1 de abril de 2019

Canalización del 27 de Marzo de 2019.

Marzo 27, 2019
Alexa. (1)

Y así es hermanos; de todo lo que hasta hoy hemos vivido, cuando cada uno de ustedes en algunos momentos deja de estar dormido, en su despertar empiezan a reflexionar e invocar, a con Nuestro Padre tan amado hablar.

¡Es una gran oportunidad! para hacerlo de una manera en la cual estés en ese coloquio amoroso en el que al estar con Él y sentir ese gozo sin ningún temor, porque cuando tú estás permitiendo que sea solamente ese ¡Gran Amor! no hay vuelta.

Eso es lo que desde un principio nos pidieron, y al hacerlo nos dijeron que si nosotros permitiéramos, ellos nos ayudarían para dejar de vivir en esa dualidad; para ya no tener ¡esa ambivalencia! que no era necesario. Tanto insistieron y dijeron: “¡Ya no más! Cuando tú unas tus dos hemisferios y empieces a vivir ¡en esa unidad!, entonces ¡mucho vas a entender! y al mismo tiempo recordar”.

Nos han estado insistiendo ¡que en la Akasha Divina!, cada uno de ustedes empezaría a recordar. ¡Y lo sé de cierto!, porque los flashazos que algunos han venido a tener, de lo que me han comentado, de lo que han sentido y que no le encuentran precisamente una relación, o en ese momento no tiene sentido, ¡invoquen a Nuestro Padre!, ¡a nuestros Maestros! ¡Háganlo con infinito amor!

Que también -si ustedes recuerdan- nos han reafirmado ¡que toda pregunta tendrá su respuesta! Que es el tiempo y el momento en el cual todo lo empezaríamos a ver ¡tan claro!

Y cuando no sea así -amado hermano- ¿quién mejor que El?, ¡que tiene la verdad! Esa verdad que siempre ha permanecido, que es eterna y con esa Luz que nunca ha fallado nos ilumina para recordarnos que solos no estamos; que El -en ese Gran Amor- siempre, aún a pesar de que si das un vistazo atrás y haces la comparación de quién eras y hoy quién, ¡sabes y estás sintiendo! que con firmeza sigues caminando y que todo en el sendero al irse reduciendo, porque ¡no habrá nada contra qué luchar!

Aunque también el amado Maestro nos ha dicho que fácil no sería; pero cuando sucedan esos momentos, en cualquier situación, en cualquier evento, sabemos que para la lucha, cuando tú sientes y digas: “Con esto no podemos”, entregárselo a Nuestro Padre ¡sin ningún temor! Saber que El tiene la solución de una forma ¡que jamás lo hubieras pensado!, que no hubieras imaginado, por muy difícil que parezca. El no conoce esa palabra, imposible ¡no existe para Él!, y eso es en este proceso lo que nosotros tenemos que entender.

Algunos han dicho que resulta complicado, pero hermanos, mientras tú tengas ese pensamiento, no olvides que también nos han dicho que ya no existe el razonamiento; que no permitamos que eso suceda, porque entonces volveremos a ese confinamiento en el cual estuvimos, y no, no queremos regresar. Queremos seguir adelante. Ser cada vez ¡más sutiles! y aprender a volar o recordar cómo era antes, antes de que viniéramos aquí a experimentar.

Esta bendita Estrella está viviendo ¡tantos cambios!, sucesos que para algunos pueden resultar ¡tan extraños! y que los atemorizan, pero Nuestro Padre pide que precisamente no pensemos en eso; que sintamos y pensemos en esa suave brisa; que donde estamos simplemente es el Paraíso; ¡porque El nos acompaña!, ¡porque El está con cada uno de nosotros!

Amados hermanos- cuando al seguir insistiendo en esta preparación, logremos estar siempre en esa total y elevada Vibración, entonces, entonces cada uno se dará cuenta que todo esto de lo que se ha hablado ¡es la verdad! de Nuestro Padre tan amado.

Cada vez que tú sigues adelante siempre aparece algo que pretende complicarte, confundirte y desviarte. Eso seguiré insistiendo, y quizá algunos de ustedes se han preguntado: “¿Pero de qué manera? ¿A qué te refieres?”

Pudiera ser más explícita, pero cada uno de ustedes saben el lugar donde se encuentra, ¡dónde mi Padre te necesita!, y es muy importante que tú en ese momento, cuando sientas que hay alguna situación ¡que pretenda arrebatar! para que no sientas ese Gran Amor, ¡que pretende desesperar! y que saques de ti aquello ¡que ya no debe de estar!, siempre detente un momento, un instante, ¡y entrégale a Nuestro Padre!, invoca Su Presencia. ¡Eleva tus decretos! Siempre puede suceder.

No olvides que también, cuando nos envió a tomar lo que ustedes tomaron como en este Plano terrenal, cierta preparación; aquel hermano cuando dijo: “Tú puedes -dependiendo del suceso- detener o alargar el tiempo”. ¿Por qué no lo has intentado? ¿Por qué no lo has hecho? ¡Y no es necesario que te apegues! directamente a la teoría de la cual nos hablaron, ¡a la práctica!

Simple y sencillamente entrega tu corazón a Nuestro Padre, y en ese día, en ese momento sabrás que la mejor arma que te entregó ¡es el amor!, porque en esa Vibración, cuando tú te envuelvas en ella, no vas a permitir ¡que nada! te invada o te agreda; que siempre sentirás el amor en la verdad de lo que Nuestro Padre nos ha venido a entregar.

¡Y precisamente en ello mismo!, tú has escuchado -amado hermano- algunos piensan y dicen: “¡Tenemos que trasladarnos a algún otro lugar! ¡Quizá cuando sea necesario!” Nuestro Padre es el que lo va a señalar. Por eso su hermana al detenerse por algunos momentos, pero cuando siente y le indican, ¡sabe!, no pregunta, ¡pero le da el cumplimiento!, porque la respuesta -si no la dan en ese instante- luego la vas a ver ¡tan claramente! que dirás: “¡Padre! Quiero dejarme llevar por tu guía, por tu amor, por tu Gran Potestad”.

Entonces hermanos, ¡eso es lo que tenemos que lograr! y entonces verán cómo se abre el Cosmos, el Infinito para cada uno de ustedes ¡nuevamente!, porque todos hemos estado, hemos vivido ¡y vamos a regresar! a lo que El nos ha prometido.

De acuerdo a la preparación, en este proceso que cada uno de ustedes está llevando en Gran Amor, y lo que El ha indicado, cómo se ha llevado el “Proyecto Shirón” -amados hermanos- lo que en apariencia su hermana al no hacer llamado tan concretamente, tan seguido, es porque de lo que El me ha dicho, de lo que El me ha indicado, de lo que me ha pedido, así es como su hermana -hasta hoy- es su deseo hacerlo y con ustedes lo ha compartido.

Me queda muy claro y debo decirlo; que los que han estado, los que han permanecido; aquellos que estuvieron tan cercanos y que en apariencia se han retirado, ¡han empezado a cumplir lo que mi Padre les ha indicado!, y yo -con gran alegría- les digo que ustedes que hoy los que siguen aquí y los que nuevamente se han acercado, mi Padre indicará -si es que así ustedes es su deseo y lo van a permitir- les va a indicar qué es lo que necesita de ti, pero en Gran Amor, directamente en tu interior.

¡No permitas que sea el ego! el que vas a escuchar. Déjate llevar. Pon tu mente en blanco ¡y permítete escuchar!, que lo más sencillo y para algunos de ustedes sucederá. Eso es lo que estoy sintiendo.

Y en este momento mi Padre tan amado, ¡Nuestro Padre!, me está diciendo para aquellos que se pudieran confundir: “Cuando se abandonen a su descanso, pues entonces sentirán que estoy ahí, y cuando se eleven de ese templo que ocupan les estaré hablando, ¡o mejor aún!, en algún momento ¡sí les voy a estar despertando!, pero para decirles, para que me escuchen clara y dulcemente qué es lo que necesito; qué es lo que requiero de cada uno de ellos. Y los invito, para que reciban ¡todo lo que vendrá de la Fuente!”, porque al seguir la preparación entonces será directamente de Él y en infinito amor.

Y no te preguntes, no quieras saber qué será de tu hermana. Yo estoy consciente de todo lo que El me está indicando, y al estar aquí encarnada como humana, también llegará el momento en el cual mi presencia no será necesitada. Que lo único que estoy haciendo es compartir -como en este instante- todo lo que viene de Nuestro Padre; todo lo que tú -en Gran Amor- deseas escuchar para seguir adelante en esta preparación.

¡Es distinta la reacción!, porque -como lo dije en un principio- ¡no todos están en la misma Vibración! Algunos quizá un poco se han podido adelantar, ¡pero lo que sí es cierto!, y ustedes lo estarán viviendo, lo estarán viendo; que todos volveremos a Nuestro Padre, y es mi deseo que todos lo hagamos en esta oportunidad; ¡que lo logremos! Eso es lo que Nuestro Padre desea, por eso ¡de tantas cosas nos quiere hablar!

Y al ir señalando cada lugar, como el que hoy aquí nos hemos reunido y ustedes que están escuchando, Nuestro Padre ha querido que al seguir adelante, al fluir, al recibir y compartir, ¡sea sólo su palabra!, ¡sea la verdad infinita y total!, porque tal como se empezó a compartir, que este sería el tiempo en el cual aquellos que se querrían elegir lo vivirían plena y totalmente, y entonces sus hermanos -al atestiguar- sabrían ¡ya sin dudar! para aquellos que inclusive han sido tan arrojados al decir ¡que no existe! la Presencia, la Energía verdadera de Nuestro Padre; ¡que hay ausencia!, por todas las calamidades que están viviendo y que se están compartiendo, y es porque no han estado entendiendo, que sólo somos nosotros, que de acuerdo a lo que estamos y que hemos hecho es lo que estamos atrayendo.

Podría hacer cita de tantas cosas que lo que llaman “El Libro de la Verdad”, Biblia o todos los nombres que le quieran dar; pero hermanos, al no estar tan apegados, porque durante el transcurso del tiempo, quienes tan terrenalmente hemos vivido, hay muchas cosas que las han escondido. ¡Otras! que -como lo he repetido- las han tergiversado. ¡Qué mejor! que viniendo y escuchando de lo que directamente Nuestro Padre y aquél Gran Ser que se sienta a su lado; que tanto escuchó y de que todo de ello habló a quienes prestaron oídos, no sólo en aquel tiempo, todo el Legado ¡está! y hoy ¡más que nunca tan vivo!

Sólo es necesario que cada uno de nosotros pidamos hacia Nuestro Padre la sabiduría, para todo entenderlo, ¡para ver claramente!, ¡para no ser incongruente!

¡Ay hermanos! Sabemos que fácil no es, pero tienen ustedes la asistencia ¡de todos nosotros!, porque El -Nuestro Padre- al pedir, señalar, y nosotros estar aquí y compartir para que vivan ese Despertar, para que sepan, hasta cuando llegue el momento en que ¡ya no lo necesiten más!, ¡la asistencia de cada uno de nosotros!, de quienes con Gran Amor estamos viendo, ¡estamos con ustedes compartiendo! lo que viene de Nuestro Padre.

Cuanto más ustedes siguen adelante, hay más inercia, hay más desconfianza. ¡Se ha ido perdiendo esa creencia!, ¡o esa fe! con la cual hoy por hoy ¡son tan pocos! los que en esa fuerza permanecen, y entonces lo empiezan a lograr. ¡Esos son los que empiezan a con ustedes compartir y a mostrar lo que viene de Él!, de Nuestro Padre, pero credibilidad ¡no les dan!

Prefieren ustedes, ¡permiten que los vengan a deslumbrar! con lo que les hablan, con lo que les dicen, con esos reflejos que duran ¡sólo un instante!, y lo que Nuestro Padre entrega, lo que quiere darte ¡es eterno! Es que tú -al llegar a iluminarte- ¡será por siempre! Permitirás que esa Luz que dentro de ti está se empiece a elevar.

¡Es por eso que se ha insistido! que el electrón con el protón, y hoy que se ha unido fuertemente el fotón -amados hermanos- lo que de ti está logrando. ¡Eres Energía pura! Eso ¡no tiene fin! Por eso también se les ha insistido ¡en que la muerte no existe! ¡Eres eterno!

¡Esa Chispa de Amor! que está en ti, cuando llega el tiempo y que tu templo cumple y llega su momento, se desprende, se eleva y vuelve. ¡Es eterna!, para seguir en ese constante aprendizaje, en esa preparación.

Pero ¿quién de ustedes realmente entendería? o ¿quién puede decir?: “¡Ya lo sabía!” ¿Hasta dónde has llegado? ¿Qué es lo que has logrado? ¿Qué es lo que puedes hacer? Vuelvo a repetirte: ¡eres ilimitado! Lo triste es que no te lo has creído; por eso ¡muy pocas cosas has creado!

Y nosotros hemos insistido que esto sea en positivo, ¡en amor!, solamente ¡en esa Energía!, en esa Vibración, porque todo lo demás lo tendrás por añadidura ¡y en gran abundancia! lo que Nuestro Padre ¡es!, en ti lo que te da.

Entonces sabrás y entenderás también esas palabras; cuando se te pide que veas a Dios en tu hermano, a Nuestro Padre Divino ¡en cada humano!, porque todos somos ¡Él!, pero estamos en este proceso en el cual ¡para forjarte! muchas veces se necesita tanta fuerza.

Es por eso que el Fuego Sagrado te entrega, porque con él estarás quemando toda aquella negatividad, ¡toda inarmonía!, y con la Flama Divina -hermano- desde tu interior, en ti, tu Ser, ¡todo estará tan cristalino!

Es el tiempo en el cual tanto se dijo que te convertirías del carbono al silicio. Estoy haciendo solamente una recopilación de todo aquello que se les habló en infinito amor.

Y de todo lo que escuchaste: ¿Qué has entendido? ¿Qué es lo que has recordado? y ¿qué es lo que a la acción has llevado? ¿Qué es lo que en ti ha quedado grabado? ¿En qué te has fundido? ¿Qué es lo que estás haciendo?

¡Y no olvides! -hermano- que tu intento y siempre -porque también lo hemos visto- y no ha sido vano, que has compartido con otros hermanos; pero en ti ¿qué es lo que has logrado? ¿Realmente sientes esa fuerza?, en esa verdad que de tu interior se abre camino y se expresa, para que entonces ¡sin necesidad! de que quieras convencer a aquél que se acerca para escuchar, ¡lo sienta!, ¡porque entonces tú empezarás a hablar con el corazón!, con ese infinito amor que sólo viene de Él ¡y que en cada uno está!

Entonces algunos pudieran pensar: “¡Quiero tener ese don!, ¡de la elocuencia!, ¡de la perseverancia!, del hacer sentir ¡con esa fragancia! lo que de Él viene”, y que en cada uno de ustedes, lo que ¡todos tienen! Pero hermano: ¿realmente tú lo has sentido? ¿Te lo has creído?

Pero yo te lo pregunto con esa intención, esa profundidad en la que tú al vivirlo, al sentirlo, sientes esa necesidad de compartirlo con ese amor que al expresarse y hasta ti llegar, te hace sentir esa sensación que no puedes explicar, de compartir y hablar, ¡y que llega la inspiración!, ¡y que lo dices!, ¡lo compartes!, ¡lo hablas!, y que tú -al escucharte- también lo estás sintiendo desde lo más profundo.

Ahí es donde parte y viene, y ustedes le llaman “elocuencia”, pero solamente es ¡la Ciencia de la Palabra Hablada!, expresada con ese Gran Amor que viene de “El Yo Soy”.

¿Quién de ustedes realmente -cuando lo ha hecho- así lo sintió?, ¡sin ninguna otra intención!, sólo compartirlo, encontrar la palabra adecuada para que sus hermanos al escucharlo ¡puedan vivirlo! y deseen también -en ese Gran Amor- agradeciendo a Nuestro Padre, al “Yo Soy”, hablarle al hermano, a la hermana, de todo eso vivido.

Y voy a decirte que si tú te has elegido, necesario no será ¡que prepares nada!, ¡porque mi Padre lo hará! ¡El te llevará! ¡El te indicará!, porque de todo esto que estás escuchando, de todo lo que te estoy hablando, estoy consciente -hermano- que es para que la mayoría de ustedes el camino al estarlo tomando, lo hagan de acuerdo a la Voluntad y al Plan Divino de Nuestro Padre.

Es el Gran Momento en el cual todas esas semillas, que cada uno de nosotros que hemos venido a sembrar, empiecen, ¡están floreciendo!, y entonces -hermanos- está cercano el momento en que nosotros vamos a cosechar.

Al seguir adelante escuchando y siguiendo la guía de Nuestro Padre, esa Energía maravillosa que cada vez más en este Cosmos, en este Infinito, al estarse abriendo está entregando lo que estará mostrando. ¡No habrá duda para ustedes!, ¡lo que de Él esté llegando!

Te pido estar atento, ¡muy atento y dispuesto!, porque tal como lo dije en algun momento: ¡ya no se te va a engañar! ¡Tú lo sentirás!, quién llega y te habla de la verdad, la verdad infinita que Nuestro Padre nos da, y quiénes -enarbolando el nombre de Nuestro Padre- han estado en falsedad, intentando desviarte en tu camino; ¡algunos para lucrar!, ¡otros! para alimentarse de tu Energía maravillosa; ¡esa! que al empezar en tu caminar, estar en su pureza, cada vez será más fuerte y te está y te seguirá iluminando.

Amado hermano; ¡muchas cosas más Nuestro Padre está preparando!, pero no hagas, no des oídos a otras ¡que de Él no están llegando! ¡Yo te lo pido! Tan sencillo es que estés siempre atento. Tantas armas nos ha entregado, y la principal: ¡el amor!, ¡y el Gran Legado! de la Enseñanza de “El Yo Soy”, que es tan directa, ¡tan perfecta!, ¡tan simple!, ¡tan sencilla!, ¡pero que muchos no hemos entendido! Eso es lo triste.

Pero para seguir en el camino -amado hermano- ¡no quieras!, ¡ya bastante tú te lo has complicado!, no quieras entonces que yo te mantenga inmerso, al hablarte en ocasiones tan metafóricamente, pero sin el deseo de complicarte; para que lo entiendas claramente, con esa sencillez, como El al pedirme estar aquí, como hasta hoy se te ha dicho, has escuchado.

Porque no sólo yo; mis amados hermanos que también te han hablado, ¡te han indicado!, ¡te han pedido! de lo que en el camino has necesitado, para que aceleres en esta preparación el llegar y lograr ¡no sólo de tu templo la purificación!, sino de tu interior, que ahí es donde habita “El Yo Soy”.

Pudieras pensar que soy muy repetitiva, pero también al entregar lo que de acuerdo a lo que cada uno de ustedes viva, y más por las Energías que en estos días se han estado cruzando; cuando El entrega con infinito amor ¡y te pide! que tú ¡contigo! vayas cargando ¡eso que llamas “piedras”!, ¡tantos cuarzos que nuevamente van a  vivir y van a entender!, ¡van a recordar!, ¡cuánto es lo que nos han podido y querido entregar! ¡Cual es la fuerza que tienen! y en Gran Amor qué es lo que te envuelve, ¡qué es lo que te protege!, ¡y qué es lo que rechaza para que a ti no llegue!

En aquel tiempo, cuando se ha logrado cada Era de Amor, aquella que llegó a una gran culminación, solamente -amados hermanos- eran las piedras las que usamos. Hoy nuevamente, poco a poco irán recordando y sabrán que han estado ¡tan cercanos!, que por no entenderlo, por no recordar, ¡por no quererlo!, han tenido ¡tan cercanos como lo he dicho y no las han usado, con aquello que en aquél tiempo se estuvieron empoderando, pero siempre siguiendo el camino de Nuestro Padre amado. Luego, al permitir otras situaciones, fue cuando empezó -amados hermanos- la caída del hombre. ¡Es tanto lo que puedes hacer! ¡Es tanto lo que eres!, lo volverás a vivir y a ver.

Yo te pido que no pierdas esa inocencia ante la Presencia y la Energía de Nuestro Padre; que no pierdas ese amor, esa sensación de sentir siempre y estar unido al “Yo Soy”; porque lo que los perdió fue el creer ¡que ni siquiera necesitabas de Él!, lo que hoy le llamamos “ego”.

Todo en ustedes es tan complejo, pero es tan maravilloso, porque ¡tienen esas emociones!, que lo único que se les está pidiendo ¡que al lograr ese alineamiento!, ¡se una en una sola! en ese Gran Amor, en ese deseo infinito de compartir la verdad de “El Yo Soy”.

Son ustedes, que en esa complejidad, ¡pero en gran sencillez!, porque es lo que Nuestro Padre les da, quienes pueden hacerlo, quienes pueden sentirlo, ¡y entiendan y sientan! que ustedes ¡pueden crear todo lo que quieran!, siempre y cuando sea en amor, para seguir el camino en unidad.

¡Es muy importante!, porque con ello no tendrás limitante. ¡Nunca la ha habido! Eso es lo que te han hecho creer -amado hermano- porque de lo que tú tienes, de esa posibilidad ilimitada, por eso te han tenido y te han hecho permanecer cautivo, creyendo que en libertad seguías tu caminar.

Hoy ya es el momento de que Nuestro Padre lo ha dicho: “¡Ya no más! Ya deseo que mi hijo tan amado”, y tú preguntas: “¿Quién te ha creado?” Todo ello la respuesta la tendrás, pero ¿te sientes preparado realmente para escuchar todo?, no sólo de ti sino lo que a tu alrededor, ¿lo has visto, lo has utilizado?, ¿todo este holograma que tu mismo Ser ha creado? ¿Por qué no lo permites entonces seguir descorriendo el velo? Le pides que te deje ver quién eres tú ¡y que aquello que has cuidado con tanto celo! dejes fluir, para entonces realmente ser.

Esa decisión ¡eres tú el que la va a tomar!, porque Nuestro Padre -con infinito amor- ha cumplido ¡y cumplirá! la promesa de que nunca te va a forzar; que El desea que por cuanto tú sigas tu camino hacia Él, sea con esa ¡seguridad!, ¡ese deseo de con El ya estar!, ¡sabiendo quién eres y todo lo que te entregó!; que eres, también formas parte de esos Seres que al iluminarse empiezan a elevarse en esa Gran Libertad, ¡sin nada que les preocupe!, porque todo de Él lo tienen, y así nuevamente vivirán.

¡Y entonces tú vas a decidir si deseas esto compartir! Y no estoy diciendo que aquí; donde tú desees hacerlo; donde sientas en tu corazón. Y si tú, como esta hermana de la cual estás escuchando todo esto, que mi deseo y le dije a mi Padre: “Indícame dónde, y con infinito amor he de compartir tu palabra y todo lo que soy, porque viene de ti. Lo único que te suplico -y no es condición- que permitas que al final de esa labor, que solamente es pasajera y transitoria, pero que lo haré con infinito amor y para tu ¡más grande gloria!, me permitas volver a ti, ¡volver a tu lado!, y así escuchar lo que tú nuevamente me estés indicando”.

¡Qué maravilloso es! ¡Y sí!, lo estoy entendiendo, porque con ustedes he estado compartiendo de todas estas emociones que son ¡tan maravillosas!, ¡pero que a algunos los han frenado en sus evoluciones!, ¡por permitir que solamente las sensaciones temerosas! y estar en la creencia de que no son dignos ¡de escucharlo!, ¡de compartir!, ¡de hablarle!, porque al estar aquí hay una sentencia que cumplir.

¡Pero no es así!, amados hermanos. ¡No! Para que nuestro Ser cada vez en Gran Expansión, entendiendo ¡todo! lo que llegado el momento en alguna Estrella cuando estén en evolución ¡lo estés comprendiendo!, pero que a la par también lo estés compartiendo, todo lo que viene de ese Ser maravilloso, tan grande, y con tanto gozo decirle: “Tú no eres esto. ¡Tú lo eres todo!”, porque todo lo has recibido de Él.

Al seguir caminando en la Evolución; lo que la tecnología les esté mostrando -amados hermanos- es muy importante, y quien va a lograrlo será aquél, aquélla que siga escuchando desde su interior la voz de “El Yo Soy”, Nuestro Padre tan amado, ¡no de la hermana que les ha estado hablando!, sino de Él, ¡de todo lo divino!, para seguir en esa gracia total y abrir las puertas de par en par, y permitir que toda la Energía maravillosa se ancle en ti.

Y entonces, tendrás otra forma de ver ¡todas las cosas! Volverás a escuchar la voz de cada Elemental. También sentirás ¡que vibra y que vive! cualquier objeto que para ti hoy inanimado está. ¡Que puedes! con ellos conversar. ¡Que puedes! también con ellos a la par lograr compartir con cada hermano, ¡ustedes que aún se hacen llamar “Humanos”!

Todo esto, ¡y no es nada especial!, es solamente ir logrando abrir las puertas -como ya te lo dije- de par en par, de todo aquello que eres y que nuevamente lo vivirás, lo sentirás.

Permite pues que sea Nuestro Padre tan amado quien contigo esté hablando. ¡Tú! que cada vez ¡más y más! te estás entregando, ¡no de esto!, de lo que en tu hermana estás escuchando, sino Él directamente, más abierto, ¡tan confiado!, porque te sentirás protegido, ¡guiado!, como siempre ha sido. Es lo que ha hecho Nuestro Padre con cada uno de sus hijos tan amados.



Marzo 27, 2019
Ángel Ráh.

Y luego de todo esto, ¿qué puedo decir?, que cada uno de ustedes al haberlo escuchado y algunos entendido, ¡porque sabemos y hemos visto! que hay quienes lo han practicado, ¡ahí!, en lo que dicen que es “la soledad”.

Pero no se han sentido solos. ¡No! ¡Eso lo saben! ¡No más! ¡Todo! “El que todo lo puede” lo ha estado viendo, y en ustedes ha estado removiendo lo que al sembrar -como la hermana lo ha dicho- esa semilla que tendría que florecer, y ya está tan cercano el momento en el cual se va a cosechar.

Cada filamento de lo que en su interior, lo que llaman “El ADN”, ¿saben hermanos lo que cada uno de ello contiene?: ¡lo que te hace vivir!; lo que tú llamas “que te hace respirar”; lo que en su totalidad verás en toda la expresión y dirán: “Esto es apocalíptico”.

¡Sí!, porque se dijo que en el final de los tiempos, por el cambio que se viviría; lo que todo revertiría para bien y para gloria, y sobre todo para la gran alegría ¡de ustedes hermanos!, los que resistirían de todo esto, yvivir entonces el Paraíso Sagrado que El ha prometido ¡y que algunos han dicho que no es un lugar!, que es una Dimensión.

¿Y por qué no? -yo te pregunto- sigues insistiendo para ello experimentar, ¡para vivirlo!, ¡para que entonces tú sepas de qué se ha estado hablando! Y entonces, ¿por qué no?, puedas compartirlo a tu hermano.

Estás viviendo esos grandes momentos, ¡aunque aún todavía haya quienes se están resistiendo!, pero como lo han escuchado: ya no hay marcha atrás. ¡Ya no es posible!, porque en esta oportunidad aquél que ya lo está entendiendo; aquél que al estarse preparando ¡para todo lo que El les esté mostrando!, y entonces sientas dentro de ti, sorpresiva, instantáneamente, que siempre lo has tenido y que está en ti y el recuerdo ¡rápidamente! te hará accionar. Que yo te diré que no sólo tus hermanos, ¡hasta tú te sorprenderás!, ¡pero todo en Gran Amor!

Y entonces también preguntarás: “Y luego de esto ¿ya no hay más?” ¡Claro que sí! ¡Estás aquí para cumplir! ¡Cada uno de ustedes tiene una misión!, pero la primera y la más importante de todas ¡es! que tú recuerdes y te permitas tu liberación; porque luego de ello ¡será instantáneo! lo que tú emanes, ¡lo que emitas! para cada uno de tus hermanos. Dondequiera que te encuentres serás ¡precisamente lo que se te ha dicho!: ¡ese Pilar de Luz! que donde vaya, con su sola presencia “El Yo Soy” estará actuando a través de ti, mostrando a tu hermano.

¿Acaso no lo has deseado? ¡Yo te dije que te hablaría! de todas estas cosas, ¡y tal como lo ha dicho mi hermana!, así, ¡tan sencillo!, ¡para que tú lo sientas!, para que luego lo vivas. Esto solamente es la introducción de lo que luego en Gran Amor, y tú al estarlo entendiendo lo habrás ¡y lo estarás llevando a la acción! de todo lo que se te esté diciendo, ¡en el Gran Recuerdo!

Cuando tú te liberes; que de los que aquí se encuentran he de decirles que hay quienes ¡ya! lo están logrando, verán los demás ¡de qué manera! estarán accionando.

Y ya no debe haber en los demás, ni el juzgar, ni criticar, ni cuestionar, ¡mucho menos condicionar!, ¡ni pretender separar! ¡Tomen en cuenta! -he de repetirlo- que los que han estado escuchando a través de lo que la hermana, porque Nuestro Padre ha sido muy claro y se lo ha pedido, que el estar con ustedes y hablar de todo esto ¡lo han atestiguado!

Se dijo en un principio ¡quiénes! empezarían y estarían abriendo los dones y estarían accionando; pues quiero decirles que esto no se ha detenido; ¡que no es casual con los que ha compartido! ¡Tiene muy claro! que la Causa Divina de “El que todo lo ha creado”, al estar compartiendo con ustedes está entregando el efecto que ya deseado ustedes lo estarán mostrando. ¡Algunos ya lo están haciendo!

Y aquí no me refiero a alguien en especial, porque todos por igual -hermano, hermana- ¡todo depende de cada uno de ustedes!, ¡de qué manera! -al seguirse preparando- permiten que llegue su Gran Momentum de Amor.

Ustedes lo que han presenciado hoy por hoy, al seguir adelante, tal como lo dijo: lo estará precipitando ¡cada vez más!

¡Y mi hermana no piensa en que sola se estará quedando! ¡No! ¡Ella tiene muy claro cuál es su misión y quiénes la estarán acompañando!, ¡de qué manera y dónde! “El Creador” le pedirá, porque El directamente -al convocar- los va a preparar.

Y no son palabras al aire hermanos, pero tampoco pidan una fecha en especial. Para nosotros no hay tiempo lineal; es el aquí y el ahora, de lo que ustedes, porque los estamos observando; estamos esperando el Gran Momento en el cual ¡nos permitan! y con ustedes estar interactuando.

Cada vez ese momento está ¡tan cercano! Tan sorpresivo será para algunos, porque lo van a vivir, y será dónde y cuándo ¡El! ya lo tiene designado y preparado. ¡Y yo lo digo con gran alegría!

También agradeciendo que lo que se les pidió, ¡todos! -o casi todos- lo traen consigo. Será ¡y es! -en Gran Amor también- una gran protección ¡para ustedes mismos!, empezando contra ustedes mismos, ¡para que no se permitan ya!, pensar, a sentir y hablar de manera negativa. ¡Suelten todo ello! ¡Sigan adelante! ¡Vean y agradezcan cada día!, que vivan todo lo bello.

Y hablo de lo que vivan aquí -como lo ha dicho mi hermana- en esta temporalidad, que es pasajera, ¡pero mucho han aprendido! ¡y sabemos! que lo que no debe de ser ¡no lo repetirán!, porque no es casual los que sigan firmes, adelante.

Que ya “El Creador”, a quien llaman “Padre” indicará. Les hará sentir de qué manera necesita de ti, ¡y nosotros también!, ¡porque qué mejor que desde aquí!, con la ayuda, también en la asistencia de a quien llaman “La Madre Gaia”, que tan amorosa los abraza. También al hacer su invocación sientan y agradézcanle con Gran Amor, cómo los ha abrazado; cómo a cada uno de ustedes ¡tanto les ha entregado!, por la misma voluntad de “Aquél ¡que todo lo ha creado!”

Lo que ustedes harán en este Proyecto, que sólo en infinito amor ¡y en Gran Amor!, ¡inagotable!, incondicionalmente, eso es lo que ustedes -en el nombre de al que llaman “Padre”- hablarán a sus hermanos.

Ya no se pregunten, ¡no se juzguen!, no digan: “¡Pero es que he hecho!” ¡Y peor tantito!, si alguno de ustedes dice: “Es que mi hermano, mi hermana, lo que ha hecho, lo que ha dicho”. ¡Olviden todo eso! ¡Háganlo a un lado! Piensen solamente en el amor ¡que El les ha entregado! y que ustedes al estar todo esto escuchando, es porque se están permitiendo y se están preparando ¡para volver a vivir! lo que fueron; lo que ¡al resurgir! volverán a ser.

Y entonces solamente con la guía y el amor de Él -amados hermanos- este es el gran tiempo del resurgimiento de esos Seres maravillosos que son ustedes.

En este proceso hay tantas cosas que les han compartido. ¡Hay otras que les han dicho!: “Si tú practicas esto ¡más rápidamente! tendrás y abrirás”. ¿Y tú qué es lo que entiendes?, si precisamente -como la hermana insistió ¡tantas veces!- en Corintios 12 lo dice; ¡quiénes y cuántos! al abrir los dones, habilidades.

Pero ¡que nunca! uno sintiera que era más lo que podía; que estaba más preparado que cualquiera, porque entonces el ejemplo que te da: “¿Cómo es posible? que en el cuerpo, si te hace falta algo, ¿acaso te sentirás completo? ¿Acaso tus ojos pudieran decir?: “No necesito de los oídos, porque con sólo ver”, ¡pero también el escuchar es tan importante!”

¡Todo tiene un por qué!, y en esa habilidad ¡El es el que va a amalgamar! ¡El y sólo El! es el que a cada uno de ustedes instruirá. Donde tú sientas que esa es la Energía que te hace eco en tu interior y que con esa guía, en ese Gran Amor puedes lograr todo lo que tuviste un día y que creíste que se perdió.

Hermano; ¡cuando sobrepases todo eso!, ¡aprovecha esta gran oportunidad!, porque a la dispensa que a quien llamas “Maestro”, todos ellos que pidieron por cada uno de ustedes, depositando toda la confianza y el deseo de saber ¡que en esa continua alabanza que ustedes han hecho a Él!, ¡están dispuestos a soltar! lo que empezaron a guardar ¡y que no debería ser!, porque tú -al volver- lo harás ¡en esa pureza! que siempre ha estado y que tenías al llegar.

¡Nada de aquí te estarás llevando! ¡Y no sólo estoy hablando de lo terrenal!, ¡sino de lo que has estado guardando!: ¡esas emociones! que cuánta tristeza y cuánto dolor te han estado acarreando.

Es importante que las sueltes -hermano- porque entonces con gran alegría abrazarás nuevamente lo que tuviste un día, y en gran abundancia ¡todo de Él lo vivirás!, ¡y expandirás! de manera ilimitada lo que El preparado te tiene y que te entregará.

Entonces sabrás ¡que no solamente estás caminando en la Dimensión que dicen que ya están!, sino que será ¡mucho más!, porque entonces al abrir esa puerta que tenías y que había permanecido cerrada, porque así había sido tu voluntad, al hacerlo estarás permitiendo que nosotros ¡ya no solamente nos estés escuchando!, también nos estarás viendo.

Y como ha dicho al que llaman “Gran Maestro”: “Desde la Octava desde donde les hablo”, cada vez estaremos ¡más cercanos!, y en esa Dimensión, en ese Gran Portal, que para ustedes “El Yo Soy” estará abriendo, entonces dejarán de hacerse llamar “Humanos” y verán ¡todo! nuevamente con los ojos del amor; lo que viene de la Fuente al irte elevando, y al mismo tiempo aquí seguir caminando.

Hermano; si tú dices que nos estás necesitando, ¡nosotros también!, para que se cumpla la Promesa Divina ¡de Él!, que aquí el tiempo ha llegado y antes ustedes -al estarlos preparando- se les estará mostrando. Eso está ¡tan cercano!, porque te estás dando cuenta y estás empezando a vivir ¡el hoy, el aquí!, ¡el presente!, y cada vez más fuerte.

¡Tú resistirás!, ¡porque por Él te estás dejando llevar! y por nuestra compañía y asistencia. ¡Permite! para que sientas nuestra Presencia y de Él ¡toda su Esencia!, que sigamos adelante ¡unidos! hasta lo que algunos llaman “el final”, que solamente es el principio, el cambio de un Nuevo Ciclo, en el cual en Gran Amor Multidimensional caminarán.

Yo soy tu hermano: ¡Ángel Ráh! ¡Nombre terrenal!, que de la Consciencia Cósmica te ha empezado a hablar. La Universal se abrirá paso, para que tú en ella también puedas estar.

¡Y dejo para ustedes! esta Energía ¡tan viva!, ¡que sólo viene de Él! ¡Que les siga haciendo compañía! a todos ustedes, en esta Estrella que ¡más y más se está elevando!, pero que ustedes -hermanos- al estar concientizando en la Apertura Sagrada de lo que El te está entregando.

Está muy cercano el momento en el cual el Gran Símbolo Sagrado se les estará entregando.

¡Ángel Ráh!, les estuvo de todo esto hablando.



Marzo 27, 2019
Saint Germain.

¡Y amados!, ¡amadísimos hermanos! ¿Qué puedo decirles? ¿Por dónde empezar? Hay tantas cosas que insisto, ¡les hablaré!, ¡pero todo irá cambiando! conforme en esta ilusión lo que ¡ustedes! en el paso de lo que llaman “días” siguen caminando.

¿Y qué me cuentan? ¿Cómo se han sentido?, lo que han resistido, o lo que han resentido, ¡amados!, ¡amadísimos hermanos! Pero les insisto: todo es parte de la preparación, el Gran Proceso Divino.

Amados hermanos; ustedes lo sentirán y sabrán lo que viene de Él, ¡que no es enfermedad! y que terminando este ciclo de preparación estarán listos y dispuestos para entrar en acción a lo que Nuestro Padre tan amado está indicando; porque ya nos dio para esta preparación una instrucción, misma que nosotros sólo esperamos a que ustedes terminen este proceso de lo que en su templo está recibiendo.

Y mi hermana también, hay cosas en las cuales también le está pidiendo que esté muy atenta. ¡Sabemos que lo está!

Y tal como les dijimos; quizá en estos días no haya tan regularmente el estarse reuniendo, ¡pero! a ustedes les daremos -amados hermanos- una tarea en la cual estarán cada uno de ustedes -de acuerdo a como lo sientan y lo elijan y lo quieran- haciendo. Ahí es donde ustedes sabrán ¡cuánto se aman! y qué tan dispuestos están. ¡Ya se los diremos!

Todo tiene un “porque” y un “para qué”, y lo que sí les pedimos que tengan muy claro es que lo que viene de Nuestro Padre cada vez, como en este instante, de todo lo que se les ha hablado, pero siempre estar conscientes ¡que los necesitamos!, ¡que su hermano Saint Germain los necesita! por todo lo que se está viviendo ¡y más!, porque estaremos cumpliendo esa gran cita, de lo que la Avanzada -al haberlo prometido- en el juramento que en ustedes en el recuerdo estará presente.

Sabrán ¡qué es! lo que para estar en este tiempo ¡tan importante! y que ¡ay amados hermanos!, ¡tanto les están diciendo! que pobre de aquél que al estar aquí lo que estará viviendo; que lo que sucederá en éste y en aquél lugar; lo que nuestros amados hermanos Elementales están haciendo y harán.

¡Y yo les pregunto! -ya que este día es el día de las preguntas- de acuerdo con mi hermana: ¿qué han hecho? De todo lo que nosotros les compartimos ¿qué es lo que en ustedes está presente y fuerte? Que cuando esto sucediera, supieran y sintieran que tienen la fuerza y la protección, la fortaleza de Nuestro Padre, porque ¡es cuando ustedes entrarán en acción!

¡Sí!, ¡y hacerlo sin ningún temor!, porque sabiendo que en esa fe, que en esa fuerza que ¡sólo El! les dé y nosotros también acompañando, haciéndonos sentir, ¡mostrando!, para que todo lo que empiecen a vivir, al hablar de ello a sus hermanos, y que ellos vean, porque no solamente con palabras, ¡tal como lo hemos dicho de mi hermana!; que no solamente ha venido de ello a hablar.

¿Están preparados por lo que verán? Yo les digo: no falta mucho, porque del tiempo lineal que han vivido, ¡ahora es! el aquí, el ahora, el tiempo presente.

Entonces -amados hermanos- con todo aquello que les entregamos, ¡y la amatista! que yo les pido que en ustedes esté ¡fuerte! Mira hermana; a ti que te pedí cuando te entregué y te dije: “Que esté siempre contigo y en ti”. ¡Ya he empezado a hablar contigo! Empezarás a recordar.

Y esto que te digo: en ti todo ha empezado a cambiar. ¡Te pido que te reconcilies contigo misma! y con todos aquellos con los que has creado un abismo, porque ¡así como te necesito y como mi Padre te está necesitando!, es importante que primero tú te estés reencontrando. ¡Sé que lo harás! Para ello con mi hermana vas a hablar.

¿Y por qué lo digo aquí delante de todos ustedes? ¡Porque no fue casual!, así como tampoco que a mi otra hermana, aquellos que estuvieron presentes, ¡y mi hermano!; lo que les entregamos ese día ¡tan importante! Ustedes verán -hermanos- cómo en ellos lo que va a empezar a cambiar.

No fue solamente un acto circense, como algunos pudieran haber pensado. ¡No hermanos! ¡Lo que viene de Nuestro Padre y lo que El está entregando! Por eso se le pidió a mi hermana en su cuerpo terrenal: “¡con ojos cerrados!”, para los primeros que ya estaban señalados, y luego para quien lo que habrás de pedir. Ya verán el porqué.

¡Ustedes han atestiguado quiénes! en todo este tiempo en el cual han escuchado, qué es lo que han logrado. Y ustedes han dicho: “¡Ahh, sí!, pero se han alejado”. ¡No se equivoquen!, porque en el comportamiento humano, tanto como aquellos que lo -en apariencia- han hecho, ¡ustedes también! lo que han mostrado.

Es por eso que se dice, ¡y tan fácil como -al iniciar- mi hermana lo dijo!: “Aquél que esté libre de culpas que lance la primera piedra. Y ¡oh sorpresa! ¡Nadie tenía piedras!

¡Amados! ¡Amadísimos! Nosotros ¡así! -lo que son- los amamos, pero lo que son en cuanto, ¡no te equivoques hermana!, estoy hablando de lo que es ¡tu Ser!, lo que eres tú en la pureza que mi Padre te entregó. También te lo digo a ti hermano: ¡así los amamos!, porque sabemos que de lo que ustedes se habían revestido ¡lo están soltando!, y entonces viene lo maravilloso, lo fuerte, lo importante; ¡la verdad de lo que tú eres!

Y aquí está tu hermano, para entonces con todo el amor poderte acompañar, ¡y es mi deseo que lo hagas! Y si quieres hacerte llamar “estudiante”, “Chela” -que tú sabes cuál es la diferencia- (Nota 1), pero ante la Presencia y la Esencia de Nuestro Padre, ustedes en especial, la preparación ¡es! para algo -en el “Proyecto Shirón”- lograr; Proyecto que ¡El ha señalado! y que se está realizando ¡y que se logrará! ¡Claro que sí!

En el nombre del Padre que será y ustedes lo vivirán, y serán ¡y son!, ¡piezas muy importantes! que al estarse amalgamando estarán mostrando que todo lo que viene de Él y quien se está entregando, ¡eso es! lo que en su nombre estará compartiendo, ¡amados!, ¡amadísimos!

Estoy regocijado, porque como lo hemos dicho: antes de que finalice ¡esto! que ustedes llaman “año” estaremos ¡tan juntos!, tan seguros, ciertos, ustedes ¡sin ya ninguna duda! de que todo lo que sienten y lo que recibirán viene de “Aquél que todo lo puede”.

Tal como lo ha dicho mi hermana: no es ella ni será ella la que estará señalando; que a través de ella Nuestro Padre hoy por hoy que ustedes todavía al estarse preparando están necesitando escucharlo, como en este momento, vivirlo; pero por cuanto más se están acercando a ese Gran Momentum en el cual seguirá Su Presencia, Su Esencia, pero compartiendo ¡como lo que somos!: ¡como igual!, porque entonces ya estarán en esa Consciencia elevada, ¡universal!, porque la van a tener. ¡Claro que sí! ¡Como que me llamo Saint Germain!

Amados hermanos; permítanos acompañarlos, ¡estar con ustedes logrando!, y en ese Gran Amor que mi Padre, que Nuestro Padre, yo al vivirlo y estarme liberando le hice la petición con infinito amor, y le dije:“Permíteme que todo esto que estoy logrando en esta perfección ¡que tú nos estás entregando!, ayudar también a mis hermanos; que lo logren; ¡que lo vivan!”

Que como al estar ustedes descubriendo y despertando dicen: “No hay palabras para explicar. No hay palabras para de esto hablar con mi hermano; ¡lo que siento!; lo que está resurgiendo; lo que ¡de mí está reviviendo!; ¡lo que estoy redescubriendo!, ¡es maravilloso!”

¿Recuerdan lo que les decía en un principio? ¡Qué hermoso!, ¡qué grande!, ¡qué maravilloso! Eso es lo que ustedes -hermanos- estarán logrando, todos y cada uno. ¡Lo estaremos reafirmando! y confirmando.

Sólo les pedimos que sigan adelante; que escuchen la voz de Nuestro Padre, y también -si nos permiten ayudarlos- compartirles, con todo nuestro amor guiarlos, hasta que llegue el Gran Momento en que seguirán nuestra compañía, pero será como ya se los hemos dicho: “Llegará ese día en el que ¡mano con mano! nos estaremos acompañando, asistiendo y compartiendo como hermanos; que también de ese infinito amor que Nuestro Padre nos entregó lo estén necesitando”.

Sigan abrazando -por favor- la Llama Violeta. ¡Que ella les envuelva! ¡Transmuten todo aquello que cada vez es menos!, ¡que les esté estorbando!, para permitir que la Luz de Nuestro Padre ¡los esté guiando!, y mi corazón -en el Corazón de Corazones- también en infinito amor ¡entregado a ustedes!, que es de gran valor por todo lo que tiene, lo que contiene, y que están abriendo, amados hermanos.

Y que la Gran Amatista ¡les acompañe!, para que limpie y proteja, como la pirita, que Nuestro Padre les entregó. Y también sabes el valor, lo que les entrega el cuarzo rosa y el cristalino. ¡Ay amados hermanos!, porque con eso también sentirán y sabrán cada uno quién es y de dónde vino.

¡Es maravilloso! ¡Es grandioso!, porque en estos días les estará protegiendo, pero también ¡entregando y diciendo! quiénes son estos Seres maravillosos que han estado escuchando.

Y yo -en “El Yo Soy”- al recibir de mi amado hermano, con infinito amor el quedar al cuidado y a la guía ¡de todos mis hermanos!, por eso necesito que ustedes me estén acompañando; porque vamos a lograr ¡que ésta Era de Amor!, ¡ésta Era Dorada! -con la guía de “El Yo Soy”- ¡sea la más gloriosa!, ¡maravillosa!

Y he de hacerles una promesa: que en esa Esencia que El te entregó, a cada uno de ustedes, aquellos que se acercaron y que con mi hermana han estado y que desean seguir adelante para lograr volver ¡hacia Nuestro Padre!; que sabrán y vivirán la Era Dorada que mi Padre me ha entregado y que estará bajo el cuidado de ¡Saint Germain!

Yo se los prometo hermanos, ¡pero sigan adelante! bajo la guía y la inspiración y el amor infinito de “El Yo Soy”.

Es por eso que les entrego la Energía que con Gran Amor mi Padre me entregó un día: la Llama Violeta, que en este Gran Proceso, que a cada uno de ustedes los envuelva, los purifique y transmute todo aquello que de Él, de la Luz, de la Gracia Divina no venga, amados hermanos. ¡Y a todos! los que en esta bendita Estrella están caminando; ¡a los Elementales!; a todos mis hermanos.

¡Sientan que los amo! Vamos camino a toda esa Luz ¡tan grande!, en este Despertar que más que colectivo, ¡general!, de todos mis hermanos que se hacen llamar “Humanidad”.

Yo, ¡Saint Germain! hago entrega de la Llama Violeta y la Gran Amatista, a todos ustedes, ¡amados!, ¡amadísimos hermanos!

Y de lo que les voy a pedir ya estaremos hablando. Con infinito amor ¡la Gran Preparación!, porque les he hablado de un viaje y Nuestro Padre indicará. Su hermano les dirá dónde, por qué y para qué será. ¡Amados! ¡Amadísimos hermanos!

Que yo soy ¡Saint Germain!

Nota 1.- “CHELA ES TODO ESTUDIANTE DE UN MAESTRO ASCENDIDO QUE ESTÁ TOTALMENTE DEDICADO A UNA CAUSA MAESTRA, Y QUE DIARIAMENTE DEDICA UNA PORCIÓN DE SU TIEMPO LIBRE A ESTA SANTA MISIÓN”.


Marzo 27, 2019
Sananda.

Y todo en la Luz de la verdad; la verdad infinita que mi Padre tan amado entregará.

Es el Gran Momento en el cual ¡todo a la Luz saldrá!, lo que verdaderamente de Nuestro Padre viene.

¡No se sorprendan de lo que escucharán!, de lo que cada uno de ustedes -amados hermanos- verán, porque también de a quienes se eligieron y que presentes están; lo que sintieron y vieron, luego de hoy empezarán ¡a recordar!, ¡qué es! lo que mi Padre tan amado, en cada uno está y estará indicando. Es por eso que de esto en este instante estoy hablando.

¡Es muy necesario!, en ustedes hermanos, hacer sentir ¡lo que viene de Él! y que está aquí, en la Gran Consciencia Crística. ¡Sabes lo que es! y que significa que el Cristo ¡en ti está! y en especial en quien y a través de quien hablará.

Yo sólo te digo -hermano querido- que todo esto de mi Padre viene y en ti está.

Es por eso que el Rayo Rosa, ¡Dorado!, a ti te entregará, y que -en su nombre- tu hermano ¡Sananda! de esto te está hablando.

Y el mudra de amor, con todo el corazón ¡en ti y para ti!, hoy tu hermano entregó -amado hermano- que lo que viene de mi Padre en ti lo estés sintiendo, para dejar de ser humano.

Que yo soy ¡Sananda!, tu hermano.

Les entrego con amor la Llama Trina, de “El Yo Soy”.



Marzo 27, 2019
Alexa. (2)

Que todo lo que hasta hoy algunos lo han sentido incierto, en lo perfecto que viene de mi Padre, ¡de Nuestro Padre!, recibirás todas las respuestas y con gran acierto.

En lo individual en ti florecerá el recuerdo glorioso del “por qué” y “para qué” aquí estás. Será en algunos paso a paso y en otros estará acelerando, porque mi Padre ya a ustedes los está necesitando, y está indicando a quiénes se estará convocando, en un día especial, en el que El será quien empiece a hablar.

Que así como hasta hoy, en Gran Amor te sigas preparando y esperando. Que todo lo que está llegando desde el Cosmos Sagrado, ¡en cada uno de ustedes! -al estar repercutiendo- su cuerpo está sacudiendo; pero que no te preocupes por ello, ¡que ya todo está cada vez más y más siendo menos fuerte! y estará terminando.

Luego de ello, que estén preparados, porque todo estará cambiando. Serán llamados para que de la manera como El -mi Padre- esté indicando, se les estará hablando, porque al estarse preparando ya indicará dónde los está necesitando.

Hermano; si ese es tu deseo, cumplir y seguir Su Voluntad, ¡que mira que lo hará de una manera directa!, para que no tengas duda que “El Yo Soy” será.

Eso es lo que en este instante me está indicando.

Dice que al hablarte sabrás ¡plena y total! que es “El Yo Soy” el que en ese momento contigo está.


Por lo pronto que sigamos adelante en esta preparación y llevando con nosotros lo que El nos entregó. Que es muy importante para el cambio que se está dando en tu interior.

Eso es lo que dice Nuestro Padre.


Que para su gloria no será solamente historia lo que se hará. Que por eso se ha insistido en que un Gran Legado quedará.

Lo que desde un principio lo que ha mantenido; lo que aquellos que hemos llamado “Profetas”, lo que han resistido; lo que ustedes han leído; lo que les han dicho; todo ello muy claro lo tendrán.

Pero también -acto seguido- lo que sucederá, para que quede también para la posteridad, porque de este Tiempo Glorioso, de esta Era Dorada ¡mucho se hablará!, ¡y nadie! de lo que aquí se viva lo olvidará.

Eso es lo que Nuestro Padre te dice hermano. Que presente lo tengas, porque cuando lo estés viviendo ¡lo recordarás!


Que uno de ustedes, de los que están aquí presentes, tendrá una experiencia ¡única!, que es importante que cuando la estén viviendo ¡también su hermana lo va a estar sintiendo!, lo sabrá, porque luego aquí lo estará compartiendo.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario