22 de febrero de 2017

Canalización del 15 de Febrero de 2017

Febrero 15, 2017
Aleshia/Enriqueta (1).

… pudieran pensar en: “¿Cuál es mi lugar? Pues si aún recién estoy descubriendo que -si estoy aquí- es porque una misión que mi Padre me está pidiendo, de alguna manera tendría que empezar a estar cumpliendo”.

¡Pero primero con nosotros mismos! ¡Primero tú! Y eso no habla de egoísmo, sino realmente habla de una verdad infinita, porque todo lo que Nuestro Padre entrega, en algún momento alguien dijo: “Así como te lo da te lo quita”. No es eso realmente; somos nosotros los que ¡cortamos de tajo!, cuando empezamos a vivir, empezamos a sentir.

Muchas veces -cuando eso empieza- empiezas a vivir, ¡ahh!, el temor detiene todo, todo lo que está aquí, interno. Lo que Nuestro Padre te pide: “Amado hijo; date cuenta que así como te he creado, ¡también tú eres eterno!” Pero siempre el temor; el pensar que por todo lo que conociéndote, realmente, y ya sin la máscara con la que muchas veces -no te comportas- sino que ¡muestras ante tus hermanos!, pero contigo mismo te das cuenta que hay muchas cosas que todavía te hacen mostrarte como humano.

Y el repetirlo, puede haber justificación cuando todavía caminas dormido; pero cuando tú dices: “Humano soy”, estás negándote a vivir, a abrir, ¡a mostrarte! -primero a ti- esa grandeza que Nuestro Padre nos ha entregado.

Pero cuando te das cuenta y todo empieza, y en ti, ¡y realmente escuchas de la enseñanza de “El Yo Soy”! y de todo lo que antaño nos dejaron como un Gran Legado, dentro de la enseñanza; que es una verdad autentica, pura, ¡que siempre está!, y que ha llegado el momento en que nuevamente en acción se va a mostrar. ¡Ha empezado ya!

Antes, ¿quién de ustedes se permite recordar?, que por allá, muy lejanamente llegó a escuchar, cuando algunos hermanos al abrir, mostraron -de Nuestro Padre- su divinidad, y que realmente ¡muy pocas!, contadas veces; no como hoy, que lo hacen con tanta libertad; el decir: “Hay hermanos que han llegado y que se han mostrado ¡y que nos han venido a hablar! Y nos han dicho ¡que es su deseo querernos ayudar!, para lograr seguir el camino, en ese infinito amor. Y hacerlo en unidad y también en una Gran Libertad”.

Esas palabras… siempre, seguido, frecuentemente, las van a escuchar: ¡amor, unidad, perdón, libertad! Cada una de las banderas que mis hermanos, los que aquí están y que empiezan a tener muy claro; qué es lo que Nuestro Padre les pide, para que también compartan ¡con todos los humanos!, el que vivan ese despertar.

Ese Gran Despertar del que tanto se habló y que en un principio, cada uno de nosotros -con tanto que escuchamos- y el estar equivocados, ¡se atemorizó!

Ahora sabemos que precisamente el temor ¡es lo primero que tenemos que soltar! ¡Y ahí vamos!, en esa preparación, intentándolo siempre en infinito amor; pidiéndole a Nuestro Padre, a nuestros Maestros, ¿y por qué no decirlo?, de aquellos hermanos que prefieren ir por ese sendero, de vivir y estar contactados. ¡También!, siempre y cuando sea con aquellos que vienen en el nombre de Nuestro Padre tan amado.

Muchos caminos se están abriendo; pero créanme que no hay final, sino para llegar a ese lugar en donde vivirás la Gran Libertad; en amor, y todos unidos. Esos caminos se encontrarán.

Cuando todavía ¡no estás preparado! para entender y darte cuenta que -en el momento en que empiezas a dejar de ser humano- todo lo que Nuestro Padre en ti ha depositado, empieza a fluir, ¡a vibrar incesantemente!, y cada vez ¡más y más lo sientes tan latente! ¡Aquí dentro! Pero hay diferentes puntos muy importantes, que -al abrirse- algunos con especie de exabruptos, sobresaltándote; haciéndote sentir con tanta fuerza; muchas veces creyendo lo que estás sintiendo; ¡que de momento tu corazón dejará de latir! ¡Pero no es así!

Hay tantas cosas que al amalgamarse con el cuerpo físico, el cual tiene que acostumbrarse a -cada vez más- con todo eso está llegando, y empieza a vivir el despertar; como el verse ¡más sutil!, más ligero. Porque de esa manera empiezas a dejar ésta densidad, en la cual has permanecido. ¡Y no hablo solamente de ésta vida! ¿De cuántas -cada uno de ustedes- serán?

Pero eso no es lo más importante; lo que es verdadero; lo que está vibrante, ¡es el aquí!, el ahora, ¡hoy!; porque el Gran Llamado está a punto de suceder. ¡Y todos los que estamos!; los que van a escuchar, sabrán; se les indicará ¡cómo y de qué manera seguir su caminar! Ustedes lo verán, y -lo que es mejor- ¡lo vivirán!

Y se sigue creando tanto desconcierto, porque todo lo que se ha abierto -aún también en el exterior; lo que del Cosmos viene, ¡pero que Nuestro Padre entrega con infinito amor!, aquí te dicen y pretenden todavía manipularte, diciendo que solamente habrá ¡caos y desolación!

¿Pero sabes?, todo lo que ha empezado a sentir tu corazón; que está recordando ¡y que en cada latir te está gritando!, que en la enseñanza de “El Yo Soy” -al estar despertando- estás retomando la divinidad que dejaste; que en aquella pausa que hiciste, ¡cuando de Nuestro Padre te alejaste!; ahora, ¡ahora que ya te decidiste!, nuevamente en ti ¡esa Luz!, al empezarla a sentir; el deseo ferviente, fuerte, inenarrable, de compartir.

Mas -para poder hacerlo- pleno, total, de manera individual, ¡hay cosas que todavía se tienen que limpiar en tu interior! ¡Y así se está haciendo! ¡Y todo lo que está sucediendo! a la par; dentro, afuera también se verá; porque tal como se ha dicho: “Así como es arriba es abajo, y como es en el interior también en el exterior”.

Todo está sucediendo con esa sincronicidad de Nuestro Padre, y nuestros amados Maestros, ¡de todo lo que nos estuvieron advirtiendo!; pero amorosamente, porque al suceder -y tal como lo han dicho- todo lo que empezarías a vivir sería ¡muy fuerte!; mas en amor, en infinito amor y en unión.

Y ahora -amados hermanos- si cada uno de nosotros al elevar nuestras manos, agradeciendo todo lo que Nuestro Padre a cada uno -también en unión- nos ha estado bendiciendo y nos dice: “¡Esto! -amados hijos- no es nada comparado con lo que tengo preparado ¡para cada uno de ustedes!”

Es el momento preciso; ¡así como antes!, cuando mis amados hermanos, ¡aquellos que estaban destinados para estar guiando!, pero siempre siendo Mensajeros de lo que la Divinidad -Nuestro Padre- al hablar y decir: “Esto es lo que Yo quiero; para que luego ¡todos mis hijos despierten de su sueño!, de esa ilusión, y sigan su camino de infinito amor. Que se den cuenta que el Plan Divino, que “El Yo Soy” para ellos preparó”.

Es el momento preciso para que cada uno lo viva, ¡tal cual como “El Yo Soy” lo hizo! ¡A pesar de que algunos! -hoy por hoy- se estarán resistiendo; porque algunos incluso se atreven a decir: “En El no creo, porque no lo veo, ¡ni lo siento!”, aferrados a que estos adelantos que se han estado viviendo, lo han logrado.

Si ustedes supieran realmente; la mayoría de ellos; los que han entregado, para que los Hermanos Humanos sigan avanzando; si por un instante se pusieran -y no a pensar- sino a reflexionar, todo de lo que se han maravillado: ¿quién realmente se los ha entregado? Y siempre ha habido un instrumento de amor, que ha aceptado estar aquí, para con ustedes compartir; para entregar lo que piensan ¡que una mente brillante lo pudo inventar!

¡Nada! ¡Nada! -hasta hoy- ni lo que más adelante verán, es un invento de alguien que se puso a pensar; ¡porque es la guía y la inspiración de Nuestro Padre!, ¡cuando realmente es el momento preciso en que la Hermana Humanidad se pueda ayudar en éste caminar! Y aún así: ¿qué es lo que hemos mostrado?, la gran mayoría: que para hacerlo y vivirlo ¡no estamos preparados!

Mas -de tiempo en tiempo- mi Padre ha decidido que aquellos que ya empiezan a vivir ¡y tienen dentro de sí el Dios Vivo!, ¡es necesario que ya sean separados!, para que sigan en esa preparación; una Gran Aceleración, porque el Ejército Divino que vienen en su nombre, y aquellos que hoy, ¡aquí también! harán con nosotros esa unión, ya se estará viendo.

Y algunos empiezan a hacer conjeturas; que: “¿De qué manera seria? ¿Que cómo se verá?” Pero -de que estamos viviendo ese día- mi Padre lo mostrará; porque no solamente está aquí su hermana. ¡Bendito El!, porqué en la forma humana, verán, lo ha dicho mi Padre: “¡La sorpresa amorosa que ya les preparé!”

¿Y quiénes realmente la vivirán? Aquellos que -al sentirla- ¡la creerán!, ¡y lo compartirán! Aunque todavía haya algunos que ¡de “locos”! -a nosotros- a todos nosotros, ¿qué palabra puedo aplicar?, ¡nos “tacharán”! Dirán: “¡Otro grupo más!” ¡Qué importa!, porque lo verdadero ¡y cada uno empezará a sentir que quien los exhorta!, ¡es Nuestro Padre! y que tú eres ese hijo que -en éste tiempo- se tornará en su heredero, ¡de todo!

Es el Gran Tiempo para que ¡abras ese Gran Tesoro! ¡y dejes la dualidad! Y que todo lo que fluya desde tu interior ¡se abra toda esa inmensidad! que viene de Él. ¡Y ahí es donde tú estás inmerso!, en el tiempo del no- tiempo, y viviendo y compartiendo con todos aquellos hermanos, ¡no solamente humanos!

Por eso se ha dicho que -cuando tú entiendas- que no debes darle importancia ¡ni a raza ni a religión!, porque entonces verás ¡que también de otra Dimensión te vendrán a acompañar!, y la apariencia ¡nada tiene que ver!, porque en la Apertura de Consciencia ¡será la Esencia! a la que ¡tú! te comunicarás con éste y con aquél; que no necesariamente tiene que ser humano, al estar reencarnado ¡y todo eso estés finalizando!, amado hermano.

Verás, verás que no te hemos mentido. Y si todo lo que estás escuchando te lo estoy puntualizando, realmente de una u otra forma, con diferentes palabras, ¡pero todo es lo mismo!, porque lo que viene de la Fuente ¡es eterno! y -para que a ti llegue directo- ¡no debe haber abismo!

Cuando empiezas a elevar tu Energía y sigues ese ritmo en tu día con día, entonces también cuenta te vas a dar, ¡psh!, que siempre has compartido; que aquí están contigo también hermanos, que antaño no habías visto, porque ello ahora es el tiempo; también; también.

Mi Padre ha dicho que ya es el momento de que todo esto, ¡ustedes!, que han estado firmes, constantes, ¡de que todo esto ya deben estar escuchando! ¡Y créanme!, que no sólo ustedes; ¡en diferentes puntos de ésta Gran Estrella!, hay hermanos que también al escuchar, al sentir, ¡pero nos vamos a unir en un sólo corazón! ¡Ahh! No habrá división; no tendrá importancia el color, porque sólo tendrá sentido el Gran Sentimiento Divino, que se llama “Amor”.

Eso es lo que nos estará llevando. ¡Eso es lo que está retomando toda esa fuerza!, que por estar caminando en ésta densidad le había invitado. Inclusive a esa palabra, la verdadera intención; la profundidad de lo que Nuestro Padre entregó, ¡habían tergiversado! Ahora no habrá excusa, ni se cometerá ningún error; para todo aquél que al abrir, al seguir su preparación, Nuestro Padre nos ha dicho: “Es el Gran Momento”.

A veces -como su hermana que hoy les hablo- ¡no entiendo!, por qué tiene uno que llegar ¡y enmascarar algo tan grande!, ¡tan claro!, ¡tan transparente!, ¡tan hermoso! ¡Psh! Y aún así; cuando poco a poco se está mostrando; entonces, es cuando también la respuesta está llegando.

Si ahora ¡también es diferente la forma! en la que Nuestro Padre -sus Emisarios- ha enviado; pero todo va de acuerdo al tiempo, en el que van viviendo nuestros Hermanos Humanos; porque cuando dicen que ya han adelantado; ¡que han entendido!; ¡que no se volverá a repetir lo pasado!; hay muchas cosas en las que siguen ¡tan confundidos! Aún teniendo los ojos abiertos, pareciera ser como si -de tiempo en tiempo- los tuvieran cerrados.

Pero eso es parte; algunos dicen que es “un experimento”. ¿Y tú qué crees hermano? ¿Piensas que Nuestro Padre haría eso? ¿Crees que ¡con tanto que te ama!, tu proceso para lograr llegar a Él lo vuelve lento?

¡No es Nuestro Padre! ¡No es El! El ¡cuando de todo hizo expansión! y en ese infinito amor, ¡psh!, cuando cuenta se dio y vio, que algunos querían vivir esa Gran Experiencia; que la separación -en esa Gran Misericordia- ¡sí!, el velo del olvido te dio; porque al todo saberlo -con sólo mirarte- ¡sabía lo que estarías viviendo! El impacto al volver a tomar, ¡lo que en acción nuevamente volverás a lograr!, es tan fuerte.

Si yo te dijera que hay hermanos que aún así -al aquí venir a intentar ayudar- volver a mi Padre ¡no lo han podido lograr! ¡Uhm! ¿Que por qué lo digo? Muy cercano está el momento de que -de los que aquí están- lo vivirán conmigo. Sabrán el “porqué”.

¡Ha llegado el tiempo! ¡Y éste es!, en el que mi Padre -de manera especial- ha pedido ¡si tú lo quieres llamar!: “venirlos a salvar”. ¿Salvar de qué? ¡Si tienen todo!, ¡porque se los dio El!, Nuestro Padre. Yo diría que al empezarte a hablar, ¡empiezas a vivir ese Gran Despertar! ¡Retomar esa divinidad que hiciste a un lado para experimentar!

Y ahora -todo lo que has ¡anhelado!- tengas ¡de verdad!, ¡esa certeza de que en ti está! ¡Siempre ha estado! Y nosotros venimos a pedirte ¡que la vuelvas a utilizar! Que eres ¡un Ser Divino!, tal cual como mi Padre a cada uno -en el principio del tiempo- los quiso crear.

Así ha sucedido, cada vez que de esto se les ha venido a hablar; aquellos que se han elegido -al todo esto escuchar- muchas cosas ¡más!, y frecuentemente se empiezan a preguntar: “¿Y de qué manera? ¿Cómo lo puedo hacer, para volverlo a lograr?”

Algunos ya se han dado cuenta, ¡y más en ésta encarnación!, que desde que empezaron a tener consciencia -la humana- también Nuestro Padre ¡señal por señal!, a cada uno les dio. ¡Nada es casual! ¡Todo lo que has vivido es causal!, para que luego -cuando eso lo entiendas- empieces a vivir esa sincronicidad, que en el tiempo del no-tiempo, ¡cuando también aceptes que no existe el lineal!, irás viviendo hoy por hoy, a cada momento, de todo aquello, cuando El te quiso crear.

No hay nada más fuerte que cuando tu cuerpo -el físico- ¡tu templo!, empieza a vivir ese Gran Despertar; el que tuvieras el sentir, para que -en tu interior- comience esa Gran Revolución. ¡Y mira cómo te mueve! ¡Cómo empieza a soltar! ¡Cómo empieza a vibrar!, porque todos esos nudos, ¡esas amarras!, que desde que llegaste a ésta densidad comenzaste a acumular. ¡Y déjame decirte que no solamente de hoy!, de ésta encarnación. ¡Se está haciendo una Gran Limpieza!, desde que tuviste la primera encarnación.

Nuestro Padre ¡está cumpliendo esa promesa que te dio!; que cuando se diera el tiempo en que habrías de volver, ¡lo harías en esa pureza!, ¡en esa cristalización!, y en su infinito amor, a cada uno de ustedes les dio, al estar aquí. ¡Es claro que hemos de resentir!, pero si en ese instante tú te das cuenta que es para que -como un brillante- emane de ti toda esa grandeza -amado hermano- al dejarte llevar ¡en esa indefensión!; sabiendo ¡que viene del Padre!, para que ya vivas tu Evolución, es lo más grande. ¡Eso es lo que tanto esperaste!

Entonces, ¡pídelo consciente! ¡Que sea ese tu Gran Aliciente! ¡Que cada día que pase sea una oportunidad para agradecer todo lo que te da!, y que sigas en tu preparación ¡para unirte a tu Ser! ¡Esa es tu otra mitad! ¡La que tanta falta te ha estado haciendo!, porque cuando ya te estés uniendo: ¡hecho está!, a un paso de vivir la perfección, ¡tal cual como El nos creó!

¡Ésta es la enseñanza! ¡Ese es el Gran Legado! ¡El libro que mi Padre nos entregó a cada uno de nosotros!, que con tal amor, ¡pero que para nadie está vetado! Es solamente que llegado el Gran Momento, en el cual -al todo esto estar escuchando- de un sólo plumazo recuerdes ¡que vienes y has estado y volverás! al “Yo Soy”, Nuestro Padre tan amado.

¿A quienes de ésta forma se les ha hablado? ¡A aquellos que -llegado el momento- ya están preparados! ¡Que ya no quieren enarbolar ningún argumento para estar justificando los errores!, porque ¡saben! que eso atrás está quedando; reconociendo que eso fue lo que estuvo sucediendo; pero que ahora, ¡ahora! -en la preparación- en el infinito amor, para volver hacia Nuestro Padre amado, ¡aquí!, estarán recordando que El prometió que la enseñanza, de ella nuevamente se les estaría hablando, en éste infinito amor.

¿Y que qué es lo que cada uno de ustedes -al recordar- abriría? En otro momento ¡nadie entendería! ¡Pero hoy!, hoy, todo aquél que ha escuchado ¡y que ha atestiguado! cómo algunos hermanos ya eso lo han logrado, ¡pero no crean que ahí todo ha terminado! ¡Al contrario!: ¡recién ha comenzado! y todo empezará, y lo vivirán; ¡lo compartirán!

Pero es el deseo de mi Padre y de su hermana -que de eso les está hablando- que al tener esa Consciencia de Amor; ¡que la Crística sea! la que -en su interior- los lleve a seguir esa preparación, porque aquellos que al haberla entendido, han caminado para vivir la Consciencia Cósmica; ¡no crean que ese es el final de ésta Gran Experiencia Divina! ¡Hay mucho más!

Y aquellos que han abierto algunos de esos dones, estarán entendiendo ¡la Gran Responsabilidad!, porque si a algunos de ustedes les ha llevado ¡tantos eones!, ahora ¡no desperdicien esa Gran Oportunidad de abandonarse a Nuestro Padre!, ¡de por El dejarse llevar!, ¡para que compartan con sus hermanos! y dejen de llamarse: “Hermana Humanidad”.

Todo lo sagrado -para mostrarse- ha empezado. Nuestro Padre tan amado se hace sentir cada vez con más fuerza; pero sólo a aquellos que -como ustedes- y a su enseñanza en éste tiempo han escuchado; son los que vivirán el Gran Logro del Paraíso, aquí -en lo terrenal- ¡tan mencionado!

Y algunos dirán, pensarán: “¡No es verdad! ¡Ya tantas cosas se están viendo!” ¡No se equivoquen! -amados hermanos- porque el Gran Confrontamiento que tendrán con la verdad -y digo así- “¡confrontamiento!”, porque entonces ¡cuenta se darán!, ¡qué diferencia tan grande hay!, en lo que mi Padre te muestra, con lo que algunos ya han estado viviendo en ésta densidad.

Porque en esa Gran Libertad que Nuestro Padre entregó, ¡a eso es lo que se refirió el amado Maestro, en aquél tiempo!, al decir: “¡Y surgirán falsos profetas, que de mi Padre te hablarán!” Mas el día en que la verdad se mostrará ¡con toda su fuerza y con tal claridad!, entonces -mis amados hermanos- ya sin duda alguna, verán la diferencia ¡de la Luz! que Nuestro Padre ha estado emanando; porque ella ¡nunca!, ¡nunca ha fallado!
Nuevamente lo comprobarán.

¡Serán tantas sus señales!, porque -si a cada una de las que vean- explicación le querrán encontrar; “¡científica o humana!”, como la quieran llamar; ¡llegará! ¡y en la Gran Revelación que se hará!, verán mis hermanos que -cuando mi Padre amado se muestra- no hay más. ¡Sólo El! ¡Sólo El! y la verdad, que viene de la Eternidad.

El Gran Legado que ha sido entregado en tiempos -tal cual ¡como aquellos que “Profetas” han llamado!- cuando mencionaron: “En tiempos venideros, ¡todo lo que se estará presentando! ¡Y Nuestro Padre llegará!, ¡y se le estará anunciando! Su voz se elevará”. ¡Y de qué manera! -amados hermanos- mi amadísimo Padre ¡lo hará!

¡Gloria a su Reino!, que es ¡eterno!, y que se sostiene ¡en la verdad!, ¡en el infinito amor! Es lo único. Y eso es -dice mi Padre- lo que para ustedes quiero: ¡Que vivan! ¡Que vuelvan nuevamente a Él! Que recuerden ¡que todo lo tienen! Que -en mi nombre- ¡todo lo pueden!: pero en amor, en libertad y en perdón.

Está a punto de terminar la aparente calma, que en nosotros ha estado. Empezaremos a actuar. Algunos han preguntado: “¿Y qué es lo que se hará? ¿Y por qué no has convocado?” Amados hermanos; siempre estaré repitiendo, que a la instrucción de mi Padre tan amado, es cuando su hermana Enriqueta -paso a paso- irá caminando.

Ahora es su deseo, que cada vez algunas cosas se harán con rapidez, ¡porque necesario será! ¡Y siempre hemos de repetir!: “¡Por lo que llegará!” Y algunos se preguntan: “¿Y a qué se refiere? ¿Por qué no nos ha querido hablar de ello? Amados hermanos, y algunos de ustedes cuenta se han dado: ¡lo hemos hecho ya!, tal cual como Nuestro Padre lo ha indicado; cada vez ¡más y más!, directo, fuerte y claro.

Y te vuelvo a pedir que -al hacerlo- ¡no te ofendas por ello! ¡Haz a un lado ese sentimiento! ¡No es tuyo! ¡Ya deja de cargarlo!, porque el que nos digan en qué hemos fallado, pero -en ese inmenso amor- ¡se te invita a todo eso soltarlo!

¿No recuerdas cuáles fueron tus palabras?, hace tiempo y aún hoy, después de todo lo que has estado viviendo. Algunos de los que están aquí han repetido: “¡Qué diera yo, porque me dijeran cuál ha sido mi error! ¡Por qué -hasta hoy- no he logrado llegar al “Yo Soy”!, a Nuestro Padre tan amado”.

En ésta preparación; la que has vivido ¡y seguirás en ella! -hermano querido- porque eso es lo que mi Padre desea. Y al volver a Él ¡tan ligero!, y a tu hermano unido; mira, entonces esto es lo que sucede: ¡recibes la guía! y también la inspiración, para que llegue ¡más rápidamente ese día!, en que sepas y escuches: “¡No habrá más encarnación! ¡Listo estás! ¡Has finalizado una Evolución!, pero al seguir camino a toda esta perfección, vivirás tal cual, ¡con esa Maestría que has logrado!, al seguir ¡en constante preparación!; en esa Gran Humildad, ¡deseoso de trabajar!, ¡compartiendo!”

Puedo decirte: ¡tal vez no con la Hermana Humanidad! Mi Padre ¡y tú! -al estar frente a Él- lo decidirá. Cada uno elegirá de qué manera y cómo seguir adelante, llevando la enseñanza de Nuestro Padre.

Mas por lo pronto, ésta andanza llega a un punto ¡tan fuerte!; que si aún crees en la suerte, sabrás que todo esto viene del Padre ¡y nada más!, amado hermano. ¡Psh!

Lo que seguirá, tú -al escuchar- lo entenderás. Y si es así, entonces ¡preparado estás! ¡Has cruzado esa puerta! y en otra Dimensión en la cual -al estar totalmente alerta- sentirás ¡que todos los sentidos han resurgido! ¡Todos, hermano querido!, porque los que hasta hoy has conocido, ¡no son nada comparado con todos los que están dentro de ti! ¡Y eso lo voy a vivir contigo!: el Gran Sentido Divino; que no es que esté dividido; pero partes de él aquí has abierto; como el de la intuición, porque vas ¡camino a lo perfecto!

Y todo esto, verás que -tal como te lo he repetido- es cierto. ¡No te he mentido!



Febrero 15, 2017
Maestro Desconocido.

¿Y por qué hablar de sentidos? ¡Muy importante!, porque lo que se ha revertido, algunos dirán: “Precisamente, esto que estoy viviendo; lo que estoy viendo, no tiene sentido”.

¡Al contrario! -amado hermano- sabrás que no es necesario que lleves en tu mano un rosario, ¡porque todo está dentro de ti! y “El Yo Soy” ¡tan vivo!, te guiará -como siempre ha sido- en el camino.

¡Todo!, ¡todo lo que contigo ha compartido cada Elemental! ¡y cada hermano del Reino Animal!, porque algunos de ellos, por el temor que has tenido, ¡mira! cómo -precisamente a través de tus manos- ¡lo que ha sufrido! Ahora es el momento en que recuerden y caminen todos unidos.

Y si algunos -al confundirse- te han dicho que para poder convivir, tienes que ordenarles. ¡No es así! ¡Es en infinito amor!, en esa unión, porque así como siempre has pensado, que ese hermano aún viéndolo, a ese objeto inanimado, de ti ha necesitado. Cuenta te darás ¡que es reciproco!, que también ¡tú! -de él- necesitó. Velo así.

Date cuenta que -al elevarte- no quieras sentirte ¡que ya nada va a tocarte! ¡Al contrario! Déjame decirte que ahora es cuando ¡más!, ¡unidos estarán caminando! Permítete ver, ¡deja que despierte!, de ti a través -como ya lo dijo la hermana- ese sentido ¡que es único! y que en algunos momentos lo has vivido, ¡sin saber!, ¡sin entender que está contigo!

Así ha sido y nuevamente lo van a ver, ¡sintiéndolo desde lo más profundo!, cuando logren el completo equilibrio. Y algunos dirán: “¿Cuándo será? ¡Qué difícil es!, ¡porque ni aún esto que me han dicho he entendido!” ¡No te preocupes!, hermano, hermana, que así sucederá; que irás entendiendo todo esto. ¡Es por eso que has venido a escuchar! Y el que no lo haga; el que respuesta no encuentre, ¡y eco no siente a todo esto!, ¡no te preocupes! Al menos ya era el tiempo de que lo empezaras a escuchar, ¡porque ahí grabado está!

¿Quién de ustedes se ha jactado?, de que el Akasha, lo que ha escuchado: “¡Qué bueno sería vivirlo!, ¡para contarlo!” Pues hermano, ¡el Gran Libro Sagrado!, de esto y de muchas cosas ¡ya!, a hablarte ha empezado. ¿Y tú, estás entendiendo?

Aquellos que al escucharlo se están sorprendiendo: “¿Pero cómo? ¡Eso está separado! ¡Ahí es donde está todo el recuerdo y las vivencias!”, de aquello que -si no han despertado- no entenderían de lo que les hemos hablado. ¡Pues yo te digo, amado hermano! Es por eso que con toda la simpleza que se le pidió a la hermana que les hablará. ¡Pero ya todo ello está acabando! ¡Es importante y es necesario! hablarles de esto, para que lo estén recordando.

Entonces ¿qué caso tendría de toda la preparación que para cada uno de ustedes antecedería? Y aún así; hay un gran choque de Energía, porque algunos pensarán: “Para de esto hablar, aún no es el día; porque algunos no entenderán”.

¡Pero quién es el que los guía! ¡Todos los que aquí hemos venido, para a ustedes compartir!, ¡venimos en el nombre de “El Yo Soy”!, ¡y El es el que todo lo entrega!, ¡y en esa comprensión!, ¡para que vivas tu Evolución!

Es  el Gran Momento, y aquél que ya despertó ¡lo estará viviendo! ¡No te preocupes si ahora estás pensando!: “¡No estoy entendiendo!” ¡Todo esto de lo que te estamos hablando es por lo que estará aconteciendo!

¿Y qué es lo que puede preocupar a un hermano, que escuchando todo esto está? Que así como en éste instante, su hermano viene a hablarte, también estoy en otro lugar; ¡en otra parte!, con otro grupo elegido, del infinito amor; así lo ha querido ¡y se unirán. ¡No hay distancia!, hermano querido. También eso, eso es lo que compartirán. ¡Ahh! Grandes momentos que vivirán.

Y se está preparando en el Cosmos Sagrado, que todo lo que ha llegado, les hemos dicho que lo que está emanando, pero también lo que hasta ti -en tu interior- ¡lo que moviendo está!, en el nombre de “El Creador”; porque ésta Gran Vibración, ¡la Gran Energía!, que no sólo el Gran Sol lo que envía, sino ¡más allá!; ¡esa Dimensión del Amor!, que se habrá de mostrar; porque a aquél que se preparó ¡le va a entregar!

Ustedes han escuchado -no sólo la hermana ha repetido- que el Chakra Sagrado, y se han preguntado: “¿En qué lugar? ¿Dónde en mi cuerpo está?” El momento para que lo sepas, ¡y no sólo ello!, ¡que realmente lo sientas! cercano, ¡muy cercano ya está!

¿Acaso ya has entendido y has sentido lo que el Prana Divino ha hecho contigo? ¿Recuerdas que la hermana incesantemente te repitió?, que también tendrían que recordar el ¿cómo -en su caminar- vivirían la verdadera respiración? ¡Porque ni siquiera eso estaban viviendo!, amados hermanos.

Y se siguen preguntando: “¿Para qué de eso nos está hablando? ¡No sólo aquí! Recuerden que “Casa de Oyamel”, ¡el lugar que El eligió!, y el que está en preparación: ¡“Casa de Oyamel” también!, ¡se les estará mostrando!, cuando en lo sagrado estén caminando, de qué manera y cómo -amados hermanos- porque a pesar de seguir aquí, ¡ya nada los estará contaminando!

Así es. Es la continuación de la enseñanza de “El Yo Soy”. ¡Y lo digo para aquellos que han pensado!, ¡sí!, ¡porque lo han hecho! ¿Para qué ahondar y decir quién? ¡Lo saben hermanos!: “¿Esto es? ¿A esto le llaman la enseñanza de “El Yo Soy”?”

¡No tienen idea de lo que es la verdadera preparación!, lo que hasta hoy de nosotros han escuchado. ¡Y mira que te repito -amado hermano- que de tiempo en tiempo es cuando tu hermano viene a estarte hablando!, y cuando tú permites, ¡te permites! estar escuchando, y a nosotros -en ese infinito amor- como en éste instante, ¡para que sigas en tu preparación!

¡Y así se hará! ¡Ya lo verás! Todo se está preparando ¡y se empezará a actuar! Ya el momento ha empezado. ¡Todo a su tiempo!, aunque algunos de ustedes ya están desesperados, pensando: “Todo se ha detenido. Nada ha sucedido”.

Hermanos tan amados; ¡si a ustedes!, ¿cuánto tiempo les ha llevado el seguir y venir a estar reencarnando? Hoy es el tiempo, en ésta reencarnación, para que estén abriendo y vivan ¡todo lo sagrado! A aquellos que verdaderamente se están eligiendo.

Y toda esa sensación de lentitud, especie, están confundiendo con la pereza; algunos dicen que en sus movimientos se robotizó. ¡Todo tiene un porqué! ¡Pero ya no esgriman ningún argumento!: ¡lo van a saber! Todo lo que su cuerpo está viviendo, ¡en gran shock!, ¡por lo que está uniendo y lo que está desechando!, ¡porque ya no les está sirviendo! Pero es para elevarse; es -amados hermanos- ¡para reencontrarse!

Y así, finalizando con esa especie de fanfarrias (la música de fondo), que cada uno de ustedes -al hacerlo- ¡ya verán!, ¡ya verán cómo se mostrará la Nueva Raza que resurgirá! Pero antes de ello -tal cual como la hermana lo dijo- ¡la limpieza se hará! ¡Se está haciendo! ¡Ay de aquél que no lo entenderá!

En los cuatro puntos cardinales, y la circunferencia que se creó, para que se hiciera y sintieran la Presencia; porque el tetraedro su función ya finalizó. ¡Ahora!, ahora, ¡todos por entero!, vivirán lo que han tenido a bien llamar “¡la resurrección!” ¡Pero aquellos que no lo entiendan!; ¡aquellos que aún así hagan resistencia!, entonces, no experimentarán la transfiguración.

Entonces -amados hermanos- ¡y miren que lo he vivido! ¡Paso a paso he llevado conmigo -de tiempo en tiempo- éste camino! y ahora ¡no solamente uno lo vivirá! ¡Por eso es tan importante que todo esto no solamente lo vengan a escuchar!, sino que lo empiecen a sentir ¡y a vivir! en Gran Hermandad.

Por eso -para “El, que todo lo ha creado”- es tan importante el resurgimiento de ese lugar; ¡de ese Gran Portal! ¡Y vaya que de ello se va a hablar! ¡Fuertemente se hará!, hermanos. ¡Y todo a su tiempo!

Aquellos que ya están dispuestos, ¡sí!, todo eso que están sintiendo; el deseo de compartir; si lo quieren llamar “ayudar”, pero para que empiecen a vivir y a caminar en esa unidad, por todo lo que “El Yo Soy” les va a pedir. No en vano “la Gran Avanzada” se les ha querido llamar, ¡y pronto verán el por qué y para qué!

¡En acción se les pedirá que lo empiecen a mostrar! ¿Quién de ustedes lo hará? Y en ese amor, en ese infinito amor que El ha entregado, ahora ustedes lo compartirán con su hermano; ¡sin egoísmos!; ¡sin condicionamientos!; ¡sin cuestionamientos!; porque si tú al “El que todo, todo lo ha hecho”, te va a pedir, ¡ten por seguro que la respuesta verás, del porqué y para qué! y adonde tengas que ir. Y para ello también, precisamente la hermana aquí está; y nosotros que a través -como en éste instante- te queremos de ello hablar.

Ya se está moviendo dentro del Círculo Sagrado, de quiénes de ustedes; lo que estará sucediendo. Y algunos dicen: “¿En cuál de los dos lugares?” ¡Que te quede muy claro, amado hermano!: ¡los dos son uno sólo! Mas verás en dónde todo va a empezar, y en dónde -a quienes llaman “sus Maestros”- también ¡muy fuertemente!, ¡clara y directamente se van a mostrar! Y no sólo ellos, pero siempre en el nombre de “El Yo Soy”.

Así, como has escuchado hablar del “resurgimiento de pirámides”, ¡que yo llamaría “templos”!, muchos de ellos, ¡eso es lo que pasará! Y aquellos cristales de Gran Energía, nuevamente emanarán, para que en ésta guía, la Hermana Humanidad vuelva a vivir -en el infinito amor- ¡su libertad! Y se unirán el Gran Fractal; el Cosmos Divino ¡y el plano terrenal!

¡Y ahí es donde plenamente entenderás!, que como arriba, aquí abajo, ¡todo es igual! ¡Y tan importante!, como en tu interior y en el exterior; todo unido se mostrará y caminará. ¡En acción lo verás! ¡Será grandioso!, ¡tan hermoso! Sólo les pedimos que caminen en ese amor que les ha entregado y en Gran Unidad, ¡mano con mano! ¡Y de ello les vamos a hablar!

Prepárense, porque en ésta venida de la Gran Energía, en el cambio de estación el Llamado se hará, y entonces, se indicará plenamente quién y dónde; ¡qué es lo que hará!, amados hermanos.

Y sigan adelante. En esa preparación ¡sean constantes!, que les haremos llegar, ¡claro que vamos a acercarles!, cómo y de qué manera. ¡Vaya que lo harán! La hermana ¡ha recibido y recibirá!, la forma, el porqué y el para qué, de cada uno de ustedes.

¡Todo esto se va a transformar!, amados hermanos; ¡que con ustedes estamos! Que los que ya se están mostrando, ustedes ¡no se estén preocupando!; porque con ustedes estaremos ¡todos nosotros! ¡Estamos!

Y luego de todo esto, tengan por seguro que no solamente les estaremos hablando. ¿Qué acaso algunos de los que “Maestros” han llamado, no se han mostrado? ¿Qué acaso sus hermanos también no lo han hecho?

Y he de decirles que lo que la hermana ¡tanto les repitió!: que ese Gran Círculo, que al iniciar éste año se mostraría, haría ¡una Gran Revelación! Pues ¡es un hecho! Y se les dijo que no solamente lo escucharían; lo entenderían y lo verían.

Hermanos: ¡por voluntad de “El Yo Soy”! y en el infinito amor que tenemos para ustedes, ¡aquí estamos!, ¡para guiarlos!, ¡para llevarlos! ¿Qué pueden temer? Lo único que necesitamos es que sigan adelante en esa certeza; en esa Gran Fortaleza; ¡sin ningún temor!, porque paso a paso les diremos -al estar todo sucediendo- qué hacer y dónde, en el nombre de “El Yo Soy”.

¡Y tal como esa promesa que les dio!: ¡nada podrá tocarles un sólo cabello! Voluntad de Él es que la Gran Avanzada siga adelante, y la Tierra Prometida sea mostrada por los Grandes Atlantes.

Hermanos; que con ustedes estamos, y comparto ésta Gran Energía de Amor. Reciban, sientan, ¡que las envuelva!; que les acompañe; no sólo a ustedes, sino a todos, ¡a todo Ser vivo! que en ésta Estrella está.

En el nombre de “El Yo Soy” lo digo. Y hecho está.



Febrero 15, 2017
Sananda.

Y tal cual, al encontrar aquellos Manuscritos en los que escrito está, que en éste tiempo bendito, estaría nuevamente, mi Padre Omnipresente.

Y mira -amado hermano- me estarás viendo, así como todo -para ti- al estar recibiendo; desde tu interior el Gran Corazón de Corazones estará uniendo a todos mis hermanos.

¡Ya no habrá razones!, sólo el sentir, en el verdadero vivir.

El Ser Crístico -al venir y estar contigo- el Dios Vivo te comparto.

Que estoy contigo, acompañando a mi hermano, a mi amado Maestro; que al preparar éste templo, ahora a ti te viene a hablar de éste Gran Portento, de Amor y Unidad.

¿Qué más puede desear mi Hermana Humanidad? Tal como te dije; que no sólo ello, sino ¡mucho más!

Date cuenta que en ti también está -de mi Padre tan amado- ¡toda su divinidad!

Ahora, ahora, ¡esto que te estoy entregando! Recibe, ¡amado hermano!

Es la clave y la llave, y en respuesta que quedará manifiesta en estos días, en el que recibirás -de mi Padre- ¡toda su verdad!

Y aquí estoy, entregándote mi corazón.

Que sea El, ¡mi Padre tan amado!, quien te haga sentir.

Estoy aquí y caminaré a tu lado en éste Nuevo Vivir, ¡amado hermano!

Y tal como te dije: recibe ¡mi infinito amor!, en el nombre de “El Yo Soy”.

¡Sananda con amor!



Febrero 15, 2017
Saint Germain.

¡Y tal como lo había dicho mi hermana!; mi amado hermano, que en éste instante con ustedes se ha presentado; ¡Nuestro amado Maestro!: ¿Qué más podrían esperar? ¿Qué más ustedes al necesitar?, si “El Yo Soy”, ¡que todo lo ha querido crear! es Su Voluntad, que nosotros estemos aquí ¡y de todo ello le vengamos a hablar! a cada uno de ustedes.

¡Es tan grande! Y déjenme decirles; que en la preparación, porque nosotros lo estamos haciendo; aquí ¡y en aquél lugar! de infinito amor.

Ya se mostrará -amados hermanos- ¡que no he mentido cuando he dicho: “El Foco Tonal”! Y aquél, ¡aquélla! que no lo ha creído, sus ojos terrenales lo verán, y su corazón lo sentirá. La respuesta les dará directa y total; porque sus latidos al acelerar, ¡al recibir toda esa andanada de Energía!, Padre tan amado: ¡el Arcoíris Sagrado! ¿Qué más puedo decir?

Y miren; si mi hermana aún nada les ha dicho, ¡de esto no ha hablado!, ¡no se preocupen!: instrucciones al estar recibiendo. Ya verán entonces cuando ¡les esté pidiendo! Y nosotros esperamos que ustedes acudan presurosos y con gran alegría a cumplir lo que se les pedirá. ¡Muy cercano está el día!, porque ya todo empezó.

A quien se le pidió, en infinito amor acudió, ¡y también se ha hecho otro pedido! No hay que olvidar que Nuestro Padre ha indicado el lugar, ¡y los dos estarán unidos! ¡Ahh! ¡Qué conexión tan grande!, ¡tan maravillosa!, ¡en infinito amor! Y aquellos que se eligieron; los que con nosotros caminarán, verán. ¡Claro que se les iba a necesitar!, aunque primero en preparación tenían que estar, ¡amados!

Para Nuestro Padre y para nosotros, miren: ¡no hay equivocación!, ¡y todo se da y se camina en infinito amor! Y algunas cosas que se han intentado -mi hermana lo sabe y lo tiene muy claro- ¡ni aquí!, ¡ni en aquél lugar!, se va a permitir que estén, ¡ni siquiera aunque lo pretendan!; que lo quieran intentar: ¡nadie que no llegue con ese infinito amor en el corazón!, ¡y en el nombre del Padre!; porque ¡ya lo dijo la hermana!: para que todo eso se dé, nada es casual; ¡todo es causal!

¡Es el gran momento! Es por eso que los estamos ¡uniendo! Es por eso que se están ¡reuniendo!, amados, ¡amadísimos hermanos!

La hermana espera una señal para poder actuar. ¡Es todo lo que les puedo decir!, para aquellos amados hermanos, que desesperados están para ayudar. En cuanto ésta suceda, ¡que será más pronto de lo que ustedes piensan!, entonces, entonces los necesitaremos. ¡Y ya veremos!, ¡amados!

¡Y yo les agradezco que estén dispuestos!, ¡amorosos!, ¡y que acudan presurosos!, ¡benditos hermanos!, porque todo esto, ¡lo que está iniciando!, es en el nombre del Padre tan amado. Y verán ¡todos los que estarán llegando!, de acuerdo tanto de lo que están necesitando; ¡porque es el tiempo! El tiempo en el cual Su Verdad, su amor, se estará mostrando. ¡Amados! ¡Amadísimos hermanos!

Y no se preocupen por todo lo que está empezando. Ya esos días de Gran Sacudimiento ¡ya están terminando! ¡Abracen su templo con infinito amor! y dense ese tiempo de la Gran Reflexión, para que sus actos no sean tan… que no voy a decir “imprevistos”, sino ¡desesperados!

¡Esperen! ¡Esperen, amados hermanos!, que el gran reacomodamiento de todo, no solamente en su interior, ¡sino también en el exterior!, por todo lo que se está moviendo; pero es para que ustedes ¡qué digo “estén mejor”!; empiecen a vivir esa perfección que Nuestro Padre a cada uno le dio.

Y en un instante la hermana les dirá ¡lo que de Nuestro Padre está recibiendo!; que es la instrucción. ¡Ya lo verán! ¡Ahh, mi amada hermana! ¡Ya verán! Ustedes compartirán y con todos nosotros, ¡todo lo que se hará!, y cómo -para cada uno- ¡lo que se mostrará! ¡Oh, amada Humanidad!

Así como les dije: “¡Los necesito!” ¡Pero también les vamos a mostrar!, que la unión del Cosmos Divino con el plano terrenal, ¡a través del Puente Sagrado que se abrirá! Todo aquél que camine a nuestro lado, ese Paraíso que Nuestro Padre ¡para ustedes hizo!, lo estarán viviendo.

Y aquí -en ésta ilusión- ¡lo que se estará construyendo!, ¡resurgiendo con toda la Energía Sagrada! del Padre. ¡Oh, mi tierra tan amada! ¡Mi América! ¡Sé que aquí!, ¡Padre tan amado!, ¡en donde todo volverá a resurgir!

Que yo soy ¡tu hermano!: ¡Saint Germain! y te envuelvo ¡con la Llama Violeta!, ¡que todo está transmutando! Y la Gran Amatista, que en el Templo de Amor y el Foco Tonal, ¡hará una Gran Proyección! ¡Emanación total!, ¡para la transmutación! de la Hermana Humanidad.

Que yo soy tu hermano: ¡Saint Germain!



Febrero 15, 2017
Aleshia/Enriqueta (2).

Lo que en ese tiempo -al mostrarse- estuvieron viendo: la Gran Cruz de Malta, lo que en unidad los cuatro puntos, ¡toda la carga vibracional! Y desde el centro mismo, lo que entregaba a mi Hermana Humanidad. Lo que tanto se daba era la Luz que el Padre tan amado -a través de ello- enviaba.

Ahora, esa Piedra Sagrada nuevamente será reencontrada, y mostrada; porque entonces -en ella- ¡la llave nuevamente será utilizada!; ¡para que hable!, ¡te entregue! y una a la Avanzada.

Algunos lo llamarán: “Reliquia Antigua y Sagrada”, pero lo que viene de mi Padre en realidad, tal cual como Su Verdad, siempre ha estado y estará. Destruida ¡nunca será! ¡Resguardada sí!, para cada tiempo en el cual ¡sea necesario volverla a utilizar! Y eso es lo que hoy -en éste tiempo- ¡sucederá!

¡Oh Padre mío! De acuerdo a tu instrucción, ¡no importa cuál sea la reacción!; el corazón de corazones a tu doncella, ¡a tu hija!, mostrará y dirá. ¡Esa será la señal! para recomenzar, ¡y resurgirá! el Lugar Sagrado, ¡tal cual como es Tu Voluntad!

¡Bendito eternamente!, ¡Padre tan amado!, porque al dejarse llevar por ti, ¡no es la suerte!, sino el Plan Divino el que se va a cumplir, en cada uno de mis hermanos, que estarán ahí.

¡Bendito y alabado eternamente!, ¡Padre mío, tan amado!

Y así será. ¡Hecho está!, tal cual como sea Tu Voluntad.

Para ello, ¡para cumplirlo!, tu hija, tu doncella ¡aquí está!: Aleshia, ¡Aleshia de Shirón!, para que mi Hermana Humanidad ¡viva su Evolución!



Febrero 15, 2017
Aleshia/Enriqueta (3).

Todo aquel que siga la instrucción y escuche  con verdadera paciencia y con el corazón, vivirá en la verdad de Nuestro Padre, todo lo que ha escuchado ¡y más!

Amados hermanos a cada uno de ustedes  tal cual, todo lo que han estado esperando y aún ¡lo que no se han estado imaginando!

¡Ya todo mi Padre lo tiene preparado!, sólo se les pide que la paciencia y el infinito amor; y la preparación que la sigan ¡con tanta devoción!, que por sorpresa les tomará cuando dé mi Padre la señal.

Benditos sean y gracias por estar aquí; escuchar.