Canalización del 13 de Junio de 2018.

Junio 13, 2018

Enriqueta/Alexa (1).

… mas El nos dice: “Hubo días en que cuánto han dicho, cuánto han repetido, que habría oscuridad. La oscuridad es la que en el interior de cada uno ¡estuvo! y en el que -en algunos- aún quiere habitar”.

Esa es la que estará presente, pero al desgarrar los ojos terrenales, para que los ojos del Ser en todo aquél que preparado ya está para vivir la continuidad y saber que eso no existe en lo terrenal. Eso es lo que estarán viviendo. Eso es lo que cada uno de ustedes -al estar renaciendo- estarán reencontrando.

Tantos y tantos que han dicho que es el final lo que se estará presentando, y Nuestro Padre dice: “¡Sí! El final. El final de la oscuridad. El final de la limitación. El final ¡de todo aquello! que algunos convirtieron en ¡tal aberración!; porque lo que Yo entregué es ¡la Luz!, inmaculada. ¡Esa! que está y que trae el Ser de cada uno de ustedes y que entregué de manera individual”.

Ya -conforme todo lo que se esté presentando- no habrá nada más de especular. Aquél que todavía lo intente y quiera de ello hablar, el Padre lo ha dicho claramente: “Entonces decide que marche hacia adelante. ¡No vuelvas la vista atrás!, porque hoy que es la Gran Oportunidad, todos aquellos que lo han sentido y que han permanecido, les voy a mostrar, porque son mis hijos y a todos los amo. Pero si han decidido -en esa libertad que he entregado- no seguir adelante y esperar por otra oportunidad, ¡sea pues! También Yo les pido que -como Yo- ¡eso! tengan que respetar. Mas para que todos estemos y vivamos y hablemos ¡el mismo lenguaje amoroso! que -en el inicio de “El Todo”- cada uno de ustedes lo vivió; lo sintió y lo compartió”.

Va a llegar el momento en que nuevamente eso es lo que estará sucediendo, y cual será -amados hermanos- ¡porque no será necesario externarlo verbalmente! Aquí es cuando empezará a suceder uno de los dones o habilidades ¡que ya había en cada uno de ustedes!: telepáticamente estarán comunicando; se estarán hablando; porque ¡cuántas cosas más! a los que cada uno de ustedes se vino a acostumbrar. Es innecesario, y esto será cuando logren vencer a ese gran oponente; el adversario que aún insiste en hacerse presente, y que está en cada uno de ustedes, hermanos.

De esto y muchas cosas más me ha indicado y me ha pedido, y me dijo claramente que era el momento en el que tenía que hablar. Así como llega así lo estoy expresando, y esto ¡que ustedes están escuchando!, también cada uno de ustedes -de manera individual- ¡en ese Gran Coloquio Amoroso que tendrán! ¿Que cuándo? ¡Pregúntenselo ustedes mismos!, porque conforme sigan y crucen esos abismos, estarán ¡acelerando! ese proceso en el cual ¡de todo aquello que vivieron! se estarán separando.

¡Esa Gran Historia ha empezado!, ha empezado a emitir ¡cada fulgor!, y logrará y llegará a iluminarse ¡tanto! que -amados hermanos- ¡ya! lo que se estará viviendo no serán unos cuantos. Serán ¡muchos más!, porque aquellos -sus Enviados- que estuvieron llegando, antecediendo para ir abriendo el camino y que vayan entendiendo ¡que no es el destino!, sino seguir adelante amorosamente, a brazos abiertos, paso a paso; lo que viene de Nuestro Padre: ¡el Plan Divino!

Y entender sobretodo que eres un Gran Ser; que eres ¡como Él!, como Nuestro Padre, porque ¡todo! lo has recibido. Eso lo tienes: ¡esa Chispa Divina! La Llama Trina ¡cada vez más!, ¡con toda la fuerza que El te da!, estará iluminando tu cuerpo terrenal. ¡Ese! que no sólo tú lo verás, sino ¡todo aquél que contigo esté! y los que se acercarán.

Amados hermanos; ¡la Gran Avanzada ha empezado! Esa Cruzada tan amorosa que inició. ¡Nuestro Padre! -al hablarnos- así lo indicó: “¡Que quede bien claro! que lo principal -al seguir caminando- ¡tan importante!: ¡que sea en infinito amor!, incondicional. Que lo sientan venir al a ellos llegar, y de esa manera tan sutil, ¡poco a poco!, pero luego se volverá tan febril el deseo de compartir, porque será ¡tanto lo que sientan!, ¡lo que de mí estén recibiendo!, que la necesidad tan sencilla, ¡tan natural!, ¡porque tienen! y son de Naturaleza Divina”.

¡Y eso es lo que harán!, amados hermanos; el deseo infinito de compartir a todo aquél que se acerque y desee estar escuchando, porque la “Ciencia de la Palabra Hablada”, tal cual como Nuestro Padre así a su hermana le fue indicada, llevará ¡una unión!: la vibración ¡tan esperada!, que -en infinito amor -“El Yo Soy” ya entregó.

¡Qué importa lo que la ilusión quiera mostrarte!, si tú sabes que llevarás e irás ¡paso a paso! aferrado a ese estandarte que El -Nuestro Padre- ya te ha venido a entregar; la vestimenta, aquella que tú lucirás, invisible para todo aquel que intentará todo lo que tú estarás viviendo aceptar.

No habrá ¡nada! que tu paso detenga, ni que tu camino quiera desviar; porque ¡eso es lo que mi Padre lo dijo claramente!: “¡He prometido a cada uno de mis hijos que a mí volverán! ¡Y en ese tiempo que estén viviendo!, aquellos que su promesa a mí me hicieron; cuando escuchen de cada uno de ustedes todas éstas palabras, ¡se irá removiendo el Gran Recuerdo!, ¡porque lo estarán sintiendo con cada palabra! ¡En cada entonación! se irá elevando; que si no poco a poco, cada vez ¡más fuertemente! y en Gran Amor”.

Y entonces, primero sentirán; luego -al vivirlo- ¡lo verán!, cómo estarán unidos ¡fuertemente! en ese lazo indisoluble que llaman “Cordón de Plata”, y unidos, el momento tan emotivo ¡en el lugar que El ha pedido!, en el cual ¡todo esto! se verá resurgido.

En el libro de los Tesalonicenses se quiso hablar, ¡pero no lo hicieron de manera fuerte!, porque sabían que todavía algunos ¡querrían dudar! Pero como ya lo dije; en el Apocalipsis -lo que tampoco quisieron compartir- ¡muy claro está quedando!, y aquél que siga caminando en el verdadero vivir, ¡ahí! estará recibiendo y compartiendo de la Gran Enseñanza de “El Yo Soy”, porque todo lo que viene de Él ¡es eterno! y ésta Enseñanza ¡ha vivido!, fue y será, y es.

¡Qué importa dónde tú te encuentres!, amado hermano; siempre, ¡siempre! escucharás. ¡En tus oídos resonará! -de ésta Enseñanza- ¡la verdad!; la que viene de “El Yo Soy”, ¡que es “¡El Uno!! y que no tiene igual.

Desea que te dé; que te entregue un momento, para que después, que al escuchar todo esto, estés sintiendo y en ti ¡se esté removiendo!, ¡de todos los puntos! que estuvieron durmiendo, ya, al activarse en cada cuerpo -amados hermanos- ¡ahh! Pide mi Padre que calle por un instante.

El entramado que al activarse, hasta cada uno de ustedes, al hacer llegar lo necesario para ¡que se vuelvan a conectar! en esa Energía en la cual vivieron ¡aquél día!, que fue eterno y que todo -de Él- ¡lo tuvieron!, y que nuevamente hoy, aquí, el Padre dice: “Cada uno de mis hijos lo siente, ¡que nunca lo perdieron!, que recuerden que es así”.

Que de dónde la entonación; la Madre Gaia -en infinito amor- aquello que no es tan escuchado por los oídos, pero que ¡en cada de sus fluidos! está recibiendo.

Eso que están sintiendo viene de Él; de Nuestro Padre tan amado; de “El Creador de todo lo que es”; de “El Yo Soy”; porque todo esto, para ustedes -hermanos- es necesario. Si algo en lo que mi Padre ha estado insistiendo, es que ¡todo lo que está removiendo! y lo que en cada uno está acelerando, si en estos momentos no se está mostrando, será sorpresivo, y que no olviden que los Guías Amorosos los están acompañando.

¡Ya es el momento! Es tan importante ya no ser tan discretos. Aquél que ha tenido a bien prepararse, y que sigue y está a corazón abierto, que Nuestro Padre, ¡El lo ha dicho!: “Lo único que pido ¡es! que cada uno, ¡en todos!, ¡en ti, hijo mío!, sentir, que no es que pedir; amorosamente y con gran alegría -al acercarte a mí- me digas: “¡Es mi deseo! ¡Ya quiero vivir! ¡Que sea ese día! mi Gran Momentum de Amor para volver a ti”. ¡Nada más necesito escuchar!, porque luego de ello ¡todo en ti! -¡que no va a cambiar!- sino lo verdadero se va a mostrar”.

Hermanos tan amados; en la liturgia amorosa que mi Padre ha dictado, que no es necesario, que habrá momentos en que no se hable en prosa; pero al escuchar el Glosario, ¡todos y cada uno de los momentos que El -para vivirlos en éste tiempo- ya tenia preparado!; se ha abierto el Gran Libro del Saber, de la sabiduría ¡única y total!, en la cual ¡aquél que se quiere entregar caminará día a día! Llegará de una manera ¡tan natural!, porque cuando tú sabes y estás consciente de todo lo que El -aunque esté invisible para los demás- ¡tú lo podrás ver!, que no sólo sentir.

El Gran Pueblo de Israel; aquél que en su momento -al hacer su peregrinar ¡y vivir en el desierto!- ¿de qué se pudo alimentar? De la palabra infinita y amorosa, y esperando ¡y viendo y recibiendo todo lo que el Padre les estuvo entregando! para que siguieran adelante; porque ¡todos ellos! en esa constante y en Gran Amor, querían estar en el lugar que El prometió.

Cuando ¡se vuelva a hacer esa Gran Unión!, que ya está sucediendo, ¡porque eso es lo que el Padre amado está pidiendo!: “¡Aquellos que escuchen y que dejen a un lado todo apego, toda soberbia, todo ego; ¡a ellos!, a mis hijos ¡que sientan! que es el instante, el momento en el cual son ilimitados, porque de mí todo lo tienen; nuevamente lo vivirán y unidos ¡mano con mano! de manera fraternal, ¡que en ninguno de ellos! se vea ni se sienta; que no haya ¡ni un instante en que se intente deslumbrar! y pretenda la duda llegar o el deseo de protagonizar; porque así como los quiero: en Gran Amor y en humildad; sabiendo ¡que todo es suyo!, porque de mí lo han tenido ¡y lo tendrán!; pero entendiendo que es de todos y cada uno; que así es como los necesito, y volverán a caminar”.

A eso es a lo que todos ustedes invito -amados hermanos: ¡todo lo terrenal suelta! Volver a Fuente inagotable de lo que es, porque el Ser está a punto de -en cada uno de ustedes- volver. En algunos ¡ya está!

Y al suceder, entonces -amados hermanos- entonces recordarán todo aquello que desde un inicio la hermana Enriqueta, con Gran Amor y alegría les vino a confiar; que no es solamente ésta vida, sino la que es eterna; la que el Dios ¡que todo lo da!, es su deseo que nuevamente en ustedes -¡ahh!- se vuelva a mostrar.

¡Todo se empezará! ¡Todo regresará! Lo que en un tiempo se vivió, hoy es el momento; ya todo resurgió. Sólo se espera el Instante Sagrado, ¡tal como Nuestro Padre nos irá indicando!, a cada uno de ustedes, porque Cuadrante por Cuadrante, en su camino -al mostrarse- ¡irá repercutiendo en el cuerpo! que al transmutarse ¡en ese Cambio Divino! -amados hermanos- sutil, para elevarse serás, y luego vivir.

Y todo esto que está llegando momento a  momento, al ustedes volver a la rutina, ¡que saben que ya no será!, porque igual en ella ¡no caminarán!

Recuerden que su hermana ¡Alexa! les dijo amorosamente: “Sabrán ¡y de eso llegará el momento en que no sólo les voy a hablar!; que estarán, ¡sabrán lo que es! “estar y no estar” en ésta densidad caminar, pero ¡que no haya nada! -aunque lo intente- que los venga a afectar; que todo sea amorosamente; que eso es lo que el cuerpo y el corazón -al vibrar unidos- cada uno de ustedes así caminarán”.

Y entonces se mostrarán -ante ustedes y para ustedes- todos nuestros hermanos que han estado llegando; ¡aquellos! que están esperando el momento indicado para compartir. Ya se inició. Hace tiempo se les compartió: ¡ya están aquí!, ¡aquellos que vienen en el nombre de “El Yo Soy”! ¡Aquellos! que -como su hermana- que han caminado con ustedes en forma humana. ¡Ahh!

Ya se recibió ¡en ese Gran Momento! que el Padre amado lo señaló: la Gran Instrucción, y la estará viviendo ¡cada uno de ustedes!; aquellos que se estuvieron eligiendo. ¡No se acerca!, ¡ya están paso a paso caminando! en el que será el momento en el cual estarán unidos ¡en un solo abrazo!; ¡ustedes! -los Elegidos- con aquellos que han llegado, para compartir lo que ya es el momento ¡no sólo que escuchen!, porque también lo van a vivir.

Y he aquí que lo único que su hermana les quiere pedir: que amorosamente y con gran humildad -¡tal cual como mi Padre lo quiere indicar!- escuchemos ¡palabra tras palabra!, ¡y tomemos! y vivamos la acción como El lo indique, y lo hagamos en Gran Amor, ¡no intentando cambiar la versión! Porque si no habremos de entenderlo en su momento, ¡pedirle! a Nuestro Padre, porque de Él viene ¡todo lo perfecto!, ¡esa sabiduría! que nos ha dicho ¡que tenemos!, porque ya llego el día, en el cual paso a paso caminaremos en la verdad, en la congruencia, amados hermanos.

Y si ustedes desean hablar de la inteligencia, ¡que sea la divina!, porque es la única que siempre ha estado y no perecerá; para que el camino -al recordar- nos demos cuenta ¡que es tan sencillo en él caminar!, pidiendo siempre su voz escuchar.

Ahí en tu interior -en infinito amor- guarda por un instante silencio ¡y escucha al “Yo Soy”!, a Nuestro Padre tan amado. ¡El siempre contigo ha estado! El eternamente ¡te está hablando!, y hoy por hoy -que ha sido tu deseo a Él estar escuchando- ten por seguro, hermano ¡que te haces llamar “Humano”!, que todo en ti se está y se estará transformando. ¡Hommo Amantis!, el siguiente paso; pero no habrán de detenerte para seguir adelante.

Que no haya ocaso, porque cuanto ¡más sigas!, siempre ¡la Luz! cada vez ¡más fuertemente! te estará iluminando y en Él estarás inmerso, suspendido; si tú quieres ¡levitando!, ¡gravitando en ella!; ¡recargando! toda esa Energía ¡que llegará a ti como centella!, porque ya ¡estás viviendo ese día!, para ésta bendita Estrella ¡y todo aquél que lo habita! No sólo tú como humano, también cada hermano, ¡cada Elemental! que contigo habrá de compartir ¡de igual a igual!

Y mis hermanos; aquellos que “¡Intraterrenos” los has llamado!, ya más continuamente se estarán mostrando, ¡con aquellos! que ya escrito está que -al desear dejar de ser humanos- con ellos van a hablar y escuchar ¡todo lo que viene del Padre amado!

Para ustedes es ¡un Gran Momento!, ¡que no tiene igual!; lo que ustedes estarán viviendo -amados hermanos- porque su Ser -al unirse- el cuerpo llevará.

Todo esto ¡va a cumplirse! Profecía que en todos los tiempos, hoy aquí ¡lo vivirán!

Junio 13, 2018

Ángel Ráh.

Y todo lo que se ha tenido a bien preparar; lo que indicios para algunos ha sido, ahora directamente, ¡claramente! lo van a escuchar. ¡Y no sólo eso!; aquél que ha decidido, porque confieso que hemos escuchado ¡que más de uno!, ¡lo que tanto han elevado!, diciendo: “¡Quiero estar ya plena y total equilibrado!, ¡para recibir de ti!, Padre tan amado, y salir de la dualidad”.

Y al unir, porque no sólo en lo que llaman “Madre Tierra” sucederá; cada vez más se acerca el momento en que ¡todo se revertirá!, y entonces, cuando aquellos que estuvieron tan ¡atentos! y siguieron ¡en gran lealtad!, sobretodo sintiendo en el corazón lo que se les había pedido; ¡porque no es solamente decirlo!

No olviden que lo repetimos incesantemente, que el momento estaría en el cual se les mostraría -como en algún espejo- pensamientos, sentimientos; aunque negarlo insistieran, ahí ustedes mismos lo vieran; ¡que a nadie!, ni a ti mismo van a engañar.

La lectura; aquellos que se hizo antes de que al crearte a ti mismo, aquí pudieras venir. Ahora, ¡tal como lo hermana lo ha repetido!: a ustedes estará llegando el recuerdo ¡tan vivo!, y algunos piden: “¡Quiero ver! ¡Quiero sentir! ¡Quiero saber lo que he hecho!” ¿Crees que preparado estás?, porque no solamente es el invocar, sino entregar completamente ¡y en gran fidelidad!

¡Que ya nada será a la suerte!, porque la Energía que hasta ustedes está llegando día a día, se ha preparada el Gran Momento, ¡y hay un Vigía!, que todo lo está viendo, ¡sin contar! que nosotros, tal cual como nos están escuchando.

Hermanos; el momento tan importante; no sólo les estaremos hablando, y entonces ¡todo aquello que estuvieron refutando! lo estarán callando, porque no habrá justificación. ¡No habrá nada! -y lo saben- a lo cual ustedes le encuentren una explicación.

Lo único que se les pide es que ¡todo!, ahora es el momento y todavía, porque todo esto que les estoy diciendo ¡lo hagan!, ¡lo sientan y lo vivan en amor!

¡Tanto que dijeron!: “¡Ya queremos estar en ese tiempo en el cual todo esto de lo que nos han venido a hablar!, lo que en el Libro de la Verdad escrito está”. En el tiempo de los tiempos, entonces se sabrá quién es quién. Quién realmente -a “El que todo lo puede”- quiere volver.

Y no será solamente escuchar, ¡porque si yo en éste instante a ustedes les voy a preguntar!, ¡la misma respuesta voy a escuchar! Y no se trata de ello; sino que lo muestren con cada uno de ustedes, ¡a ustedes mismos!, y entonces lo que apenas ha sido un destello empezará a iluminar.

¡Eso! -como dice la hermana- que llaman “corazón” ya empezará, ¡créanme!, tendrán ¡cada visión! y respuesta les dará. Entonces aquellos que piensen y digan: “Las pesadillas que tenemos”. ¡No, hermanos! Estarán viendo lo que realmente ¡cada uno de ustedes hicieron!; pero aquél que con Gran Amor ha recibido y escuchó, ¡y reconociendo las fallas!, los inaciertos; porque ¡al estar caminando aquí ya lo han entendido!: ¡no son perfectos!, ¡pero están en ese proceso de soltar!, ¡y de llegar a “Aquél que todo lo puede”! Y es por eso que también su hermano les ha venido a hablar con Gran Amor.

¡Háganlo así!, ¡siéntanlo! ¡Ya no hay justificación! Es el momento en el cual están escuchando y recibiendo la instrucción. ¿Qué más puede pedir aquél que quiere volver al “Yo Soy”? ¡Pero si ni aún así están dispuestos a cumplir!, ¡a cumplir lo que ustedes mismos se están imponiendo!, para volver y purificar todo aquello que ¡El! les entregó en su momento. Recuerden que ¡en esa pureza! ¡El desea que vuelvan!, ¡y todo les está acercando!; ¡todo les está entregando!

¡Créanme!, ¡cada vez más fuertemente! a aquellos que empezaron en éste proceso de liberar, El ya está acercando, ¡está enviando! a quienes les estarán ayudando, ¡a todos ustedes!

¿Por qué creen que les estamos hablando? ¡Es porque en Gran Amor!, es nuestro deseo que también en éste tiempo; ¡que miren que tiene un gran valor!, que lo que está sucediendo ¡ahí!, en esa -como la han llamado- “siguiente lección”, los estaremos a ustedes también no sólo guiando -si es que así lo desean- sino ¡acompañando a cada paso que den!; que sólo sientan en cada palpitar, en cada latir, ¡escuchar la voz de Él!, y nosotros que estamos aquí.

Que nuestro gran cometido ¡es! que sea así; que si se han elegido y en éste Nuevo Vivir desean seguir el camino; pero ese camino que realmente estarán recibiendo ¡todo lo que llegue de la Fuente!; que es inagotable, y así en ustedes será ¡tan notable! -hermanos- que con sólo se presenten en algún lugar, viviendo en la Enseñanza de “El Yo Soy”, que es sin igual, habrá quien se acerque y preguntar: “¿Qué es lo que estás haciendo, hermano?, ¡que yo también quiero vivir ese cambio!”

En la Gran Dispensa que se ha pedido ¡para ustedes hermanos!, porque todo lo que habrá resurgido y lo que está también por abrir, es sólo necesario, porque podrán preguntar: “¿Por qué aún no?” Si esto que están viviendo, hay quienes aún no lo han podido asimilar; aún están confundidos y se preguntan: “¿Será verdad? ¿Por qué esto estoy viendo?, ¿y por qué esto estoy sintiendo? ¿Qué es lo que mi cuerpo está removiendo?” Hasta en esos momentos, se les dijo claramente que se les estaría acompañando y diciendo, para que tu cuerpo físico, ese templo ¡esté más fuerte!

Esto lo estoy repitiendo hermanos, porque ¡al hacer el Cambio! -que ya se está dando- va a llegar un Gran Momento en el cual será sorpresivo y masivo. ¡Ay de aquél que no lo haya entendido! Pero nosotros estaremos aún para decirlo, porque en esa instrucción que se nos ha dado y en Gran Amor, ¡a todos ustedes hermanos!; el siguiente paso es que dejen de ser Humanos ¡como tal!, lo que conlleva que ya así lo sientan y no lo crean. Que ya no hablen de “la Naturaleza Humana”, ¡porque la divina!, ¡al ustedes recibir directamente por el prana! (Nota 1) , ¡entonces!, entonces ¡irán recordando! el porqué y para que aquí han estado reencarnando.

Esto ya es ¡tan necesario!, ¡tan imperativo!, porque si en la Consciencia Crística ya han vivido, todo lo que está llegando del Cosmos Sagrado, es el momento en el cual de esto ¡ya! les estoy ¡y les seguiré hablando!: ¡el Cambio Dimensional que ya lo están viviendo!, pero cada vez ¡más fuerte será!

Habrá momentos que al empalmar, algunos de ustedes algunas cosas verán, y ante ustedes se mostrarán, que no sólo hermanos a los cuales ¡tanto están esperando! También habrá, y eso ¡muy importante! lo que van a escuchar: de la Geometría Sagrada. Y algunos dirán: “Pero ¿y en dónde? De ello ¡nada podré entender!”

¡Créanme hermanos!, que al empezar a caminar en el infinito amor ¡y dejar de contender!, lo que estamos llamando “Naturaleza Divina” ¡es la que ustedes la van a sentir! y la van a ver; ¡lo que empezarán a vivir! Es por eso que ¡tanto escucharon! y ¡tanto se repitió!, que la Era de Acuario sería tan importante.

Algunos dijeron: “Se mostraría el Quinto Sol”. Yo les digo que tal cual como la hermana les ha repetido: todo lo que está llegando ¡no solamente del Sol Central!, ¡sino más allá!, y su nombre lo escucharán.

¡Ello! al anclar en lo que llaman “su cuerpo”, fuertemente cambiará ¡no sólo pensamiento! ¡Un sólo sentimiento los unirá! Entonces entenderán ¡todo esto! que les hemos estado diciendo.

Debemos hacerlo de ésta manera, sencilla y coloquial; pero poco a poco ¡más de ello escucharán!; porque si ustedes -al estar aquí- y quieren hacerlo así, nosotros con Gran Amor, y en lo que a su hermano “El Yo Soy” le pidió, con gran alegría y regocijo lo he hecho, y por ello con ustedes llegó.

¡Que no olviden! que lo que les entregué, para que ustedes ¡en equilibrio caminen!; que lo que viene ¡es! y tan fuerte, para que luego lo que les entregaré, entiendan y sepan que ¡ya nada! lo estarán dejando a la suerte, y que aquella palabra que tanto repiten y que dicen: “Sólo espero la muerte”, entonces vivirán, entenderán, y amorosa y ¡fuertemente abrazarán! lo que es la Energía Sagrada, ¡la Esencia que les fue entregada!, y la vida ¡eterna!, ¡tan anunciada!, resurgirá en cada uno de ustedes.

¡Muy importante! -como dijo la hermana- la “Ciencia de la Palabra Hablada”, porque también al repercutir en cada uno, de una manera tan sutil, ¡todo lo que emana! ¡También estamos entregando!, ¡necesario!, cuando se active -todo aquél que recibe del Código Sagrado- esa Célula Sagrada.

Todo lo que ustedes estarán viendo; lo que estará sucediendo en lo que llaman “su realidad”, así como la hermana les anticipó lo que se iría a activar. ¡Sólo les digo que “El Yo Soy” está contigo! y que nosotros también, y que todo lo que esté sucediendo ustedes en ese instante, al hacer la Conexión tan directa y que sea constante, y en ese Gran Amor unirse y hacer la petición; entonces “El Yo Soy” mostrará todo aquello que se les dijo incansablemente: “A ninguno de mis hijos; ¡aquél que se ha entregado!; ¡aquél que se ha elegido!, ni un cabello le será tocado”.

Y eso ¡lo repito! porque es muy importante. Sobretodo a aquellos Hermanos ¡Atlantes! que aceptaron venir a vivir estos grandes momentos. La Avanzada ya empezó su cruzada.

Hermanos, ¡no importa lo que suceda! ¡No habrá nada que los agreda!, porque “El Yo Soy” ¡y su hermano en infinito amor!, con ustedes está.

Que yo soy: ¡Ángel Ráh! ¡Nombre terrenal!

Está muy cercano el momento en que caminarán en unidad, y entonces todos -al estarse uniendo- escucharán lo que algunos ya saben en realidad: quién en éste instante -con el corazón vibrante y entregado a ustedes- les vino a hablar.

Y dejo mi Energía. ¡Esa! que está ¡tan cercano ese día!, que directamente ¡de mí! -como en éste instante- la recibirán: Cuadrante por Cuadrante; Dimensión tras Dimensión; pero todo unido en el infinito amor de “El Yo Soy”.

Nota 1.- “Prana” es la Energía vital, en sánscrito.

Junio 13, 2018

Oráculo Sagrado.

Que no importa que en algunos momentos seas sacudidos por los Elementos, que están gritando ¡que también ellos! cuando han estado acompañando desde el principio del tiempo; que ahora ¡se harán escuchar!  ¡Pero también en ellos está esa eterna bondad!

Que si tú estás dispuesto a acompañar, a saber que luego en ellos también en el sentir y en el hacer, ¡todo! al recibir la Vibración que va emanando de cada uno de ustedes al seguirlos, estar acompañando, te dicen -amado hermano- que se está acercando el momento en que hagas la prueba; que cuando quieras hablar ¡con cada uno de ellos! estés dispuesto a escuchar, y ¡oh!, ¡sorpresa te llevarás!

Sabrás que lo que llamas en ti “corazón”, ¡también en ellos está vibrante!, ¡una gran motivación!, y es una anhelante de volver a hacer esa fusión, con la cual ¡ya caminaste! y que el Padre pide que nuevamente se haga.

Verás que también aquello a lo que no le has dado utilidad; que piensas que inanimado está y que no hay nada para lo cual pudiera servir, te mostrará que equivocado estás. ¡Cuán equivocado has estado! de tiempo en tiempo, que ni siguiera te has ocupado en preguntarte el “porqué” y “para qué” contigo ha estado.

Ahora, el tiempo es de que cuenta te des que todo tiene un “porqué” y un “para qué” y que todos somos ¡Uno!, y que aquí ya llegó ese Gran Momento que lo vas a vivir.

Ya lo dijo a quien llamas “Maestro”: ¡Saint Germain!, que con infinito amor te vino a hablar, ¡a impartir de la primera lección!, en la cual te hizo recordar quién tú eres; ¡que tu Ser es el que te mueve!; que eres ¡tan ilimitado! Que ya no creas aquello de lo que te habían hablado, al decirte que no podrías hacer; al decirte que ¡sólo aquellos! de manera tan especial lo que te vinieron a mostrar; ¡que eran los únicos! y que no habría nada más.

Y es por eso que también aquél Maestro: ¡Jesús! -así es como lo conociste- y que nuevamente al abrirse todo aquello de lo que ¡tanto te prometió!, él te dijo que volvería; ¡que lo haría! con Gran Amor. Déjame decirte que ya llegó ese día, y entonces que muchas cosas entenderías; ¡sobretodo que eres tan igual!; que “El Yo Soy” cuando nos quiso crear a todos nos dio, a todos nos entregó ¡esa Chispa Divina! que a Él nuevamente, al Padre volvió.  Y lo conoces.

Si todo viene de la Fuente, ¿qué esperas hermano?, para recibir, para abrir, para totalmente vivir en esa verdad que El nos da.

Se habló que ésta Era sería tan grande. ¡Que en nada se compararía! a la primera, en la cual todos entendieron, y lo que vivieron fue -que no a la sombra- sino ¡a la Luz del Padre! Hoy nuevamente en esa virtud, ¡con todo lo que llegue de la Fuente!, será una gran multitud. Lo estarán recibiendo todos a la par.

Aquellos que estén resistiendo, sabiendo, ¡entendiendo! lo que Nuestro Padre al enviarte fue diciendo; hermano, entonces serás tú el que nos estará acompañando, y entonces verás que todo lo que te dijo a quien llamas “Maestro” ¡era verdad! Es el momento del Gran Resurgimiento.

Todo esto, Oráculo Sagrado -de ello- te seguirá hablando.

Junio 13, 2018

Saint Germain.

¡Y amados!, ¡amadísimos hermanos! Ya para ésta reunión finalizar, para que luego no se quejen que es ¡demasiado tiempo!

¡Amados!, nosotros estaríamos ¡eternamente todo esto a ustedes compartiendo!, pero entendemos. Poco a poco ¡en ustedes renacerá! ese deseo de escuchar y compartir y vivir ¡todo esto que es sin igual! Verán como ¡así sucederá! ¡Nosotros lo sabemos!

Y a todos agradezco el estar aquí, que a pesar de lo que llaman “éste tiempo” (lluvia), ¡vienen a escuchar y a compartir! Eso nosotros -de verdad- al verlo lo reconocemos y lo agradecemos, ¡a todos ustedes!, amados hermanos.

Cada vez en ustedes -lo vuelvo a repetir- habrá esa necesidad ¡no sólo de estar aquí!, ¡sino de escuchar, de sentir, de vivir todo esto! Es por ello que les digo: ¡aquí está su hermano Saint Germain!, que con algunos ya he compartido, pero de verdad -si así lo desean- ¡ofrezco mi tiempo! para que ustedes escuchen y vivan lo divino.

¡Lo haré! ahora que las Dimensiones están empezando, cuando los electrones se unieron, al hacer esa fusión con todo aquello que en su interior ya estaba vibrante y pidiendo lo que está llegando.

Hermanos; quiero decirles -en cierta forma- que es una parte de lo que a nosotros al estar ¡en esa constante con Nuestro Padre!, nos empezó a llegar. ¡Imaginen! -por lo pronto- ¡qué tan importante es todo ello!

¡Créanme que empezará! en ustedes a mover ¡en gran sincronía!, para que se fusione, ¡se una su Ser! Verán amados ¡todo lo que sucederá!; ¡lo que ustedes vivirán!

Entonces, ¡con todo esto! que acabo de con ustedes a hablar; toda esa Gran Energía, porque ya ¡día con día están recibiendo! cada molécula, cada ¡partícula! que se está fusionando, ¡abriendo! -amados hermanos- ¡aquello que llaman!, lo que en su interior aún no han encontrado explicación del “porqué” y “para qué” en cada uno de ustedes esté.

Mucho han especulado; ¡pero de lo sagrado! cuando se ha mostrado, entonces, ¡entonces!, ¡tan directa y claramente! verán el “porqué” y “para qué” en cada uno de ustedes está. Ya lo vivirán.

¡Es tan importante que solamente estén dispuestos a integrarse!, ¡a fusionarse! con todo aquello ¡que aún! está por llegar.

A algunos de ustedes ya les tenemos -¡porque no solamente yo!- preparado algo en infinito amor, que Nuestro Padre indicó.

¿Recuerdan que se les dijo que se les estaría llamando de manera individual, porque tal cual se les estaría necesitando para en éste proceso lo que el Padre está pidiendo iniciar? Pues siéntanlo así. ¡Recuérdenlo siempre! ¡Ténganlo presente!, porque todo lo que de Él viene ¡es en amor!

Y nosotros, al estar aquí y hacer ¡esa unión! y lo digo ¡con gran regocijo!, porque el lugar que El señaló y que -si ustedes quieren llamar- “lo bendijo”, ¡ahí la Cruz de Malta mostrará! lo que El -“El Yo Soy”- estará entregando con Gran Amor ¡a todos ustedes hermanos!, ¡para disipar de una buena vez ésta ilusión! y que empiecen a vivir ¡todo lo sagrado! ¡Ese es su deseo! y ¡eso es! lo que se estará mostrando.

Estamos ya -que no en el camino- sino a punto de finalizar, para iniciar todo lo que “El Yo Soy” a ustedes ¡aquí!, en éste punto cardinal, con Gran Amor les va a mostrar. Y no tienen idea, porque así será de lo que vivirán; de lo que compartirán. ¡E iremos acercando a aquellos que al empezar y estarse preparando, en ese deseo infinito de seguir adelante!

Entonces, ¡entonces! será cuando escuchen de su hermano ¡Saint Germain!: “Hermano, ¡te invito! ¡Vamos! a ese lugar, donde ¡todo de mi Padre lo vivirán! donde la Parte Sagrada recibirán”. Porque así será, ¡amados!, ¡amadísimos hermanos! ¡Sabemos que dispuestos están!

Y de lo terrenal que implica preparar, ¡eso ya nosotros lo estamos viendo! ¡Estamos moviendo a los que se van necesitando!, para que ¡todo! en su momento, tal cual como “El Yo Soy” al estarlo instruyendo, a ustedes les esté mostrando. La Dimensión se mostrará con infinito amor.

Verán lo que implica. Sentirán y sabrán de lo que se les habló, porque cuando “El Yo Soy” indica, es importante que en amor y en humildad cada uno de ustedes ¡cumpla su parte!; porque luego unidos se logrará ¡y vivirán la Gran Ascensión de ésta bendita Estrella! Sólo en unión estaremos caminando.

Saint Germain ante ustedes y para ustedes se estará mostrando. Y más pronto de lo que imagina ¡aquél que lo está dudando!

¡Amados! Que yo soy ¡Saint Germain! ¡Con gran alegría!, porque en estos días algo inigualable vivirán.

Y entrego para ustedes ¡la Llama Violeta! ¡Esa!, que la verán en su color ¡y tan perfecta! como la Amatista. ¡Amados hermanos!, lugares señalados por el Padre ¡tan amado!

¡Y envuelvo a ésta bendita Estrella!, ¡y a todos ustedes!, en Gran Amor, perdón y la libertad que mi amada hermana ¡les ha venido a entregar!

Que yo soy ¡Saint Germain!

Junio 13, 2018

Enriqueta/Alexa (2).

Mi Padre -es lo que yo quiero- conseguirá todo lo que implica en cada cambio de estación; cuando ustedes ¡sienten y saben! la Vibración; cuando El tiene a bien señalar que se haga una reunión, para recibir ¡todo! de que en esa Vibración cada uno recibirá.

Hay momentos en los cuales ¡El nos estará diciendo! -¡porque todos son importantes!- pero también ¡tal cual lo pidió! que quisieras prepararte ¡y hacer la Conexión! Ahora -en estos días- te pide que lo hagas; que tan continuo como lo has sentido, pero en especial ¡ese día! que en Gran Coloquio Amoroso El contigo estará.

Que cuando El hace sentir que se haga de manera grupal, es porque necesario es que se una toda la Energía que se elevará; pero también cuando pide -como en éste momento- que lo hagas de manera individual, también lo estarás sintiendo, porque ¡precisamente en ese instante! tiene para ti algo especial.

Que esto te pide -porque tu hermana lo indicará- hacer algo de manera especial. Que eso lo estaremos entendiendo, porque si encarnada aquí está, ha de llevarme adonde El necesite; momento y lugar, amados hermanos.

Pero también que no olviden que estarán escuchando ¡todo lo que viene de Él!, porque cada vez más ¡directa y claramente la instrucción! Así como de manera particular me lo ha dicho incesantemente, ¡también a ustedes!, a ustedes de ello se les hablará: que nos ama infinitamente; que eso ¡eternamente será! y que con gran gozo estará llegando de la Fuente ¡a todos ustedes! lo que recibirán. Que sí, ¡sientan así! en ese Gran Momento; ¡porque lo van a sentir!, ¡realmente lo van a vivir!

Que luego sabrán el porqué de todo esto. Que cuando se les dijo que estaríamos compartiendo el Gran Advenimiento, ¡de manera inconsciente está sucediendo!, pero luego conscientemente ¡y muy fuertemente!, porque será así, todos unidos lo vamos a vivir.

La tarea es volver a vivir lo que fue; en cada paso que cada uno de ustedes dé será así; pero como hoy, éste momento, a partir del día en que lo que llaman “estación” lo que estarán recibiendo, y luego -en infinito amor- se les estará diciendo de qué manera y cómo seguir adelante, porque entonces la Dimensión seguirá, porque así lo sentirán: se empezará a acelerar su cuerpo terrenal.

Por eso el Padre pide, ¡y dice! que en días más, ya estaremos escuchando y El va a indicar en el lugar, todo aquello de lo que les hemos estado hablando.

Que solamente está sucediendo lo que cada uno ¡de aquellos!, ¡más hermanos que se estarán uniendo! Pueden no ser momentos; se van a unir no solamente ustedes, los que siempre han estado, ¡y ya! los que se unirán van a empezar a llegar.

Hermanos: ¡muchas gracias! ¡Gracias por escuchar! ¡Gracias por regalar sus momentos! Créanme que ¡también mucho de la Energía Amorosa de mi Padre están recibiendo! Eso está ayudando para que sigamos adelante y estemos soltando aquello que no sirve; que ya no es necesario, porque lo que está llegando cada vez ¡más y más! nos estará impulsando éste cuerpo, cada vez más ligero y más sutil, y sobretodo ¡más amoroso!, ¡tan amoroso! ¡Ya lo verán!

No puedo decir más; pero ¡gracias por acompañar!, ¡gracias por estar!, ¡gracias por sentir todo lo que se ha entregado aquí!

Prepárense con amor, que con ese Gran Amor -hermanos- de la mano de nuestros Maestros y nuestros Guías, y acercándonos cada vez más a Nuestro Padre.

¡Gracias a ustedes!