Canalización del 12 de Agosto de 2015

Agosto 12, 2015

Aleshia (1).

… Nuevamente aquí con ustedes será y tal cual como con ustedes he compartido, sin que medie ningún aparente motivo, para ustedes -amados hermanos- porque lo que Nuestro Padre ya tiene tan amorosamente preparado, en ustedes, ¡en ustedes!, en cada uno será revelado.

Así es tal cual, la misión que su hermana ¡Aleshia!, aquí, no tan sólo les viene a mostrar, sino -tu hermana que te habla- compartirte como hasta ahora; lo que ha hecho. Pero mucho de ello, a los que ya ha movido; a los que ya han abierto y a los que lo harán. Y aún así, que algunos de ustedes ¡a punto ya están! Y esto lo hago con gran alegría.

¿Que cuando será ese día? Sólo te digo -amado hermano- que así como ha venido sucediendo, porque de Nuestro Padre ha sido su voluntad, en su infinito amor, tu hermana ¡presente estará!, de cada uno de ustedes -así como ha venido sucediendo- porque en ese instante -en el nombre de mi Padre- lo que tengo y deseo entregarte es tan grande, ¡tan grande! como lo que habita en mi: ¡Esa esencia que viene de El!, de Nuestro Padre y que en su sola presencia, ¡todo!, todo lo que hasta hoy te he hablado ¡y todo lo que estaré mostrando!, tal como lo ha dicho; es el Legado en el cual -amado hermano- tú estarás caminando; en esa verdad tan grande, profunda.

Por eso Nuestro Padre te insiste: ¡Preparado tienes que estar! ¡Motivado! ¡Purificado! ¡Abierto todo tu corazón! Y ya -en esa gran intención- ¡haber soltado aquello que te mantenía encadenado! Y tú sabes -amado hermano- qué es lo que no te había permitido ¡y que aún pretende en ti seguir presente! Mas no te olvides que estamos, ¡que estoy aquí!

Ahora mi hermano; yo te digo que Nuestro Padre ¡y recuérdalo bien!, me ha permitido ¡y lo haré con infinito amor!, hablarte directamente, para que en la enseñanza del “Yo Soy” sepas y así como eres ¡tan valiente!, ¡qué es lo que todavía no quiere permitir tu regreso a la Fuente!, dentro de infinito amor y del perdón y la libertad. ¡Y así es como mi Padre desea que sigas tu caminar!, amado hermano.

¡Sé que lo estarás soltando! y tal cual -como se te ha dicho- en el instante mismo en que se te pida acudir y estar presente. ¡Estar ahí!, Nuestro Padre sabe el “por qué” y “para qué” de ese momento, en el que tú estará frente a El. Porque así será. En todos y cada uno de ustedes ¡ya se hará! Mas no te preguntes: “¿Cuándo?” Mejor quédate y recuerda todo esto de lo que se te ha hablado, que tu momento ¡claro que estará llegando! Lo vivirás ¡intensamente! ¡Fuertemente! ¡Amorosamente!

¿Y qué más podría hablarte?, porque también -a partir de ese instante- sabrás que Nuestro Padre eternamente y ahora ¡totalmente! habrá de guiarte, ¡de inspirarte! y que todo eso que te envuelve ya podrás enderezarle.

¿Por qué insistimos en ello? Porque -si tú ahora lo llamas “un don”- pronto verás que es esa parte divina que El te entregó y que con una sutileza que primero tan fina, a ti te acompañó. Mas ahora fluyendo está, ¡queriéndose mostrar! Y eso es lo que sucederá. Todos aquellos que en un principio todo esto empezaron a escuchar; aquellos que han insistido y han persistido en quererse preparar, aunque en el camino también ha habido tendencia a -en algunas cosas- errar.

Pero mi Padre sabe. ¡Sabe que el momento tan cercano está! Escucharán y sentirán la clave para en ustedes ¡todo cambiar! ¡Mostrar transparentemente! lo que -amados hermanos- en ustedes, todo ha empezado a cristalizar.

¡Grandes momentos, que cada uno de ustedes vivirá!

Agosto 12, 2015

Ángel Ráh.

Porque en el sonido, aquél que en el Cosmos estuvo retenido y ahora, en gran libertad ha empezado a avanzar y hasta a ustedes empieza a llegar. ¿Recuerdas que te dije, que mucho de lo que te he traído empezarías a escuchar? Mira; sucede que al estar tan distraído, los cambios que ya se empezaron a dar, muchos de ustedes no se han enterado, ¡pero lo han sentido! Y eso -amado hermano- de ello ¡te hablaremos! y te quedará muy claro.

La hermana te ha hablado de una melodía, que cada vez ¡más y más! estará sonando, su vibración elevando, porque… y en ese sonido -desde tu interior- lo que estarás soltando; ¡todo lo que en ti ha estado purificando! Y aún sabemos lo que te está faltando; pero como todavía en tu insistencia de decir: “¡Soy humano y aquí estoy caminando! ¡Padre mío!, háblame más claro, para que lo que esté escuchando lo esté entendiendo ¡y ya lo esté utilizando!” Entonces -en esa intención- empezaremos y verás la acción. Acción que luego tú tienes que entender que ¡en ti también se tiene que ver!, porque hermano, tal cual como tanto te insistieron: ¿Qué prefieres; que te den de comer o que te enseñen a pescar?

Yo diría, para todo esto aclarar; que con todo lo que se te ha estado compartiendo, ¡ya es el momento!, empieces a recordar quién eres tú y en éste caminar compartas con aquél que todavía insista y diga: “Como humano que soy, tienes que aclararme de todo lo que quieras hablarme. Preciso ver para poder creer”. ¡Eso sucedió en un principio!, porque no me negarás que se te mostró. Luego ¡no entendiste lo que se te pidió!, porque se te dijo: “Si tú me dices que ya has entendido y que todo para ti está muy claro, porque es tu momento; ¡empieza a vivirlo!”

¿Y cuál ha sido la resulta? Que sigues y pretendes también dar respuesta a cada pregunta, ¡pero a tu manera! Y lo que viene de El, en la verdad de la verdad, eso ¡no te la comparte cualquiera!, porque viene de la eternidad, ahí a donde tú volverás. Entonces te insisto; ¡no te niegues ésta gran oportunidad! Si la Conciencia Crística; aquella en la que algunos ya han empezado a caminar, pero quiero decirte que -a pesar de ello- en algunos momentos se han permitido dar tumbos, porque cuando se trata de mostrar en ustedes mismos ¡empiezan a dudar! y eso no debe de ser. ¡No cuando tú ya estás a punto de unirte a tu Ser!, tal cual como se los ha dicho la hermana y verán, se les mostrará, que todo esto no son palabras vanas.

Que ya lo has visto; ahora, con más fuerza -amado hermano- se te mostrará y lo comprobarás, pero ten presente que de todo ello no sólo tu cuerpo esté ahí; ¡que tu mente no siga ausente!, porque en toda esa energía, desde tu interior lo que se empezará a abrir será con fuerza, ¡de verdad!, en la verdad del “Yo Soy”. Ha lLegado ese momento y lo que escucharán será tan claro, ¡tan directo!, ¡así como tú te has expresado!, que tu hermano ¡Ángel Ráh! -el que te habla- siempre lo ha hecho. Pero también siéntelo así; con infinito amor ¡y todo lo que tengo que decir es para que logres -que no tu evolución- sino ya tu total liberación! y que rompas -de una vez por todas- el velo de ésta ilusión.

Porque así sucederá. En cada uno de ustedes se mostrará y entonces entenderás, que todo esto que se te ha dicho ¡no es casualidad que escuchando estás!, aunque en esos vaivenes ayer no estuviste, pero hoy estás. Y aquél que sí lo estuvo y hoy su ausencia -en apariencia- pero déjame decirte que se encuentra su esencia y que recibiendo toda ésta vibración está; porque todo es con el infinito amor que te entrega “Aquél que todo lo creó”. No hay distancia, ni hay lugar donde -cuando tú estás deseoso- aunque en ese momento en alguna distracción que te hace o pretende hacerte olvidar, que nuevamente estás en la enseñanza del “Yo Soy”, porque tal cual como te lo ha dicho el que llamas “Maestro”; ¡eres un gran estudiante! y ahora, pretende ¡y va a graduar!

¿Qué más deseas escuchar? Lo que viene de la eternidad; ¡eso! de lo que te voy a hablar -tu hermano ¡Ángel Ráh!- preparado lo tiene ya. Todo lo que hasta hoy has escuchado; lo que has entendido ¡y también lo que has desechado! está en ti. Ya ha empezado a mover esa esencia, lo que es -en ti- ¡lo eterno! y para de El su complacencia y tu sorpresa. Ya empezó el momento en el cual ¡tal como te dijeron!, de lo que se te hablará y lo que se mostrará, te dejará sin argumento. Eso, también contigo lo compartirá ¡Ángel Ráh!

¡Todo esto que llegó!, aquél -porque voy a decirte que a pesar de que el llamado -en apariencia- no se le dio, aquí -en tu plano terrenal- “Aquél que todo lo puede” y nosotros, todo lo que El observó; lo que tú hiciste; lo que tú pensaste; lo que en tu interior hablaste -amado hermano- yo te digo; en la preparación -para El y ante El- lo mostraste. ¡Por eso te digo! ¡Muy importante!, que de las emociones, de los sentimientos, aquí ¡ya no permitas seguir cautivo!, porque tu preparación muy directamente, “Aquél que todo lo creó” a ti te ha acompañado. Y a quién se hace llamar “tu hermana” ¡Aleshia de Shirón!, ya se le indicó qué es lo que -para cada uno de ustedes- es lo siguiente en su preparación. Y entonces, ¡ahí es donde -después de todo ello- entro yo! ¡Directamente!, para que en la Conciencia Cósmica ya la vivan fuertemente, ¡tal cual como El los necesita! Y eso lo verán; lo sentirán; lo escucharán. ¡Ay de aquél que aún después de todo esto, no haya querido o no haya podido entender!, porque entonces -hermano querido- ¡eres tú! el que se está negando a ésta gran oportunidad estar aprovechando.

Toda la energía solar, pero también aquella que está llegando desde la Fuente misma y que en ustedes está, y están sintiendo esa gran sacudida, yo te digo hermano: ¡Vívela! ¡Permite! ¡Siente! ¡Decreta! ¡Pide! Que todo tu templo, ¡todo tu cuerpo!, que aún te hace llamar “humano”, con el gran Símbolo Sagrado que he tenido a bien -en el nombre de El- a ti entregarlo, logre en ti y te permitas así seguir ¡en ese gran equilibrio!, que en unión ¡desde el gran núcleo que hasta ti elevó! y ¡lo que del Cosmos también se unió!, eres tú , en este gran -¿quieres que te diga?- ¡Vehículo Sagrado! que en ti ¡ya está integrado! y mucho está ayudando, para que sigas recordando y tu templo ¡de una vez por todas! esté purificando.

¡Mira!, que con decirte esto, para arrancar de una vez por todas el velo, ya he empezado. En ti está, que puedas ¡y quieras lograrlo! ¡Que nosotros contigo estamos! Y luego -en ésta entrega- ¡que mira!, que ha habido más, ¡pero que la hermana piensa que aún no debería!, mas el momento ¡ya está!, para que ella recuerde por qué y para qué, fue el deseo de “Aquél que todo lo creó” a ella entregar, porque -con todo aquél que ya esté preparado- lo compartirá. No olvides; que por eso se ha insistido a ustedes, hermanos.

Que mira; que el escuchar quién realmente eres ¡y todo lo que en ti está!, mas lo que ya viene y que como un aluvión llegará, algunos de ustedes ¡mucho impactará! ¡Y no permitas! -es por eso que de ello te hablamos- que el temor llegue a ti; porque, no olvides que ese ha sido el eslabón ¡que más fuerte!, no ha querido permitir que tú te eleves. Y eso ¡eres tú y sólo tú! quien tiene que dejar atrás. Para ello, tu hermano Ángel Ráh, de esto te ha empezado a hablar.

Y mira; todo esto que está sucediendo y mucho de lo que han escuchado y que te dicen que te estará agrediendo; yo te digo -amado hermano- ¡tú!, que estás entregado y que sigues firme y en la preparación cada vez más quieres estar purificado, sabrás que nada de esta ilusión detendrá lo que en tu camino, porque ese es ¡que no tu destino!, sino ¡lo que El tiene para ti!, en su plan divino, porque así será. ¡Tú lo vivirás! y entonces entenderás “por qué” y “para qué”, a quien llamas “tu hermana” aquí está.

Sabemos que mucho de ello lo estás comprendiendo ¡y eso! -amado hermano- te permite seguir adelante. ¡Y es así como El te pide!, porque seguirás ¡todo de ésta ilusión! trascendiendo. ¡Así es! Y entonces, desde éste cuadrante, desde donde yo me encuentro, ¡pero que me uno a través de la hermana para hablarte!, entonces, también permitirás que más fuertemente ¡y en su totalidad!, ¡sientas y veas la Luz que El te envía!

Que mira, que tal cual como El así lo dijo en el primer día: “¡Todo lo que deseo crear, en la Luz!”. ¡En la Luz, amado hermano! ustedes se verán, porque eso es lo que eres y en toda su pureza y volverás a vivir ¡toda su grandeza! Escrito está y empuñando -tal cual como El ¡a mí! lo que me estuvo entregando; aquello que escrito desde la eternidad ¡y que nada ni nadie lo borrará!, así es como tú nuevamente te verás ¡y todo recordarás! Y eso, la hermana, de ello te empezará a hablar.

Que yo soy ¡Ángel Ráh! ¡Nombre terrenal!, mas de todo lo que ya se ha abierto, más pronto de lo que ¡tú te imaginas!, lo escucharás muy claro y directo, para ti con esa fuerza; cómo hoy, que todo esto limpiando está este planeta, porque tal cual como El lo dijo: “Y la gravedad cambiará. Y todo se moverá”. Pero para ello, preparado cada uno de ustedes ya está. Por eso ¡hermano tan amado!, escucha, siente, vive ¡y entiende!, que todo es para que empieces a caminar en la verdad y en la claridad. ¡Y sobretodo en el infinito amor que El -a ti- te da.

Que yo soy ¡Ángel Ráh! y entregaré a ustedes, en ese gran momento, tal energía que -en tu templo- lo que moverá, es para que tú aceleres y llegues ¡y vivas ya ese gran día! y con El estarás. Y tu hermano te acompañará.

Que yo soy ¡Ángel Ráh!

Agosto 12, 2015

Aleshia (2).

Y así, con ese gran regalo que mi amado Maestro a ustedes ha entregado; purificando, limpiando, cristalizando, moviendo, así es como todo empezará y se les estará mostrando -amados hermanos.

Porque sí, de alguna manera esa es la voluntad de mi Padre: Se les estará motivando. Será no sólo hablando; también entregando ¡y mostrando todo a ustedes!, tal cual como ha sido de tiempo en tiempo. Y ahora nuevamente, porque ya no será solamente el silencio; también en éste gran sentir, en éste Nuevo Vivir, porque -a la par- también estarás escuchando de la gran enseñanza del “Yo Soy”, que mi Padre tan amado -ya es su voluntad- ¡que más y más! de ello se les esté hablando.

Y así será, porque estoy aquí para servir -de mi amado Padre- su voluntad. Todo lo que -en su infinito amor- tenga a bien pedir, porque tu hermana sabe que es para que tú, y tú, ¡y todos ustedes!, recordando sigan viviendo, y en amor todo aquello que les detenía ya estén soltando. ¡Y eso es lo que están haciendo!, amados hermanos.

En la integración de todos mis hermanos, aquellos que harán con nosotros tal interacción, quiero compartirles; ¡ya todo empezó! Por eso -amado hermano- ¡acelera ya tu preparación!, para que en lo que tú llamas “tu evolución”, escuches y compartas ¡aquí!, todo lo que mi Padre ha tenido a bien pedir y que a ustedes, ¡a ustedes!, tu hermana les va a compartir.

Mi Padre ha hablado; que -en la preparación- la enseñanza ¡se estará elevando! y lo ha dicho ¡con gran alegría! Por eso -amado hermano- escuchando estás todo esto. En ti está y es mi deseo, que tu presencia -al convocar ante Nuestro Padre- para que sientas fuertemente lo que en ti y en su esencia quiso que estuviera; que contigo viviera, porque ya es el momento. La clave ingresará. La sentirán. ¡Déjame decirte, amado hermano!, que no será necesario que -como hoy- cuando eso empiece a suceder, presente estés; porque -donde tú te encuentres- ahí es donde mi Padre tendrá a bien abrir y es cuando vas a sentir la necesidad urgente. Lo escucharás, cuando tu hermana te pida que es necesario hablar.

Así es como se dará. ¡Ya lo verán! amados hermanos, porque luego ¡como hoy!, como ha venido sucediendo, ¡todo lo que estás escuchando!, lo que te estamos compartiendo es el complemento, de lo que poco a poco para ti será ¡porque así lo vivirás!, ¡el gran sustento!, ¡el alimento!, el de mi Padre, estarás recibiendo. ¡Ya lo verás! ¡Ya te había compartido! ¡Sé que lo habías olvidado! ¡Pues nuevamente te lo digo! Entonces sabrás y escucharás del verdadero alimento; de mi Padre y de El lo recibirás, porque ¡todo en ti cambiará! y así será. Por eso, de ésta ilusión nada vas a necesitar. Y en el nombre de mi Padre te digo; pronto verás que lo que te digo ¡es la verdad!

Te lo dice tu hermana: ¡Aleshia! ¡Aleshia de Shirón!

Agosto 12, 2015

Leutón.

Y entonces también lo entenderás, lo que es vivir y caminar en el perdón. El perdón que en ti mismo, empezarás a llevarlo a la acción.

Sí hermano, porque empezará a hacer su acción ¡el protón!, que ya se unió con el electrón. ¡Eso es!, de todo esto que en tu atmósfera sucedió y que muchos de ustedes “dices”, ni siquiera lo sintió. ¡Pero no es verdad! ¡En ti empezará a accionar! y eso lo sentirás. Por ello “Aquél que todo lo puede” y yo -amorosamente- lo estoy haciendo; porque todo lo que viene de la Fuente, tal cual como a tu hermano también le ha indicado y todo lo que me ha pedido, con infinito amor -hermano querido- ¡aquí estoy! nuevamente.

Pudiera decirte que estuvimos muy fuertemente en la acción; cambiando de dirección todo lo que hasta hoy ¡mas mejor te hablo del presente!, para que tú dejes de ser ambivalente era necesario cambiar de dirección y la red energética y magnética que te cubrió, un cambio total a ella ya se le dio. ¡Por eso te digo!, quedaste unido y en ti está -hermano querido- que lo sientas y lo lleves a la acción. Que ¿cómo, te habrás de preguntar?, pero eso también -tu hermano Leutón- te lo dirá.

Muchos de ustedes tienden ¡y más les gusta escuchar! de una manera que -si quieres no simple- pero no olvides, que la hermana ¡que tanto contigo habla!, así se ha referido, de una manera tan sencilla y tan natural; ¡porque eso es -que todo lo que viene de El- en ti se da!; que tú lo vuelvas complejo, déjame decirte, que eso ya es parte de lo viejo; porque tal cual, lo que has empezado a sentir; la gran atracción que ya hay en ti, para que sigas y vivas tu evolución, cada vez más fuertemente te llevará a la acción.

Y esto te lo digo, aunque algunos de ustedes escucharlo no le sorprende. Son los que muy atentos han estado. Aquellos que no solamente han escuchado; también lo han reflexionado. Porque -amado hermano- para seguir evolucionando, es necesario unir el corazón con lo que tú llamas “tu mente”, pero dejando de ser humano. Y eso -a hacerlo- ya has empezado.

Y nosotros seguimos aquí. Ya hemos empezado a mostrarnos con algunos, pero aquellos que lo han vivido, quiero decirles que -preparación como la que ustedes han tenido- no la han sentido; no la han vivido ¡y eso todavía no les ha permitido que sientan con el corazón!, para entonces -al seguir su caminar- hay muchas emociones que los ha retenido.

Queremos y deseamos que en ustedes eso no suceda, porque si en la enseñanza del “Yo Soy”, aquél que ustedes llaman “Maestro” ¡tanto les he hablado! y ahora que nosotros, los que llegamos, los que les compartimos y de lo que les seguiremos hablando, será para en un todo, en ustedes lograr que muestren lo que son en realidad. Sabemos que así sucederá ¡y entonces! -en lo que a mí respecta- me dejarás de llamar “tu hermano mayor”, porque también caminarás con nosotros en completa unidad. ¡Tal cual como es su deseo! Viéndonos y sintiéndonos como “¿humano de cuarta?”. Esto te lo digo con gran alegría. Tu hermano Leutón te anticipa que para ti ¡ya llegó ese día!

Y de lo que tú llamas “electricidad” ¡no es tan complejo! Hay un campo residual ¡que siempre ha estado! y que en ti nuevamente se estará mostrando. ¡Sabes de lo que te estoy hablando! y ustedes lo estarán entendiendo hermanos, porque lo que verdaderamente nos mueve y deseamos ya estar unido con ustedes, es que no solamente aquí sigas caminando, sino que cuando tú te eleves, porque sucederá, ¡ya no lo sigas dudando!, entonces nos acompañarás y verás que del Cosmos que no tiene final, que ahí donde todo lo puedes, compartirás el infinito amor de “Aquél que nos quiso crear”.

Te lo dice tu hermano Leutón. ¡No lo olvides! Y empezará cada vez más y más fuertemente a girar y elevar. ¡Campo residual!

Tu hermano Leutón, con infinito amor para ustedes. Y me he de mostrar. Pronto será.

Agosto 12, 2015

Saint Germain.

¡Y así es! ¡Amados! ¡Amados hermanos! ¡Están escuchando! y con gran alegría he de decirles: Se les seguirá llamando. Aquellos que ya están, ¡sí, dispuestos! y que a pesar de todo esto, su reacción fue en amor y en gran petición: “¡Padre, aquí estoy! Es mi deseo también ser el siguiente, ¡el próximo!, al que tú -a través de mí- ya estés en acción”. Y quiero decirte; amada hermana, amado hermano ¡claro que te escuchó!

¡Con gran contento estamos!, porque la reacción que tuvieron mis hermanos ¡fue en amor!, ¡en gratitud! ¡Qué gran lección! ¡Pero sabemos!, ¡entendemos!, que quienes ahí, muy en lo profundo, esa certeza de que aquí están, ¡están logrando estar de una sola pieza!, ¡preparados!, para que -en el momento en que llegue el llamado- acudir prestos. Amados hermanos: ¡Benditos sean! ¡No tienen idea cuánto les amo!, porque están soltando; están dejando aquellas emociones que los estuvo atrapando. Esos cuestionamientos; esas dudas; esos condicionamientos, que saben que sólo los llevó a la desunión; a la aparente separación. 

Y ahora, que está ¡tan próxima la total acción!, nuevamente amados, están sintiendo ¡y más fuertemente!, que todo lo que viene de la Fuente es para cada uno de ustedes y así ¡tal cual! como El los necesita. Por eso tu hermano ¡Saint Germain! los invita: ¡Sigan así!, que gran sorpresa amorosa van a recibir, ¡amados! Ustedes por eso, desde el inicio y nuevamente estamos viviendo esta travesía de amor. ¡Nuestro Padre no se equivocó! Fueron convocados y aquí están.

¡Fuera resabios! ¡Ya no más!, porque todo lo que Nuestro Padre -a ti- te está entregando y lo que nosotros, ¡sí, nosotros!, porque en compañía de mi amado hermano y toda la Gran Hermandad Blanca; la Hermandad de la Luz, para ustedes estamos preparando ¡y sí!, ¡aquí en su plano terrenal llegará como un alud! De sorpresa los tomará. No olviden esto que están escuchando. ¡Sigan así amados!, entregados, amorosos, preparados.

Esto que se abrió -en apariencia- porque muchos eso es lo que están diciendo: “Nada se movió”. ¡Claro!, para aquél que pretende seguir viviendo en esta ilusión. Pero para ti, que -a pesar de aquí seguir- estás entregado de corazón, verás hermano, ¡verás hermano!, lo que en ti ya sucedió. Sólo déjate llevar. ¡Abandónate a Nuestro Padre!, “Aquél que todo lo da” y entonces, entonces el cambio en ti ya se dará.

Y de ello -tal cual como mi amado hermano ya lo dijo- El te hablará, mas tu hermano ¡Saint Germain! te mostrará. Más pronto de lo que te imaginas así será. Y aquí, en este lugar sagrado, todo lo que nuestro amado Padre tiene preparado se seguirá mostrando. Y tú eres partícipe muy importante, amado, ¡amado hermano!

Que yo soy ¡Saint Germain! Y no olvides, que todo aquello de lo que hemos hablado ya se hará. Más pronto de lo que imaginas ¡se te mostrará!

¡Sientan la Llama Violeta! Que con gran fuerza los envuelva, transmutando ahora ¡fuertemente!, todo aquello que tenías cautivo ¡y mucho más!; lo que estaba en tu mente. ¡Hazlo hermano!, porque lo que está llegando de la Fuente necesita ¡todo el espacio! que el gran vacío en tu interior ha hecho, porque estarás mostrando que has empezado a vivir -de Nuestro Padre- lo perfecto. ¡Lo lograrás!

Tu hermano ¡Saint Germain te lo dice!, porque contigo está. Y también mi hermano; aquél que te dejó un gran Legado y ahora para lo que tú ya estás preparado para escuchar; de la verdad de la verdad, como tanto él, como quien te habla y aquellos que han estado llegando -al prepararnos- ahora, desde la octava desde donde estamos, te decimos: ¡Bienvenido! ¡Ven hermano! Y así sucederá.

Envuelve tu templo con la Llama Violeta. ¡Visualiza y transmuta! todo aquello que no es tuyo. ¡Que aquí se quede! Recuerda que te he dicho: ¡Primero que se eleve!, para que luego -en toda esa pureza- regrese, y aquí -al quedarse- ¡se multiplique con tu hermano!, aquél que aún dormido pretende caminar; que aún no desee ¡vivir su despertar! Pero es una de las cosas que tú -amado hermano- empezarás en tu misión a mostrar. Hazlo. Vívelo. Siéntelo. Decrétalo y te darás cuenta que todo lo puedes en aquél -Nuestro Padre- que es, ha sido y será por toda la eternidad.

¡Y que la gran Amatista! haga en ti -desde tu interior- esa gran implosión, para que luego, vivas toda la expansión, amado hermano. Que yo soy ¡Saint Germain!, en esta Nueva Era de amor, perdón y libertad.

Y sólo vuelvo para decirte; ya te lo prometí. ¿Por qué?, ¿por qué tu hermano así?, ¿por que hablarte de ésta manera? Que no se te olvide, que ya todo quedará muy claro y en la verdad ¡seguiremos caminando! mano con mano, ¡porque ante ti se mostrará tu hermano! ¡Saint Germain!

Agosto 12, 2015

Aleshia (3).

Que en el cambio que en ustedes se estará dando, por todo lo que está llegando, tal cual y como ello está sucediendo en éste mi cuerpo, mi templo, sentirás esa sensación de calor que abrasará, porque en la verdad, al renovar en este Nuevo Ciclo, lo que aquí se mostrará, porque como el amado Maestro ya lo dijo: “Si de mi Padre es su voluntad, en el cambio de gravedad, para ti inclusive el respirar más sutil será”. Es por eso que se te pidió, que para ello te empezaras a preparar.

Ya, con infinito amor se te advirtió, así como tanto ha -Nuestro Padre- de mi Padre tan amado ha tenido a bien hidrolineando, y yo te digo, porque eso es lo que me está dictando. No te ironizo hermano, un día de esos, nuevamente estaremos hablando, para que al empezar a la par, tal cual como todo aquí está cambiando, tú también en tu cuerpo, ya lo estarás renovando, mientras aquí sigas caminando. Porque al seguir siendo tu deseo cumplir la misión que mi Padre te estará inspirando, es su deseo que mientras sigas aquí, nada en ti, por nada te esté preocupando, porque lo que El pide es que te estés preocupando de todo aquello que El -poderosamente- te esté indicando. Y así será amado hermano.

En esta preparación que hemos estado viviendo, de todo lo que hemos estado escuchando, ya había sido dando cuenta cómo en algunos y también eso se verá en ti; por qué y para qué. Y lo has estado mostrando.

Proyecto Shirón tiene profundamente un gran propósito que se llevará a la acción. El gran momento -así lo dice mi Padre- ya lo estás viviendo y ya se verá. Y entonces entenderás muy claramente el por qué y para qué se quiso hacer y aquí con cada uno de ustedes, este gran Proyecto de Amor que viene de mi Padre, pero que ustedes, ustedes han empezado a buscar en la preparación.

Eso es lo que dice mi Padre. Gracias hermanos. Gracias por escuchar.