviesa hermana. Sé lo que hay en tu corazón amoroso, y me quedo con ello ¡porque ahí es donde está el gozo!, de saber que Nuestro Padre -al estar en ti- se muestra ¡y te va a dirigir!

Y entonces también se empiezan a vivir lo que ustedes llaman “milagros”, que solamente son los sucesos amorosos, que al sincronizarse los eventos con los pensamientos, con el deseo, y cumpliendo lo que Nuestro Padre al pedir te dice: “¡Esto es lo que Yo quiero!”, ¡porque tanto nos ama!, que lo que te pide hacer ¡es! -como ustedes dicen- “para tu mayor bien”, ¡y el de todos también!

¡Es que siempre es el amor!, ¡amor y más amor!, como ustedes cuando hacen sus decretos amados; hermanita: “¡Arriba de mí amor! ¡Abajo de mí amor! ¡De un lado y del otro amor! ¡Dentro de mí amor! ¡Que me envuelva el amor!, el infinito amor de mi Padre, y la Llama Violeta que mi hermano me entregó”. ¡Qué bonito! ¡Qué hermoso! ¡Qué bello!

¡Así hermanos!, ¡así!, ¡en Gran Amor!, porque lo que tengo para entregarte ¡mi Padre me lo entregó! y en esa Alquimia Amorosa, grandiosa, a ustedes les doy, ¡a ustedes entrego!, para que lleguen a vivir en la pureza, la transición, ¡la grandeza!, nuevamente ¡lo que El nos dio!, y en esa Alquimia la ocuparemos y ustedes verán ¡en quién! Cuenta se darán. ¡Y eso viene de Nuestro Padre! Es su deseo que se muestre. Ustedes van a atestiguar, que ya se empezó a mostrar, ¡y aún más!

¿Quiénes han estado viviendo -en su apresuramiento amoroso- la experiencia de una dolencia, enfermedad? ¡Hermanos! ¡Si entregados a Nuestro Padre están!, ¿qué pueden temer? ¡Nada! ¡Nada!, porque El ¡todo te lo da!

Y ahí es donde tienen que tener siempre presente ¡lo que llaman “Fe”!, pero que es sólo la certeza de saber ¡que El escuchando todo está!, y está actuando. ¡Permitan que Nuestro Padre actúe! y que su hermano Saint Germain -en la Alquimia Amorosa- envuelva cada cuerpo, ¡purificando!, ¡elevando!

¡Amados!, ¡amadísimos hermanos!: grandes lecciones vienen ¡en acción hermanos!, ¡en acción! Y verán y sabrán por qué lo digo, amorosamente para ustedes, ¡y serán testigos!

Hemos de empezar a prepararnos, porque en esta siguiente lección, ¡la acción es muy importante! Y yo les pido ¡que nadie! de ustedes quiera reprobarse. ¡Estar atentos!, ¡dispuestos! -amados, amadísimos hermanos- ¡porque hay mucho por hacer!

Y al pedirle a mi Padre el verme acompañado por ustedes, El sabe por qué; ¡por qué tú!, ¡por qué tú!, ¡porque cada uno de ustedes!, ¡por qué!, ¡para qué!; porque en el Gran Corazón de cada uno ya está ese infinito amor ¡abierto!, ¡deseoso!, ¡está en su punto!, para entender, para seguir adelante, para vivir, para utilizar, para compartir, para hacer; pero siempre también entendiendo ¡que todo viene de Él! Quien no lo haga así, amados, amadísimos hermanos, ¡ahh!, ustedes mismos se atraen lo que sucede en cada uno.

Pero hoy estamos ¡en gran gozo!, ¡en amor!, ¡en unión! por todo lo que vivieron. No tienen idea de lo que se hizo expansión. Nuestro Padre tan amado -de verdad hermanos- cómo ¡se hizo sentir para cada uno de ustedes y para todos unidos! Repercutió en los Seres que ustedes aman. Todo lo que están viviendo ¡no piensen que es sacudida por tristezas o por dolores! ¡No, hermanos! ¡Aquí es donde se está mostrando la fuerza y la fortaleza de cada uno de ustedes!, el saber ¡que Nuestro Padre está!, ¡y que nosotros estamos acompañando!

Y entonces ahí es donde se comprueba ¡y mostrarán! cuando digan: “Dios conmigo. Yo con Él. ¿Quién contra mí? ¡Nadie!, ¡porque todo lo voy a vencer!, en su nombre tan amado; con Él, por Él y en Él”.

Amados, ¡amadísimos hermanos!; hay muchas cosas por hablar. A ciencia cierta que así será. Hay eventos “astronómicos” -así los llaman- que sucederán; ¡pero yo les digo!: hay una Gran Alineación que se está preparando, y en infinito amor a la hermana se le está indicando y hará una convocatoria. ¡Llamará! Yo les pido estar atentos, porque será muy importante que en esos momentos nos reunamos, ¡y! se indicará también dónde y por qué, ¡amados!, ¡amadísimos! Y si yo así les pido es porque también así unidos, reunidos, se seguirá en el proceso lo que Nuestro Padre desea para cada uno de ustedes.

¡Ahh, hermanos! Ya verán quiénes se les estarán uniendo. Lo digo de verdad con gran regocijo, porque tal como Nuestro Padre lo dijo: “Y en ese tiempo, entonces se unirán todos mis hijos; aquellos que ya listos están y con mis Emisarios que llegaron a encarnar”, para que ustedes también se muestren y unidos -amados hermanos- en Gran Alabanza a Nuestro Padre agradezcamos ¡todo! lo que en este Plano terrenal ¡para ustedes! amorosamente estará mostrando.

Se unirán también nuestros hermanos, ¡aquellos que están llegando! Que tal como son, ante ustedes se estarán presentando. ¿Y cómo sabrán que en el nombre de Nuestro Padre están? ¡Ahh! El Gran Corazón de Corazones al hacerlo sentir lo estará indicando.

¡Pero qué digo, hermanos!, si en la Gran Preparación que Nuestro Padre hará -en infinito amor- hay muchas cosas; en la Enseñanza de “El Yo Soy” escucharán, verán, vivirán, recordarán y entenderán. Se los dice su hermano.

Y hago entrega, ¡para reforzar! sus corazones, sus cuerpos y los Espíritus de aquellos que hemos llamado para estarnos acompañando: ¡la Llama Violeta!, que los envuelva ¡y en Gran Alquimia Amorosa! también para todos ustedes la purificación -en Gran Amor- de sus cuerpos. ¡Amados!, ¡amadísimos hermanos!

Que yo soy ¡Saint Germain!


Septiembre 18, 2019.
Ángel Ráh.

Y así es. Y para finalizar estos momentos, en agradecimiento a quienes tuvieron a bien acompañar. ¡Reafirmo lo que mi hermano con ustedes acaba de hablar!: ¡habrá un Gran Alineamiento! y el Infinito expandirá, enviará ¡una Gran Luz! que envolverá a todos por igual, ¡no sólo esta bendita Estrella! ¡La Galaxia de Galaxias se verá! El Universo de Universos desde ahí ¡todo llegará! Será ¡un Gran Reencuentro!

Ahí es donde aquellos de ustedes -hermanos- que al estar preparados, ¡más abiertos!, porque vivirán lo que acabo de mencionar: un Gran Reencuentro. ¡Uhm!

Es importante que al estar sucediendo, sentir el amor tu cuerpo envolviendo, para saber y estar en lo cierto; que al estar vibrando en él y con él, lo que tú vas a ver, a sentir y reconocer quién eres y por qué estás aquí.

¡Te lo dije no sólo una vez!, que entonces te hablaría de todo esto. La Consciencia Cósmica está haciendo su efecto, ¡pero no sólo eso!, porque se viene a unir la Universal ¡en su totalidad! y te vendrá a hablar, y ahí es donde tu hermano -al que escuchando estás- te dirá.

Si algunos pensaron que hasta hoy de lo que escuchó no hubo preparación, ¡cuán equivocados!, porque respetando el libre albedrio de cada uno de ustedes, pero estando atento y seguirlo observando ¡todo!: tus pensamientos, tus emociones, tus sentimientos, tus acciones.

Ahí es donde al pedirte la preparación, respetando tu elección, ahora te digo: cada uno de ustedes ¡ya lo hizo! Quién con Gran Amor y el deseo absoluto de empezar a caminar en cada Dimensión lo que viene de “El Yo Soy”, en esa Enseñanza Sagrada, y de ello te hablaré yo.

¡Es muy importante! Te pido que estés amorosamente expectante, porque lo vivirás, tal como lo dijo el hermano, y a través de esta hermana escucharán cuando el Gran Llamado para lo que estarán escuchando se hará.

Las Claves Sagradas ya se han estado mostrando. Los códigos que se estuvieron ocultando de ello ya se está hablando. ¡Pero yo te digo!, que si tú aún sigues cautivo de todo esto, ¡serás tú el que no se estará permitiendo! lo que a la Luz del Día Glorioso se está mostrando, ni verlo, ni sentirlo, ni vivirlo.

Estos días serán de Gran Preparación, ¡y es Universal! ¡No sólo ustedes! Ya lo escucharán. Un gran movimiento habrá, pero cuando ustedes eso escuchen que no haya temor. Es por eso que de esto les vine a hablar, porque entonces sabrán que es solamente que en la Gran Alineación están escuchando el Llamado de “El Yo Soy”, Llamado que también ustedes serán convocados. Hermanos, todo esto que les digo ¡es! y será, lo vivirán. ¡Les pido atentos estar!

Y entonces entenderán que ya se está abriendo para ustedes y en ustedes el Portal Multidimensional, porque así será, y su hermano también los acompañará; que es por eso que en este tiempo ¡con ustedes también está!

¡Los amamos infinitamente!, por eso con ustedes estamos. Les pedimos seguir adelante, unidos cuerpo, corazón y mente. ¡Decretos Sagrados! ¡Conexión infinita!, que la reacción vendrá ¡con toda la fuerza y tan bendita!, ¡para ustedes, hermanos!

Que yo soy su hermano: ¡Ángel Ráh! me hago llamar.

Y toda la Energía Sagrada del Gran Amor de “El Creador” a ustedes amorosamente les es entregada.



Septiembre 18, 2019.
Sananda.

Y la relación existe, porque en infinito amor te digo -amado hermano- que en la Sincronía Sagrada nuevamente sentirán y vivirán ¡mi llegada!, tal como en la promesa que fue hecha.

Les acompañaré. ¡Con ustedes estaré! Es por ello que ¡toda la fuerza! y en mi Padre, por Él y en Él, para ustedes ¡nuevamente!, amorosamente con ustedes.

Amados hermanos; el momento se está acercando, y me escucharán y les hablaré ¡más fuertemente!, más ¡amorosamente! Es por ello que se habla de la Gran Alineación.

Y hago entrega ¡de todo mi amor! para ustedes -amados hermanos- porque empezarán a hacer, a mostrar ¡todo lo que mi Padre entregó! y en ustedes está, como lo hice yo. Eso ¡y mucho más!

Que yo soy ¡Sananda!, que contigo caminará.



Septiembre 18, 2019.
Alexa (2).

Y la Luz Sagrada de mi Padre -Nuestro Padre tan amado- hará su llegada con toda la fuerza. Triunfalmente hará su entrada. ¡No hay vuelta! Todo aquel de mis hermanos que se ha estado preparando vivirá de las promesas de Nuestro Padre. En cada uno se estará mostrando. ¡Gloria! ¡Gloria infinita a su nombre! ¡Ahh!

Y todos nos veremos postrados alabando su nombre. Y todos los Legados serán abiertos, reencontrados. ¡Y todo! lo que se había preparado: escritos, Profecías, en gran contento aquellos que se han elegido en un sólo hito su nombre estarán alabando.

¡Gloria eterna al Padre y todo lo sagrado! ¡Bendito sea eternamente!, no sólo en este Plano, en el Gran Universo de Universos. Todos nuestros hermanos: Grandes Maestros, Seres Iluminados, Ángeles y Arcángeles, Querubines, ¡todos unidos! con mis hermanos que se han elegido, ¡ahh!, glorificando a mi Padre, ¡a Nuestro Padre! ¡Ahh! Y todo se habrá cumplido.

Esto es lo que vivirán los que se han elegido, los que por la gloria de Nuestro Padre en el proceso están acompañados, ¡guiados! Se verá. Todo va a empezar. Entonces sabremos que no hay nada ni nadie que sea especial; que sólo que estamos nuevamente viviendo la gloria abierta y suprema de Nuestro Padre. No tiene igual. Y no lo digo yo: ¡es porque es!, porque viene de Él.

Toda esta transición que han empezado a vivir, mi Padre pide que lo hagan en amor; sintiendo y sabiendo, porque te lo irá mostrando; que El te está acompañando, que está en ti y que siempre, eternamente es, ha sido y será así. ¡Ahh!

Agradezcamos a Nuestro Padre por todo lo que les ha entregado y por lo que viene, que aún más, es tan bello y sagrado.

Estamos abiertos de corazón, cuerpo, mente, pensamiento de lo que está llegando. La Gran Enseñanza es ir recordando -tal como se dijo- que la Akasha la empezarían a vivir. Eso es lo que está aquí. Se les pide estar atentos por lo que irán recordando cada uno de ustedes, de manera individual, personal, que será sólo en amor; para luego al estar juntos, reunidos, será en unidad. Por los otros estará completamente entendido y por bien sabido, el porqué todo esto de lo que nos vinieron a hablar. Uhm.

Dice que cuando se ha hablado de la apertura de cada sello mucho han tergiversado de lo que se ha tratado; el Apocalipsis que se está viviendo es para una transición maravillosa, porque los Cielos se estarán uniendo al Plano terrenal.

Ahí es cuando entonces vivirás plena y totalmente lo que es entender que es lo mismo abajo como arriba, adentro como afuera; aquí, allá. ¡Todo en unidad! Los “Cielos” -que así los llamas- la Gran Dimensión Amorosa en la cual Nuestro Padre está, y al vivir todas las Sagradas Llamas que no queman pero que te envuelven, que te iluminan y te muestran todo lo que es la Gran Energía Amorosa, Sagrada, que no tiene igual. Está en ti, en todos, y nuevamente a ello te unirás. Y es así. Hecho estará.

¡Gracias Padre! ¡Gracias por lo que nos has hablado y lo que nos has indicado! Permítenos seguir adelante bajo tu guía, recibiendo tu instrucción cada día y viviendo en tu infinito amor, para que se cumpla ¡esa Gran Profecía! de la que nadie habló; que se viviría ¡este Gran Momento! en el que la ilusión desaparecería y la verdad infinita de “El Yo Soy” -que eres tú- ante ellos se mostraría.

¡Bendito seas! ¡Gracias Padre! ¡Ahh!


Hermanos; les agradezco el haber acompañado. Hay muchas cosas de lo que hoy nos hablaron, de lo que se han empezado a abrir para todos nosotros ¡y más! Vamos a verlo, a vivirlo, a sentirlo -en Gran Amor- ¡para compartirlo! Ese es el deseo de Nuestro Padre, ¡que tanto amo!, de “El Yo Soy”.

¡Gracias por acompañar! ¡Gracias por sentir!, ¡por estar!

Con la certeza les digo; que ustedes que han estado y que siguen y que seguirán, ¡no se van a arrepentir! ¡Al contrario!, verán cómo en el Gran Reencuentro de los que estamos, cada uno con nosotros mismos será. ¡Viviremos el Gran Epicentro de la Implosión Amorosa!, tener nueva versión -la verdadera- de cada uno de ustedes, para que en esta Nueva Era se muestre, y que Nuestro Padre con gran alegría diga: “¡He aquí a mis hijos que tanto amo! ¡Mis hijos que se han elegido! y que se muestran ante ustedes como lo que son; ¡tal como Yo los creé!; que es mi deseo que todos por igual vuelvan a ser como “El Yo Soy”, lo que soy, viéndome en cada uno, mostrándome totalmente, nuevamente en una ¡Gran Expansión de Amor!” Y es así, amados hermanos. ¡Ahh!

¡Gracias por estar! Cómo al compartir, al escuchar, fortalecieron tanto este cuerpo que ocupo.

¡Gracias! ¡Gracias a mi Padre y gracias a ustedes!